<<En una habitación que se respiraba frío y no era solo el frío que entraba por el balcón abierto,era otro tipo de frío,un frío que te hiela las entrañas. En aquella habitación tan solo alumbrada por la luz de la luna, un llanto desconsolado cortaba el silencio. Un bebé en una cuna, solo, y lentamente iban acercándosele unas garras largas,deformes y negras. De repente, el monstruo, se abalanzó contra la cuna y el bebé...>>
Ya bien entrada la noche, cuando todos dormían, un sueño aterrador despertó a Victoria.
Envuelta entre sábanas un sudor frío le recorría el cuerpo y su pulso estaba tan acelerado que pensaba que iba a explotar. Se incorporó e intentó relajarse respirando profundamente, pero no le dio resultados.
Aquella pesadilla estaba comenzando a preocuparla de verdad... Tendría que hablar con C de ello, debía buscar el momento adecuado. Con suerte, le daría alguna respuesta.
-Victoria ¿te encuentras bien? Llevas un rato moviéndote y haciendo ruidos extraños...-Cuando la chica alzó la mirada encontró a Dirian mirándola preocupado.
Entonces le contó lo de la pesadilla y él con cara de ternura le ofreció tumbarse a su lado hasta que consiguiese dormirse.
-¡¿C-c-cómooo?!-Exclamó Victoria sonrojándose.
Dirian se sonrojó al darse cuenta de lo que había propuesto.-Discúlpame... No volveré a decir algo así.-
-Bueno... En realidad puede que fuese buena idea, en fin, no creo que pueda volver a dormirme...-
Mientras Dirian acercaba su saco de dormir a Victoria esta le dijo:-¿Qué hacías despierto a estas horas?-
-La oscuridad... La temo más que a nada... No podía dormirme así como así...-
-Vaya... Estamos apañados...-
-¿No vas a burlarte de mí..?-
-¿Por qué? ¿Porque te dé miedo la oscuridad? Ya lo noté en la cueva, aparte de que no estaría bien burlarme... ¿Para qué iba a hacerlo? Eres mi amigo...-
-Tienes razón... Eres muy buena chica.-Dirian sonrió y se tumbó.
Entonces, Victoria apoyó la cabeza sobre su pecho y él le echó los brazos por encima.
-Esto es raro...-Habló Victoria.
-Sí, bastante.-
-Pero... Me siento muy bien así.-
-La verdad es que me da seguridad.-
Así los dos se durmieron sin darse cuenta.
Era por la mañana temprano cuando Dirian se despertó, seguía abrazado a Victoria, lo cual le hizo sonrojarse.
-Ya veo... ¿Creías que así la protegerías mejor del frío o en caso de ataque enemigo?-Dijo Emilie mientras sostenía su espada con ambas manos, parecía haber estado entrenando.
Todos los demás seguían durmiendo, de repente Victoria abrió los ojos y se incorporó.
Encontró a Dirian sonrojado mirándola, entonces, notando sus mejillas encendidas, se levantó rápidamente.-Bueno, habrá que ir despertando a los demás para ponernos en marcha y eso, ya debe de quedar poco.-
Dirian lanzó una maldición por lo bajo.
Victoria maldijo en su mente a la noche, por haber acabado tan pronto. A ella le hubiese gustado seguir abrazada al chico...
Emilie asintió y entre los tres los despertaron a todos, desayunaron las sobras de la noche anterior y se pusieron en marcha. La disposición en los caballos seguía siendo la misma. # # #
Llegaron abajo a mitad de la mañana del tercer día de bajada.
La nieve y el hielo estaban totalmente derretidos allí abajo del todo, solo quedaba el frescor puro de las montañas y ante ellos se extendía un gran prado con un río surcándolo, al otro lado de este se podía ver la gran y vasta extensión del bosque de Firyuk.
Tyler, alegre, espoleó a Bruma y a todo galope atravesó medio prado, estuvo a punto de tirar a Lianndra de la silla al hacerlo.
Al llegar hasta allí frenó porque la chica le gritaba ferozmente.
El bonito ambiente que reinaba antes se fue oscureciendo por unos nubarrones negros que se aproximaban. A Victoria empezaron a darle escalofríos y temblores por todo el cuerpo.
Dirian lo notó.-¿Estás bien Victoria?-
-N-no.-Contestó ella.
C dio la voz de alarma y enseguida se pusieron todos a la altura de Tyler y Lianndra.-Se aproximan las tinieblas...-
Desmontaron de los corceles y dispusieron las armas, Emilie descendió con Plume y se situó junto a Victoria.
¡Bienvenido al portal que comunica con Glishes! Si estás aquí es porque estás preparado/a para adentrarte en este mundo... No tengas miedo, déjate llevar.
lunes, 12 de octubre de 2015
·Capítulo 31: Las 4 espadas ·
-Como imaginaba...-C habló desilusionada.-
Victoria se había quedado perpleja... Y encima su cerdita, o lo que antes había sido su cerdita, decía que ya lo imaginaba... ¿Hasta dónde llegarían sus conocimientos? ¿Cuántas cosas ocultaba?
-¡¿N-Necrea!?-Exclamó Lianndra muy sorprendida.
-¿Cómo llegaste allí?-Preguntó Tyler.
Entonces Andrew habló.-La pregunta correcta sería... ¡¿Cómo salió de allí!?-
-Calmaos... Dejad que se explique...-Añadió Dirian.
-Bien...-Procedió la chica una vez se hubieron calmado todos.-Todo fue gracias a mi maestra. Ella me avisó de que la espada estaba allí, fui sin dudarlo cuando ella me lo pidió, con su ayuda conseguí llegar al templo donde se hallaba oculta y sacarla de su pedestal... Un arrdfij* muy poderoso la llevaba en la espalda. Pude salir de allí gracias a Plume, esa fue la última vez que vi a mi maestra, ella quiso quedarse porque decía que le quedaban asuntos pendientes.-
Todos se quedaron boquiabiertos al escuchar todo aquello de sopetón.
A Victoria le había resuelto una duda, pero había creado muchas más... Su maestra, la espada, Necrea... ¿Qué relación tenía todo aquello?
-¿Sabes lo que conlleva tener esa espada..?-Preguntó finalmente, C.
