El Nica's estaba cerrado. Estaba oscureciendo rápido, el otoño ya estaba encima y empezaba a refrescar. Eiri había vuelto a salir en algún momento mientras cerraban y a Yimei no le dio tiempo a perseguirlo... Ni siquiera lo vio salir, ya había mirado en los armarios y no estaba en ninguno.
-¡Keylaaa, ve encendiendo la luz! ¡Casi no se ve!-La chica estaba en otra habitación y por eso Yimei lo dijo casi gritando.
-¡Eso intento..! ¡Pero no funciona..! ¡Parece que se ha ido la luz!-Contestó de la misma manera que su jefa.
-¡No puede ser! ¡Si todo iba bien después de la tormenta..!-
Keyla apareció por la puerta que conectaba con la parte de la casa.-Voy a preguntarle a las personas que viven cerca si tienen luz.-Se dirigió hacia la puerta y se puso su abrigo, que momentos antes había estado colgado en el perchero de la entrada.-Ahora vuelvo.-Sonrió, se despidió y salió por la puerta.
Yimei se quedó sola, no tenían luz y estaba oscureciendo... Necesitaban velas, era hora de buscarlas y colocarlas al menos por la parte interior, por su casa.
Pero cuando iba a meterse en la parte trasera, escuchó la campanita de la puerta y se giró a mirar quién era.
-¡Oh, bienvenido, Dirian!-
-Buenas tardes.-Inclinó brevemente la cabeza.-Parece que esto está mucho más limpio y ordenado, me alegro. Siento haber desaparecido tan de repente sin terminar de ayudar... Aunque en realidad me echasteis vosotras dándome ese zumo...-
Yimei se rió.-Sí, puede que te echásemos sin querer. De todas formas ayudaste mucho, te estoy agradecida. Mmm... La otra vez nos quedamos hablando de tu princesa, ¿No es cierto?-
Dirian dio un respingo.-¿T-todavía recuerdas eso? Quiero decir... ¿De qué hablas..?-
-¡Ajá! Bien y ¿qué tal te va con ella?-
-¡No tengo ninguna princesa! ¡Dame ya un zumo o lo que sea para salir de aquí!-Dirian se fue poniendo colorado.
-Ah, sí, ese zumo compartido que te iba a preparar la próxima vez. Igual debería ir preparándolo, puede que tu princesa venga hoy.-
-¡Nadie es propiedad de nadie y yo no tengo ninguna princesa! ¿Y por qué está esto tan oscuro? Enciende una luz, por la luz de la Diosa...-
Yimei sonrió.-Lo haría, pero hay un problemilla... Se ha ido la luz. Te va a tocar superar tus miedos por un día.-
-¿M-miedos? ¡No le temo a nada!-
-Estoy segura de que ya te lo habrán dicho alguna vez... O al menos algo parecido. "No es valiente el que no teme, sino el que supera sus miedos", es más, el que no tiene miedo a nada tan solo es un necio.-
-Sí... Sí que me lo habían dicho...-
-No te dejes llevar por tu honor, orgullo o lo que sea, eres un chico muy listo, un momento... ¡Qué bien has cambiado de tema! Sigamos hablando de tu princesita, aunque antes... Busquemos velas.-
-¡Habrase visto esto en alguna parte..! ¡No tengo ninguna princesa! En cuanto a lo de las velas... Sí, me parece adecuado.-
Dicho esto, Yimei pidió al chico que lo siguiese y entró a la parte trasera. El chico fue con cierta desconfianza y vergüenza.
-¡Bienvenido a mi casa! Que no te de vergüenza, tú tranquilo.-
Yimei abrió varios cajones hasta encontrar lo que buscaba y se las puso en las manos a Dirian, luego siguió buscando hasta encontrar un mechero.
Se fue hasta la mesilla del salón y le dijo al chico que pusiese allí las velas, ya casi no se veía cuando él las colocó. Yimei procedió a encenderlas con el mechero y Dirian se sorprendió al ver que salía fuego de aquel pequeño aparato.
-¿C-cómo has..? ¿Acaso se trata de magia..?-
-No... En este mundo no existe la magia.-Yimei sonrió tristemente.-Es tecnología.-
-¿No existe..? ¿En este mundo..? ¿Este es un mundo diferente al de Glishes? Tecnología... Sí, hay un país de Glishes donde saben mucho de eso.-
Yimei suspiró.-Sí, no estamos en Glishes ahora mismo... Esto es-
Una llamada de teléfono interrumpió a Yimei, lo sacó del bolsillo y descolgó.
