·Capítulo 1: Los cambios·

TIEMPO DESPUÉS...

El aire fresco de principios de otoño flotaba en el ambiente, como los pillocat* que surcaban los cielos semidespejados. Los árboles y la vegetación iban tornando de colores con el cambio de estación, y los restos de las primeras lluvias perlaban las hojas. 
Un camino hecho barro por el agua, estaba completamente lleno de huellas de carros y de pisadas, el camino que recorría toda la pradera, y que, conectaba el pueblo con las granjas.
Ese camino nos lleva a una persona, alguien que vivía en una de esas granjas y que traería con su existencia un gran cambio, un cambio que afectaría a todos y que crearía nuevas leyendas.

-"Glishes,nuestro mundo,está compuesto por islas,varían mucho las culturas y creencias de la gente dependiendo de en qué isla vivan. Aquí hay desde montañas heladas, hasta bosques espesos, pero desconocemos lo que hay más allá del océano Larnigio,porque los barcos que se adentran en esas aguas desconocidas no vuelven jamás..."- Contaba una chica de pelo azul a varios animales de su granja.
 Se interrumpió para protestar. -Pollete...¿Me estás escuchando?- Lo único que obtuvo del pollo fue una mirada confusa y después este siguió picoteando el suelo.
-Sino vas a prestar atención... ¡Vete con la vaca a pastar! Igual ella te enseña a diferenciar entre las piedras y el grano.-
 Su fiel cerdita,C ,miró al pollo con lo que parecía odio,ella siempre la escuchaba. Aunque no solía atender en clase,por lo que nunca tenía mucho que contarle sobre lo que aprendía...
-Anda que...Por una vez que me esfuerzo en atender...Y el pollo este no me hace caso...-
-¡¡VICTOOORIAAAA!!- Gritó alguien con  voz ronca que parecía estar en el campo trasero.
-¡Oh, nooo! Se me ha olvidado hacer mis tareas. C,Vámonos de aquí, ¡Deprisa!- Salió corriendo hacia la verja principal con C pisándole los talones,cuando tropezó con algo y acabó en el suelo pengándose un dolorido golpe en la cara...
Sí,tiene un don especial para caerse en los momentos oportunos.
Un hombre se le acercó lentamente,por supuesto, ella ya sabía quién era. - Victoria hija, no puedes seguir así,tu padre no puede llevar la granja él solo. Por favor,cumple con tus tareas y ayúdame.- 
El padre de Victoria...Un hombre de mediana edad, moreno de piel y con las manos ásperas de trabajar en el campo. El pelo que le queda es de color azul oscuro, casi ni se nota el azul y ya van asomándole algunas canas.
Lo miró enfurruñada.-Pero...Papáaa,yo no elegí ser granjera...-
-Sí hija, No se puede escoger dónde nacer. El rico, es rico y no hace nada en su vida; El pobre, es pobre y trabaja durante toda ella; Y el granjero, es granjero, trabaja para vender víveres al pobre y al rico...Y ahora, empieza con tus tareas.- Mandó su padre con voz dura.
Se lo dijo con tal tono que le sentó mal.
Mientras se levantaba, dijo: -Valeeee, cumpliré con mis tareas. ¡Vamos C !-
Su cerdita la siguió.
Y su padre se quedó solo.-Aaaay,que complicada es esta niña ¿Cuál fue el día en el que me la dejaron aquí? y además con esa cerdita rara que no ha crecido desde hace 15 años,ni le han salido alas...*-
Después de decir esto se quedó mirando a la nada pensativo.

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Victoria se encontraba en el establo,aburrida, moviendo montones de heno...
-Que rollazo C ,mañana nos vamos temprano por ahí.- Dijo suspirando.
-¡Oingc!- Gruñó C alegremente afirmándolo.
 -¡Victoria! Que te estoy oyendo, no te permito que te vayas por ahí sin acabar tus tareas.-Saltó su padre que estaba entrando a supervisar.
Se asombró,Victoria, de su propia rebeldía al contestarle:-Pues ya las he acabado,así que me voy...- Después de decir esto salió corriendo sin mirar atrás y C la siguió a duras penas.
 
-Vaya con esta niña...Se va de noche ,si no la conociese iría a buscarla por miedo a que le pasara algo...-Suspiró.-Ya volverá cuando tenga hambre o frío.-

Esa noche en la granja se escuchó mucho jaleo,se oyeron gritos...