-Por supuesto.-La chica de pelo plateado tenía el semblante serio y frío.-Y no me importa, ya me crucé con la portadora de otra espada...-
Kazen negó con la cabeza.-No puedes haber salido ilesa después de luchar contra otra portadora...-
La mirada de Emilie se tornó a una expresión de dolor.-Sí... Tengo una cicatriz que me recorre todo el costado... Pero ella tampoco salió ilesa, supongo que ese es mi consuelo...-
-Sinceramente creo que eso no me bastaría a mí.-Dijo Andrew.
Dirian, impresionado, preguntó:-¿Estáis hablando de la “Leyenda de las espadas”?-
Paz afirmó con la cabeza.
-Al final nos cruzaremos con todas las leyendas...- Se burló Tyler.
-¿Y de qué trata la “Leyenda de las espadas”?- Los demás no podían creerse que Victoria preguntase aquello.
Kazen, con expresión de decepción reprochó
a C.-Parece ser que de verdad no le enseñaste nada... Pero ni siquiera atendía en la escuela...-
-No es justo... ¡Apenas pude ir a la escuela!-Protestó Victoria mientras C ponía cara de pena.
Entonces Dirian se ofreció a contar aquella leyenda.-«Hace siglos, se crearon 4 espadas. Cuatro espadas para luchar, cuatro espadas para unirse y destruirse, cuatro espadas mágicas que lo cambiarán todo... La espada Blanca, la que muestra el camino; La espada Negra, la que acaba con lo oscuro; La espada Dorada, la que porta el poder y la espada Plateada, la que las unirá y destruirá.>>
-Me crucé con la portadora de la espada blanca... Casi no lo cuento, vi a la portadora de la espada plateada pero era... Ella era una niña, estaba asustada así que la dejé ir. Ni si quiera sé cómo pudo conseguirla...-Habló Emilie preocupada.
-¡Tú tienes la espada negra, la que acaba con lo oscuro!-Exclamó Lianndra.
Emilie asintió.
-¡Con razón derrotaste tan fácilmente a aquellos arrdfij*!-
-<<La espada Blanca, la que muestra el camino...» ¿El camino hacia dónde?-Preguntó Andrew pensativo.
Tyler removía la nieve de delante de su saco con un palo, absorto en sus pensamientos.
Victoria siguió la conversación.-No solo eso, creo que la "Portadora de la espada plateada" ya ha comenzado su parte de la leyenda: «La espada Pateada, la que las unirá y destruirá...»
Ya hizo que Emilie tuviese piedad con ella, así que ya ha comenzado a unirse... Y a saber si ha tenido contacto con alguna de las otras dos portadoras.-
Tyler suspiró.-Hablando de esto no vamos a sacar nada en claro...-Al final había dibujado una espada en la nieve.
Victoria pensó que no dibujaba nada mal.
Lianndra ignoró a su amigo.-¿Por qué todas las portadoras de espadas son chicas?-Bostezó.
A lo que Emilie contestó.-No todas son chicas, el portador de la espada dorada es un chico en esta ocasión.-
Al ver que Lianndra seguía bostezando decidieron que era la hora de irse a dormir.
Victoria se había quedado perpleja... Y encima su cerdita, o lo que antes había sido su cerdita, decía que ya lo imaginaba... ¿Hasta dónde llegarían sus conocimientos? ¿Cuántas cosas ocultaba?
-¡¿N-Necrea!?-Exclamó Lianndra muy sorprendida.
-¿Cómo llegaste allí?-Preguntó Tyler.
Entonces Andrew habló.-La pregunta correcta sería... ¡¿Cómo salió de allí!?-
-Calmaos... Dejad que se explique...-Añadió Dirian.
-Bien...-Procedió la chica una vez se hubieron calmado todos.-Todo fue gracias a mi maestra. Ella me avisó de que la espada estaba allí, fui sin dudarlo cuando ella me lo pidió, con su ayuda conseguí llegar al templo donde se hallaba oculta y sacarla de su pedestal... Un arrdfij* muy poderoso la llevaba en la espalda. Pude salir de allí gracias a Plume, esa fue la última vez que vi a mi maestra, ella quiso quedarse porque decía que le quedaban asuntos pendientes.-
Todos se quedaron boquiabiertos al escuchar todo aquello de sopetón.
A Victoria le había resuelto una duda, pero había creado muchas más... Su maestra, la espada, Necrea... ¿Qué relación tenía todo aquello?
-¿Sabes lo que conlleva tener esa espada..?-Preguntó finalmente, C.
-Por supuesto.-La chica de pelo plateado tenía el semblante serio y frío.-Y no me importa, ya me crucé con la portadora de otra espada...-
Kazen negó con la cabeza.-No puedes haber salido ilesa después de luchar contra otra portadora...-
La mirada de Emilie se tornó a una expresión de dolor.-Sí... Tengo una cicatriz que me recorre todo el costado... Pero ella tampoco salió ilesa, supongo que ese es mi consuelo...-
-Sinceramente creo que eso no me bastaría a mí.-Dijo Andrew.
Dirian, impresionado, preguntó:-¿Estáis hablando de la “Leyenda de las espadas”?-
Paz afirmó con la cabeza.
-Al final nos cruzaremos con todas las leyendas...- Se burló Tyler.
-¿Y de qué trata la “Leyenda de las espadas”?- Los demás no podían creerse que Victoria preguntase aquello.
Kazen, con expresión de decepción reprochó
a C.-Parece ser que de verdad no le enseñaste nada... Pero ni siquiera atendía en la escuela...-
-No es justo... ¡Apenas pude ir a la escuela!-Protestó Victoria mientras C ponía cara de pena.
Entonces Dirian se ofreció a contar aquella leyenda.-«Hace siglos, se crearon 4 espadas. Cuatro espadas para luchar, cuatro espadas para unirse y destruirse, cuatro espadas mágicas que lo cambiarán todo... La espada Blanca, la que muestra el camino; La espada Negra, la que acaba con lo oscuro; La espada Dorada, la que porta el poder y la espada Plateada, la que las unirá y destruirá.>>
-Me crucé con la portadora de la espada blanca... Casi no lo cuento, vi a la portadora de la espada plateada pero era... Ella era una niña, estaba asustada así que la dejé ir. Ni si quiera sé cómo pudo conseguirla...-Habló Emilie preocupada.
-¡Tú tienes la espada negra, la que acaba con lo oscuro!-Exclamó Lianndra.
Emilie asintió.
-¡Con razón derrotaste tan fácilmente a aquellos arrdfij*!-
-<<La espada Blanca, la que muestra el camino...» ¿El camino hacia dónde?-Preguntó Andrew pensativo.
Tyler removía la nieve de delante de su saco con un palo, absorto en sus pensamientos.
Victoria siguió la conversación.-No solo eso, creo que la "Portadora de la espada plateada" ya ha comenzado su parte de la leyenda: «La espada Pateada, la que las unirá y destruirá...»
Ya hizo que Emilie tuviese piedad con ella, así que ya ha comenzado a unirse... Y a saber si ha tenido contacto con alguna de las otras dos portadoras.-
Tyler suspiró.-Hablando de esto no vamos a sacar nada en claro...-Al final había dibujado una espada en la nieve.
Victoria pensó que no dibujaba nada mal.
Lianndra ignoró a su amigo.-¿Por qué todas las portadoras de espadas son chicas?-Bostezó.
A lo que Emilie contestó.-No todas son chicas, el portador de la espada dorada es un chico en esta ocasión.-
Al ver que Lianndra seguía bostezando decidieron que era la hora de irse a dormir.
sábado, 10 de octubre de 2015
"¿El fin? Nica's"
Yimei no podía abandonar su trabajo de cerrar la cafetería, ni siquiera por Eiri... Así que le encargó la tarea de vigilarlo a Keyla.
A la hora de cerrar, la chica se puso a vigilarlo disimuladamente y entonces él se puso en movimiento.
La dueña del Nica's observó como los dos abandonaban el lugar y la dejaban sola, se puso a limpiar tranquilamente y a prepararlo todo para el día siguiente.
Le encantaba su trabajo, adoraba a los clientes y el buen ambiente que había conseguido crear en esos años, pero le quitaba mucho tiempo y apenas estaba disfrutando de su juventud… Tal vez debería decirle a su jefa Mónica, que necesitaba unas vacaciones o algo por el estilo, pero aún estaba reciente aquel aviso de que iba a cerrar el Nica’s. Aunque ya todo parecía ir bien, no quería arriesgarse a perder el lugar donde había pasado tan buenos momentos…
Si todo iba bien, ¿Para qué estropearlo? Siguió limpiando tranquilamente, no iba a empezar a preocuparse por algo de lo que no estaba segura.
Pero el sonido de la campanita interrumpió sus pensamientos y sus tareas. Se giró y vio una cara nueva.
-¡Bienvenida al Nica’s! ¿En qué puedo ayudarla?-
La chica de pelo plateado y vestido verde oscuro, se quedó mirándola con expresión seria y ojos glaciales.-La verdad es que no.- Se dispuso a salir de la cafetería.
Yimei se puso nerviosa.- ¡E-espera! Si has entrado tiene que ser por algo…-
-Me he confundido.-Se paró para hablar, pero no se giró, después de eso volvió a tomar su camino.
Yimei se acercó y la agarró del brazo para detenerla, ahora que la veía más de cerca, notó que era bastante alta.-¿Emilie… Emilie Iosri..?-
Se zafó del agarre de Yimei y se dio la vuelta.-¿Cómo sabes mi nombre?- Su cara pareció tornar a enfado unos segundos, pero volvió a esa expresión neutral apenas en unos instantes.
-Yo sé muchas cosas… Como que tienes un grifo y que acabas de unirte a un grupo de “jóvenes guerreros”...-
Emilie suspiró.-¿Jóvenes guerreros..? No lo creo, les queda mucho por aprender.-
-Ser fuerte no significa ocultar tus emociones.-
-...-La chica miró hacia otro lado.- Sabes mi nombre y al parecer más cosas sobre mí, pero yo no sé nada de ti.-
-¡Ah, discúlpame! Yo soy Yimei, solo Yimei.-
Asintió conforme.
-Puedo prepararte lo que quieras, pide, ¡invita la casa!-
Volvió a asentir aunque un poco a desgana y se fue a sentarse en la barra.
-No sé por qué… Pero me recuerdas a alguien muy importante para mí a la que llevo mucho sin ver… Y eso me reconforta…-
Yimei sonrió con ternura.-Oh, pequeña…-Puso la mano en la cabeza de Emilie, se tuvo que estirar un poco desde el otro lado de la barra. La chica cerró los ojos.
-¡N-no soy pequeña, ya no!-Apartó la mano de la joven mujer.
-P-perdón… Venga, te dejo elegir una bebida gratis… ¡Como compensación!-
-Eso ya lo ibas a hacer antes… Pero está bien. Zumo de acrada.-
-Aquí no hay acradas…-
-¿En qué clase de lugar no tienen acradas..? Entonces… Batido de fresa.-
-Aquí, aquí no hay acradas. ¿Batido de fresa? Oído, en un santiamén tendrás tu pedido.-
Emilie volvió a asentir conforme.
Mientras tanto, Keyla siguiendo a Eiri, había llegado a…
-¡No puede ser! ¡¿La casa de la jefa Mónica!?-Exclamó sin poder controlarse. Por suerte, Eiri ya había entrado y no la escuchó. Ella también se dispuso a entrar. Llamó a la puerta. No obtuvo respuesta, llamó otra vez y nada. Fue a mirar por la ventana, pero las cortinas no dejaban ver el interior. Volvió a la puerta y entonces fue cuando esta se abrió, alguien la agarró del brazo y la metió rápidamente. Soltó un grito ahogado.
-Tranquila, solo soy yo.-
-Uf, Mónica, me has dado un susto de muerte…-
-Lo siento.-
Keyla la miró fijamente a los ojos. Su jefa era más bajita que ella, así que tuvo que mirar ligeramente hacia abajo.-¿Por qué Eiri viene aquí todos los días a la misma hora?-
-No sé de qué me hablas…-
-No es momento para que te hagas la tonta… Necesito sinceridad.-
Se hizo el silencio y Mónica solo podía mirar al suelo. Alzó la cabeza, decidida, pero su expresión cambió a tristeza en poco tiempo.-No tengo fondos para mantener el Nica’s.-
Keyla se quedó impactada por aquellas palabras. ¿Significaba aquello que iban a tener que cerrar? ¿Que aquel lugar encantador donde había estado viviendo iba a desaparecer? ¿Iba a tener que dejar todo aquello atrás..? No… Eso no podía ser verdad.
-No sé qué hacer… No vende tanto como antes… Ya no da el dinero necesario para cubrir los gastos, llevo un tiempo poniendo lo que faltaba de mi dinero… Pero ya no tengo más, no puedo mantener el local. ¡Incluso vendí el Chiringuito en el que estuvisteis aquella vez! Pero no puedo… Ya no queda más de dónde poder sacar… Eiri venía aquí para tranquilizarme, él es así.-
Eiri se acercó ronroneando y se restregó por las piernas de Mónica. Esta se agachó y lo acarició con una triste sonrisa.
-N-no puede…-
-Tranquila, Keyla… Os encontraré otro lugar para vivir, aunque… No sé si podréis estar juntas… Y tendréis que encontrar otro trabajo.-
-¡No! ¡Debe haber algo que podamos hacer! ¡Me niego… Me niego a aceptar esto! ¡No quiero… No quiero separarme de Yimei ni de Eiri!- Keyla comenzó a sollozar y Mónica la abrazó.
-No hay nada que hacer… Por favor, no le digas nada a Yimei, de momento.-
-¿Y hasta cuándo piensas esperar..? Cuanto más tarde más duro será el golpe…-
-Tranquila, todo a su debido tiempo.-
-...-
De vuelta a la cafetería…
-Y bueno… ¿Por qué has decidido ayudarlos?-
Emilie miraba con una sonrisa su batido, hasta que Yimei le preguntó aquello.-Ayudar… ¿A quiénes?-
-Anda, pues a Victoria y a los demás.-
-...-No dijo nada, solo miró su batido y se lo bebió tomando la pajita.
-Pues la próxima vez que vengas me lo cuentas…-
-Eres una cotilla. Gracias por el batido, estaba bueno.-
-Claro, lo he hecho yo.-Yimei guiñó.
-No sé de qué próxima vez hablas, no pienso volver aquí.-Se levantó y con ese último movimiento, desapareció.
-Vaya con esta chica…-
El sonido de la campanita llamó la atención de Yimei. Keyla había vuelto y traía a Eiri en brazos.
-¡Hemos vuelto!-Keyla forzó una sonrisa y Eiri maulló.
-¡Bienvenidos!-
-¿A qué no sabes lo que hacía este? Te vas a reír, lo único que hacía era dar vueltas por el barrio. Me he tirado una hora siguiéndolo… A veces se paraba a descansar…-
-Vaya… ¡Y yo preocupada! Anda que… Venga, ayúdame a terminar de limpiar y preparo la cena.-
-¡No! Esta noche descansa, yo prepararé la cena.-
-Uy, ¿Qué te ha dado? Nunca quieres preparar nada…-
-Ah… Esto… Bueno, verás… Es que… Quiero cocinar mejor para impresionar a Andrew la próxima vez, sí, ¡eso es!-
Yimei sonrió pícaramente.-Esta juventud y el am-
-¡No es eso!-Keyla se sonrojó.-¡Venga, vamos a limpiar!-
domingo, 4 de octubre de 2015
·Capítulo 30: Descenso ·
Llevaban un rato fuera esperando a la chica misteriosa, ya le habían contado a Andrew y a los otros todo lo ocurrido en la cueva.
-¡Maldita sea! ¿Es que esa chica no podría actuar de otra manera?-Exclamó Andrew.
Victoria estaba cabizbaja sentada en una piedra, apartada de los demás, C estaba situada a su lado con expresión preocupada.
-Nada mas llegar nosotros el grifo de la chica entró a la cueva, ¿iría en la ayuda de su dueña?-Preguntó Tyler.
-La verdad es que espero que esa chica esté bien...-Habló Lianndra con sinceridad.
Victoria notó algo y levantó la cabeza para
mirar.-Alguien se acerca, viene de la cueva...-
Entonces Dirian frunció el ceño y dijo:
-¿Alguien o algo?-
Este comentario hizo que todos se preparasen para la lucha.
Tras unos minutos sin ningún cambio Lianndra empezó a irritarse.-¡Victoria! ¿no te lo estarías imaginando? De la cueva no sale nada.-
Después de que la chica pelirroja dijese eso una silueta negra y veloz salió de la cueva y al darle la luz del sol de aquellos parajes fríos, se apreció que era la chica de pelo plateado montada sobre su grifo.-¡Montad en vuestros caballos y salid de aquí, seguidme!-
Mientras decía esto, los demás ya se habían montado en sus corceles y estaban poniéndose en marcha. Fueron en la dirección a la bajada de la montaña.
Bajaban lo más rápido que les permitían los cascos de los caballos resbalando por la capa de hielo que se había formado en la superficie del suelo, cuando la chica de pelo plateado creyó que ya habían bajado lo suficiente, paró y giró a su montura alada para situarse frente a los demás.
-Bueno, aquí ya no correréis peligro, así que va siendo hora de que me vaya.-
Pero Lianndra se opuso a la decisión de la otra chica.-¡Nooo, de eso nada! Tú te quedas con nosotros y de paso te presentas.-
Debido al poco tacto de Lianndra y porque ella también quería que la chica misteriosa se quedara, Victoria añadió:-¡E-espera! ¡No podrás volar bien, ya está oscureciendo! Además, has hecho mucho por nosotros y me gustaría compensarte de alguna forma...-A Victoria le pareció que la chica misteriosa esbozaba una fugaz sonrisa.
La chica de pelo plateado descendió hasta tocar el suelo con las patas de su grifo, entonces se bajó de él y anunció.-Bien, es un placer para mi grifo, Plume y para mí, Emilie Iosri, estar hoy con vosotros.-Al finalizar su frase, la chica misteriosa desde ahora conocida como Emilie, sonrió y comenzó con los preparativos para acampar allí mismo.
###
Ya en la oscura noche, solo iluminada por una pequeña hoguera en mitad de aquel camino de descenso, todos habían terminado de comer cuando volvieron a comenzar la charla. Estaban dispuestos en círculo al rededor de aquel fuego. Victoria tenía a Dirian y a Lianndra uno a cada lado, mientras que la pelirroja tenía al otro a Emilie, esta a Andrew y el chico de ojos naranjas tenía a Tyler y este último estaba junto a Dirian.
-Menos mal que me di cuenta de que te encogías hacia un lado y de la mancha en tu ropa, porque, ni aunque hayas decidido seguir tu viaje con nosotros compartes tus problemas.-Victoria soltó un largo suspiro.-¿Estás mejor? Creo que voy mejorando en esto de la curación.-
Después de que Emilie asintiese en respuesta de Victoria, Dirian anunció.-Todavía queda la duda del pelo de Lianndra, ¿Desde cuándo y por qué te ocurre eso?-
La chica, con cara enfurruñada, volvió a responder lo que ya le había contestado las veces anteriores que el chico le había preguntado.-Vale, sí que me di cuenta de que mi pelo brillaba en la cueva, pero no sé por qué y nunca me había pasado. Y ni se te ocurra volver a preguntar lo mismo.-
C parecía estar molesta por algo, Victoria ya conocía a su cerdita lo suficiente como para darse cuenta de esas cosas.
-¿Qué te ocurre, C?-
La miró sin contestar, pasados unos minutos de silencio al fin dijo algo.-No me ocurre nada.-
-Pues yo tengo algo que preguntar.-Lianndra miró con seriedad a Tyler y este apartó la mirada, incómodo.-Sospechaba que fuiste tú, pero aún me quedaba la esperanza de que me hubieses robado solo u-una cosa...-Lianndra se ruborizó sin motivo aparente.
Tyler volvió a dirigirle la mirada, también sonrojado.-Ahora solo me queda devolverte una de esas cosas, si la quieres, claro...-
Lianndra pareció sobresaltarse.-¡De eso nada y menos aquí..!
¡Era un cuchillo que se transmitía de generación en generación! ¡Me regañaron mucho por perderlo y casi me prohiben salir!-
-L-lo siento... Era mi oficio.-
-¿A eso lo llamas oficio?-
Dirian, que había estado aguantando la risa, se le escapó una carcajada.-Que tiempos aquellos en los que Lianndra iba de un lugar a otro junto a los novatos de la guardia real, en busca del ladronzuelo que no paraba de hacer trastadas, más que
robar.-Dijo él nostálgico.-Además... Sé qué es eso que te robó Tyler.-
Entonces Tyler lanzó miradas desesperadas a su amigo y Lianndra no se cortó al gritarle que no hacía falta que lo dijera.
Victoria y Andrew parecían algo perdidos, sin embargo Emilie estaba acariciando el pico de Plume, su grifo, como si no le importase el tema.
-Parece que nos hemos perdido muchas cosas...-Dijo Victoria y Andrew la secundó moviendo la cabeza enérgicamente de arriba a abajo.
-¿Por qué no me llevasteis con vosotros?-Lianndra cambió radicalmente de tema.
-Pues... Verás...-
-Porque era peligroso, ya te lo dije.-Contestó Dirian.
-¡Por eso mismo quería acompañaros! ¿Cómo podría estar tranquila sabiendo que corríais peligro?-
-No tenías por qué estarlo, tan solo tenías que estar a salvo.-
-¡Pues os he encontrado igualmente!-
Andrew estaba perplejo.-Me siento fuera de lugar, ¿Y tú Victoria?-
Ahora fue ella la que asintió enérgicamente con la cabeza.
-Cambiemos de tema, entonces.-C tomó la palabra.-
¿De dónde has sacado esa espada, Emilie?-
La chica se quedó mirandola fríamente un instante y luego le contestó
condescendiente.-Si lo quieres saber no tengo otro remedio, pero no quiero contar toda mi vida en la primera noche que paso con vosotros...-Al notar todas las miradas sobre ella, suspiró sonoramente y prosiguió.-La conseguí en Necrea*, sí, la isla maldita, Necrea*.-
Las personas estaban atónitas ante aquella idea, mientras que los animales parlantes tenían una expresión seria.
______________________________________________________________________
Actualizadas secciones: "Personajes" y "Glishcionario".
-¡Maldita sea! ¿Es que esa chica no podría actuar de otra manera?-Exclamó Andrew.
Victoria estaba cabizbaja sentada en una piedra, apartada de los demás, C estaba situada a su lado con expresión preocupada.
-Nada mas llegar nosotros el grifo de la chica entró a la cueva, ¿iría en la ayuda de su dueña?-Preguntó Tyler.
-La verdad es que espero que esa chica esté bien...-Habló Lianndra con sinceridad.
Victoria notó algo y levantó la cabeza para
mirar.-Alguien se acerca, viene de la cueva...-
Entonces Dirian frunció el ceño y dijo:
-¿Alguien o algo?-
Este comentario hizo que todos se preparasen para la lucha.
Tras unos minutos sin ningún cambio Lianndra empezó a irritarse.-¡Victoria! ¿no te lo estarías imaginando? De la cueva no sale nada.-
Después de que la chica pelirroja dijese eso una silueta negra y veloz salió de la cueva y al darle la luz del sol de aquellos parajes fríos, se apreció que era la chica de pelo plateado montada sobre su grifo.-¡Montad en vuestros caballos y salid de aquí, seguidme!-
Mientras decía esto, los demás ya se habían montado en sus corceles y estaban poniéndose en marcha. Fueron en la dirección a la bajada de la montaña.
Bajaban lo más rápido que les permitían los cascos de los caballos resbalando por la capa de hielo que se había formado en la superficie del suelo, cuando la chica de pelo plateado creyó que ya habían bajado lo suficiente, paró y giró a su montura alada para situarse frente a los demás.
-Bueno, aquí ya no correréis peligro, así que va siendo hora de que me vaya.-
Pero Lianndra se opuso a la decisión de la otra chica.-¡Nooo, de eso nada! Tú te quedas con nosotros y de paso te presentas.-
Debido al poco tacto de Lianndra y porque ella también quería que la chica misteriosa se quedara, Victoria añadió:-¡E-espera! ¡No podrás volar bien, ya está oscureciendo! Además, has hecho mucho por nosotros y me gustaría compensarte de alguna forma...-A Victoria le pareció que la chica misteriosa esbozaba una fugaz sonrisa.
La chica de pelo plateado descendió hasta tocar el suelo con las patas de su grifo, entonces se bajó de él y anunció.-Bien, es un placer para mi grifo, Plume y para mí, Emilie Iosri, estar hoy con vosotros.-Al finalizar su frase, la chica misteriosa desde ahora conocida como Emilie, sonrió y comenzó con los preparativos para acampar allí mismo.
###
Ya en la oscura noche, solo iluminada por una pequeña hoguera en mitad de aquel camino de descenso, todos habían terminado de comer cuando volvieron a comenzar la charla. Estaban dispuestos en círculo al rededor de aquel fuego. Victoria tenía a Dirian y a Lianndra uno a cada lado, mientras que la pelirroja tenía al otro a Emilie, esta a Andrew y el chico de ojos naranjas tenía a Tyler y este último estaba junto a Dirian.
-Menos mal que me di cuenta de que te encogías hacia un lado y de la mancha en tu ropa, porque, ni aunque hayas decidido seguir tu viaje con nosotros compartes tus problemas.-Victoria soltó un largo suspiro.-¿Estás mejor? Creo que voy mejorando en esto de la curación.-
Después de que Emilie asintiese en respuesta de Victoria, Dirian anunció.-Todavía queda la duda del pelo de Lianndra, ¿Desde cuándo y por qué te ocurre eso?-
La chica, con cara enfurruñada, volvió a responder lo que ya le había contestado las veces anteriores que el chico le había preguntado.-Vale, sí que me di cuenta de que mi pelo brillaba en la cueva, pero no sé por qué y nunca me había pasado. Y ni se te ocurra volver a preguntar lo mismo.-
C parecía estar molesta por algo, Victoria ya conocía a su cerdita lo suficiente como para darse cuenta de esas cosas.
-¿Qué te ocurre, C?-
La miró sin contestar, pasados unos minutos de silencio al fin dijo algo.-No me ocurre nada.-
-Pues yo tengo algo que preguntar.-Lianndra miró con seriedad a Tyler y este apartó la mirada, incómodo.-Sospechaba que fuiste tú, pero aún me quedaba la esperanza de que me hubieses robado solo u-una cosa...-Lianndra se ruborizó sin motivo aparente.
Tyler volvió a dirigirle la mirada, también sonrojado.-Ahora solo me queda devolverte una de esas cosas, si la quieres, claro...-
Lianndra pareció sobresaltarse.-¡De eso nada y menos aquí..!
¡Era un cuchillo que se transmitía de generación en generación! ¡Me regañaron mucho por perderlo y casi me prohiben salir!-
-L-lo siento... Era mi oficio.-
-¿A eso lo llamas oficio?-
Dirian, que había estado aguantando la risa, se le escapó una carcajada.-Que tiempos aquellos en los que Lianndra iba de un lugar a otro junto a los novatos de la guardia real, en busca del ladronzuelo que no paraba de hacer trastadas, más que
robar.-Dijo él nostálgico.-Además... Sé qué es eso que te robó Tyler.-
Entonces Tyler lanzó miradas desesperadas a su amigo y Lianndra no se cortó al gritarle que no hacía falta que lo dijera.
Victoria y Andrew parecían algo perdidos, sin embargo Emilie estaba acariciando el pico de Plume, su grifo, como si no le importase el tema.
-Parece que nos hemos perdido muchas cosas...-Dijo Victoria y Andrew la secundó moviendo la cabeza enérgicamente de arriba a abajo.
-¿Por qué no me llevasteis con vosotros?-Lianndra cambió radicalmente de tema.
-Pues... Verás...-
-Porque era peligroso, ya te lo dije.-Contestó Dirian.
-¡Por eso mismo quería acompañaros! ¿Cómo podría estar tranquila sabiendo que corríais peligro?-
-No tenías por qué estarlo, tan solo tenías que estar a salvo.-
-¡Pues os he encontrado igualmente!-
Andrew estaba perplejo.-Me siento fuera de lugar, ¿Y tú Victoria?-
Ahora fue ella la que asintió enérgicamente con la cabeza.
-Cambiemos de tema, entonces.-C tomó la palabra.-
¿De dónde has sacado esa espada, Emilie?-
La chica se quedó mirandola fríamente un instante y luego le contestó
condescendiente.-Si lo quieres saber no tengo otro remedio, pero no quiero contar toda mi vida en la primera noche que paso con vosotros...-Al notar todas las miradas sobre ella, suspiró sonoramente y prosiguió.-La conseguí en Necrea*, sí, la isla maldita, Necrea*.-
Las personas estaban atónitas ante aquella idea, mientras que los animales parlantes tenían una expresión seria.
______________________________________________________________________
Actualizadas secciones: "Personajes" y "Glishcionario".
sábado, 3 de octubre de 2015
·Capítulo 29: Vuelta a las andadas ·
-¡Maldito monstruo suéltame!-Gritó Dirian.
Un gólem consiguió pillar a Dirian y a Lianndra desprevenidos e, intentando proteger a la chica, Dirian fue cogido por él, del tobillo.
Ahora gritaba y se agitaba en un intento por conseguir soltarse, Lianndra maldecía a la bestia desde abajo.
-¡Tú, bicharracoo, vete a meterte con alguien de tu tamaño!-Ella saltó sobre el gólem con el sable desenfundado e hincó el filo entre las rocas de la bestia.
El arma de la chica estaba atascada y no podía soltarla, entonces el gólem se sacudió molesto y consiguió quitársela de encima, rompiendo el sable de la chica en dos trozos.
Uno, el más largo, quedó enganchado a la bestia y el otro lo conservó milagrosamente la chica en la mano mientras caía rodando por el duro suelo de la cueva.
Soltó un gemido al intentar levantarse y estuvo a punto de volver al suelo, pero consiguió mantener el equilibrio.
Su pelo todo el tiempo con un tono llameante pareció el crecer de una hoguera cuando se aviva su fuego. Cuando estaba a punto de gritar unos rayos que venían de detrás suya chocaron contra el gólem, aunque este no mostró mucho dolor.
En seguida aparecieron Victoria y Tyler, él la saludó como siempre hacía.
-Enanaa, ¡cuanto me alegro de verte!-Dijo sonriendo.
-Espera, espera... ¿Qué te pasa en el pelo?-Preguntó Victoria.-
-No sé qué decís todos de mi pelo... Yo no noto la diferencia.-
-Está ardiendoo, ¡hay que echarle agua deprisaa!Tyler, busca agua.-
El chico de pelo anaranjado puso cara de pocos amigos.-Sí, ahora me la saco de la manga...-
Dirian seguía allí colgado y zarandeándose esperando a que le ayudase
alguien.-¡Vosotroos! ¿Os habéis olvidado de mí? Eeeeoooo.-
Su eco sonó por toda la cueva.
Repentinamente, un segundo gólem apareció, rodeándoles así por los dos lados.
-¿Qué hacemos ahora?-Habló Victoria.
-Luchar.-Contestó Tyler, aunque no muy convencido de ello.
Lianndra estaba irritada al decir.-¿Cómo quieres que luche con esto?-Enseñó lo que quedaba de su vieja arma.-¿Lo ves?-
El gólem que acababa de aparecer dio un puñetazo hacia ellos, a duras penas lograron esquivarlo.
Al chocar contra el suelo, este se rompió en trocitos junto con él la superficie golpeada.
Sin embargo, al volver a su posición original su brazo empezó a regenerarse.
Lianndra volvió a repetir su pregunta una vez estuvo de pie, pero antes de que ella terminase,Tyler se sacó un puñal de debajo de la chaqueta y se lo pasó a su amiga.
-No quería dártelo en un momento como este pero no tengo otra opción...-
Lianndra se sorprendió al verlo de cerca, tenía un mango de metal recubierto de cuero blanco, con el filo en forma de aguja.
-Luego tendrás que explicarme esto...-Dijo ella.
El chico se quedó mirando muy serio a la chica pelirroja y asintió con la misma expresión.
Victoria, mientras tanto, había extendido las manos en dirección al gólem que tenía a Dirian. No sabía cómo manifestar su magia pero tenía que hacerlo, no solo por ella que al fin y al cabo tenía que aprender, sino también por su amigo que estaba allí
colgado.-Tengo que hacer algo...Tengo que ayudarle.-Sus manos comenzaron a brillar y a brillar cada vez el brillo era más grande, el destello crecía y volvía a su forma sucesivamente,hasta que brilló muy intensamente durante un rato y se apagó.
Aparentemente no había ningún cambio...
-¿Qué se supone que ha pasado?-Preguntó Lianndra.
Tyler se frotaba los ojos, miró la luz demasiado tiempo.-Pues lo que ha pasado es que me ha dejado cegato...-
La pelirroja empezó a reírse de él.
-¡Yo sé lo que ha pasado!-Gritó Dirian para hacerse oír.-Ha paralizado a los gólem.-
Victoria se acercó al que sostenía a Dirian, lo tocó cuidadosamente y no pasó nada.
Entonces Lianndra se acercó gritando.-¡Qué guay, yo también quiero!-
Pero en ese momento algo saltó por encima del monstruo y un destellito rozó el brazo de este.
El brazo se desprendió y rompió en trocitos y Dirian cayó al suelo junto a ellos.
Victoria se acercó a él para ayudarlo a levantarse y le preguntó si se encontraba bien, pero una voz la sorprendió.-No hay tiempo para eso, que se levante y nos iremos.-Era una chica de pelo plateado y traía consigo los caballos de los dos jóvenes, los cuales habían huido antes.
-¿Cómo los has encontrado..? bueno no importa, vámonos de aquí.-Dijo Tyler.
Dirian decidió rechazar la ayuda de Victoria y se levantaba solo.-Espera Tyler, sino sabemos ni quién es.-
-Yo sí lo séee.-Habló Lianndra.-Pero no sé su nombre.-
-Vámonos antes de que se acabe el efecto de la magia.-
-¡No pases de mí!-Se quejó Lianndra mientras se dirigía al caballo de Dirian, como siempre, pero Tyler la agarró del brazo y la subió al suyo.
Los gólem empezaban a moverse cuando Victoria subió al de Dirian, se sentía cansada y supuso que era por lo que acababa de realizar.
-¡Salid de aquí inmediatamente! No puedo permitir que corráis peligro.-Habló la chica misteriosa.-¡Vaaamos!-
Victoria intentó hablar.-No vamos a dejarte aquí, monta en-
La peliplateada la cortó a mitad de la frase.-¡De ninguna manera, si me voy con vosotros iréis más lentos y nos perseguirán los gólem rocosos!
¡Dejádmelos a mí!-Dicho esto, pegó un golpe a la grupa del corcel de Dirian y luego al de Tyler.
Miró como todos se alejaban de allí, mientras preparaba su espada para luchar contra los dos gólem que ya se movían por completo.
###
-¡Para, para el caballo Dirian! ¿Piensas dejarla allí? ¡Sola ante dos monstruos de esos!-Victoria no se creía que estuviese pasando aquello.
-Ya no podemos volver atrás... Es tarde...-Le contestó él.
-¡Nunca es tarde para hacer lo correcto!-Terminó por reprochar.
-Creo que Victoria tiene razón, Dirian...-Intentó convencerlo Tyler.
Kimara puso cara de disgusto.-Pues yo creo que se puede encargar sola, al fin y al cabo fue la que se enfrentó casi sola a muchos ¿ar..ar..arrdij?-
-Has estado a punto de decirlo bien...-Se rió Tyler.
-¡Lianndra! Está bien que tengas fe en ella o lo que sea, pero hay que ser realistas.-Habló Victoria.
-Bueno somos dos contra dos, tiene que haber una quinta opinión para el desempate. Además, ella nos dijo que nos fuésemos.-Le contestó su amiga.
-Y si es empate ¿por qué acabamos haciendo lo que habéis decidido vosotros?-Siguió contestándole.
-¡No fuimos nosotros, nos lo dijo ella, ella nos dijo que huyésemos! ¿Vas a desperdiciar la oportunidad que nos ha dado?-Después del grito de Dirian pareció que Victoria ya no tenía más que replicar.
Siguieron su camino por la cueva, hasta llegar a la salida.
________________________________________________________________________
Disculpad... Como podréis ver, hoy solo hay un capítulo... Después de una serie de problemillas técnicos no he podido programarlo, pero lo haré mañana junto con el de La Cafetería Nica's, aunque puede que no pueda ser a la hora prevista... Por favor, tened un poco de paciencia una vez más ¡Lo siento mucho y gracias por vuestra atención!
Un gólem consiguió pillar a Dirian y a Lianndra desprevenidos e, intentando proteger a la chica, Dirian fue cogido por él, del tobillo.
Ahora gritaba y se agitaba en un intento por conseguir soltarse, Lianndra maldecía a la bestia desde abajo.
-¡Tú, bicharracoo, vete a meterte con alguien de tu tamaño!-Ella saltó sobre el gólem con el sable desenfundado e hincó el filo entre las rocas de la bestia.
El arma de la chica estaba atascada y no podía soltarla, entonces el gólem se sacudió molesto y consiguió quitársela de encima, rompiendo el sable de la chica en dos trozos.
Uno, el más largo, quedó enganchado a la bestia y el otro lo conservó milagrosamente la chica en la mano mientras caía rodando por el duro suelo de la cueva.
Soltó un gemido al intentar levantarse y estuvo a punto de volver al suelo, pero consiguió mantener el equilibrio.
Su pelo todo el tiempo con un tono llameante pareció el crecer de una hoguera cuando se aviva su fuego. Cuando estaba a punto de gritar unos rayos que venían de detrás suya chocaron contra el gólem, aunque este no mostró mucho dolor.
En seguida aparecieron Victoria y Tyler, él la saludó como siempre hacía.
-Enanaa, ¡cuanto me alegro de verte!-Dijo sonriendo.
-Espera, espera... ¿Qué te pasa en el pelo?-Preguntó Victoria.-
-No sé qué decís todos de mi pelo... Yo no noto la diferencia.-
-Está ardiendoo, ¡hay que echarle agua deprisaa!Tyler, busca agua.-
El chico de pelo anaranjado puso cara de pocos amigos.-Sí, ahora me la saco de la manga...-
Dirian seguía allí colgado y zarandeándose esperando a que le ayudase
alguien.-¡Vosotroos! ¿Os habéis olvidado de mí? Eeeeoooo.-
Su eco sonó por toda la cueva.
Repentinamente, un segundo gólem apareció, rodeándoles así por los dos lados.
-¿Qué hacemos ahora?-Habló Victoria.
-Luchar.-Contestó Tyler, aunque no muy convencido de ello.
Lianndra estaba irritada al decir.-¿Cómo quieres que luche con esto?-Enseñó lo que quedaba de su vieja arma.-¿Lo ves?-
El gólem que acababa de aparecer dio un puñetazo hacia ellos, a duras penas lograron esquivarlo.
Al chocar contra el suelo, este se rompió en trocitos junto con él la superficie golpeada.
Sin embargo, al volver a su posición original su brazo empezó a regenerarse.
Lianndra volvió a repetir su pregunta una vez estuvo de pie, pero antes de que ella terminase,Tyler se sacó un puñal de debajo de la chaqueta y se lo pasó a su amiga.
-No quería dártelo en un momento como este pero no tengo otra opción...-
Lianndra se sorprendió al verlo de cerca, tenía un mango de metal recubierto de cuero blanco, con el filo en forma de aguja.
-Luego tendrás que explicarme esto...-Dijo ella.
El chico se quedó mirando muy serio a la chica pelirroja y asintió con la misma expresión.
Victoria, mientras tanto, había extendido las manos en dirección al gólem que tenía a Dirian. No sabía cómo manifestar su magia pero tenía que hacerlo, no solo por ella que al fin y al cabo tenía que aprender, sino también por su amigo que estaba allí
colgado.-Tengo que hacer algo...Tengo que ayudarle.-Sus manos comenzaron a brillar y a brillar cada vez el brillo era más grande, el destello crecía y volvía a su forma sucesivamente,hasta que brilló muy intensamente durante un rato y se apagó.
Aparentemente no había ningún cambio...
-¿Qué se supone que ha pasado?-Preguntó Lianndra.
Tyler se frotaba los ojos, miró la luz demasiado tiempo.-Pues lo que ha pasado es que me ha dejado cegato...-
La pelirroja empezó a reírse de él.
-¡Yo sé lo que ha pasado!-Gritó Dirian para hacerse oír.-Ha paralizado a los gólem.-
Victoria se acercó al que sostenía a Dirian, lo tocó cuidadosamente y no pasó nada.
Entonces Lianndra se acercó gritando.-¡Qué guay, yo también quiero!-
Pero en ese momento algo saltó por encima del monstruo y un destellito rozó el brazo de este.
El brazo se desprendió y rompió en trocitos y Dirian cayó al suelo junto a ellos.
Victoria se acercó a él para ayudarlo a levantarse y le preguntó si se encontraba bien, pero una voz la sorprendió.-No hay tiempo para eso, que se levante y nos iremos.-Era una chica de pelo plateado y traía consigo los caballos de los dos jóvenes, los cuales habían huido antes.
-¿Cómo los has encontrado..? bueno no importa, vámonos de aquí.-Dijo Tyler.
Dirian decidió rechazar la ayuda de Victoria y se levantaba solo.-Espera Tyler, sino sabemos ni quién es.-
-Yo sí lo séee.-Habló Lianndra.-Pero no sé su nombre.-
-Vámonos antes de que se acabe el efecto de la magia.-
-¡No pases de mí!-Se quejó Lianndra mientras se dirigía al caballo de Dirian, como siempre, pero Tyler la agarró del brazo y la subió al suyo.
Los gólem empezaban a moverse cuando Victoria subió al de Dirian, se sentía cansada y supuso que era por lo que acababa de realizar.
-¡Salid de aquí inmediatamente! No puedo permitir que corráis peligro.-Habló la chica misteriosa.-¡Vaaamos!-
Victoria intentó hablar.-No vamos a dejarte aquí, monta en-
La peliplateada la cortó a mitad de la frase.-¡De ninguna manera, si me voy con vosotros iréis más lentos y nos perseguirán los gólem rocosos!
¡Dejádmelos a mí!-Dicho esto, pegó un golpe a la grupa del corcel de Dirian y luego al de Tyler.
Miró como todos se alejaban de allí, mientras preparaba su espada para luchar contra los dos gólem que ya se movían por completo.
###
-¡Para, para el caballo Dirian! ¿Piensas dejarla allí? ¡Sola ante dos monstruos de esos!-Victoria no se creía que estuviese pasando aquello.
-Ya no podemos volver atrás... Es tarde...-Le contestó él.
-¡Nunca es tarde para hacer lo correcto!-Terminó por reprochar.
-Creo que Victoria tiene razón, Dirian...-Intentó convencerlo Tyler.
Kimara puso cara de disgusto.-Pues yo creo que se puede encargar sola, al fin y al cabo fue la que se enfrentó casi sola a muchos ¿ar..ar..arrdij?-
-Has estado a punto de decirlo bien...-Se rió Tyler.
-¡Lianndra! Está bien que tengas fe en ella o lo que sea, pero hay que ser realistas.-Habló Victoria.
-Bueno somos dos contra dos, tiene que haber una quinta opinión para el desempate. Además, ella nos dijo que nos fuésemos.-Le contestó su amiga.
-Y si es empate ¿por qué acabamos haciendo lo que habéis decidido vosotros?-Siguió contestándole.
-¡No fuimos nosotros, nos lo dijo ella, ella nos dijo que huyésemos! ¿Vas a desperdiciar la oportunidad que nos ha dado?-Después del grito de Dirian pareció que Victoria ya no tenía más que replicar.
Siguieron su camino por la cueva, hasta llegar a la salida.
________________________________________________________________________
Disculpad... Como podréis ver, hoy solo hay un capítulo... Después de una serie de problemillas técnicos no he podido programarlo, pero lo haré mañana junto con el de La Cafetería Nica's, aunque puede que no pueda ser a la hora prevista... Por favor, tened un poco de paciencia una vez más ¡Lo siento mucho y gracias por vuestra atención!
Suscribirse a:
Entradas (Atom)