Dirian volvió a asombrarse, no tenía ni idea de qué era aquello... Le preguntó a la mujer, pero ella estaba concentrada en aque aparato, alguien estaba gritando por el otro lado... No se entendía bien lo que decía esa persona, pero Yimei solo asentía y suspiraba. Al fin soltó aquel aparato.
-Perdona... Mi jefa me ha llamado para regañarme, se supone que no os puedo contar cosas como esta...-
-Entiendo...-
La expresión de Yimei cambió, de tristeza pasó a alegría.-Bueno, bueno, me contabas algo de tu princesita, sigue, por favor.-
-¿Eeeeeh? ¡Eso no es cierto, te decía que no tengo ninguna princesa!-
Al decir esto, las velas se apagaron y se escuchó el sonido de una puerta cerrándose. La oscuridad los envolvió y Dirian entró en pánico.
-¿Dirian? ¡Tranquilo, no pasa nada, solo es un poco de oscuridad!-
-¡Odio la oscuridad!-El chico comenzó a sollozar.
-¿Yimei? ¿Qué pasa? ¿Quién está contigo?-
-¡Keyla! ¡Se han apagado las velas y no encuentro el mechero! ¡Dirian tiene miedo!-
-Yo busco ese cacharro, tú ve a tranquilizar a Dirian.-
Y así lo hicieron, Yimei rodeó al chico con sus brazos y comenzó a susurrarle frases tranquilizadoras al oído. Keyla no tardó en encontrar el mechero, que estaba tirado en el suelo debido a que Yimei lo lanzó sin querer por el sobresalto que le dio que se apagasen las velas, y las prendió de nuevo para que se hiciese la luz.
-Gracias, Keyla...-Yimei suspiró de nuevo.-¿Ves pequeño? No pasa nada.-Le dirigió una tierna sonrisa a Dirian, el cual ya estaba más tranquilo.-¿Qué te han dicho los vecinos?-
-Ellos tampoco tienen luz, es un problema del barrio en general, ya lo solucionarán...-
-Bien... Espero que no tarden mucho...-Yimei miró al chico, estaba aferrado a su ropa y no parecía que se fuese a soltar por si solo.-Dirian... Keyla te va a preparar una buena tila, ¿De acuerdo? Todo está bien, tú tranquilo.-
Él no dijo nada, pero Keyla obedeció y salió en seguida de allí.
La dueña del Nica's se volvió a quedar sola con el antiguo príncipe y le acariciaba la cabeza para tranquilizarlo.
-N-no soy un perrinejo*... ¿Sabes?-
-Oh, vaya, lo siento... Su majestad... Pero estabas muy asustado, ¿Me perdona o recibiré un castigo?-
Poco a poco se fue despegando de Yimei, estaba sonrojado cuando dijo.-Te perdono... Pero solo porque en este reino no tengo poder... Y porque me has ayudado... Gracias...-
Yimei le sonrió.
Dirian miró inseguro a diferentes direcciones.-No sé lo que se siente al tener una madre... Ni lo que es un abrazo de una... Pero... Este que me has dado me ha reconfortado mucho...-
Ahora fue la joven la que se sonrojó.-¿Y-yo una madre..?-
-¡Ajá! ¿Busca a tu príncipe? A veces está más cerca de lo que crees.-
-¡KEYLAA! ¿ESA TILA CÓMO VAAA?-
-Anda... Lo rápido que intentas huir...-
Entonces entró Keyla con una bandeja.-Te han oído todos los vecinos, estoy segura de ello... Aquí está la tila.-La puso en la mesa y se sentó al otro extremo de ellos dos.
Dirian se la tomó de un trago y se despidió.-Gracias por todo, otra vez... Yii...-
Y así desapareció.
-¿Yii..? Pero qué...-
Keyla soltó una carcajada.-¿Qué has estado haciendo, Yii? Parece que le ha gustado de más el abrazo.-
-¡N-no es eso! Me dijo que le pareció reconfortante... Que aunque no supiese cómo era el abrazo de una madre, que el mío había sido eso, reconfortante.-
Volvió la luz en esos instantes.
-¡Anda, la luz! ¡Qué casualidad!-Keyla notó a Yimei preocupada.-Tú tranquila, ya le preguntarás la próxima vez. La verdad es que a mí me pasa lo mismo... Eres como una hermana mayor para mí o incluso una madre...-
Yimei no tenía palabras para expresar lo que sentía, solo pudo articular una sonrisa.
-No hace falta que digas nada.-Keyla se rió.
¡Bienvenido al portal que comunica con Glishes! Si estás aquí es porque estás preparado/a para adentrarte en este mundo... No tengas miedo, déjate llevar.
domingo, 27 de septiembre de 2015
sábado, 26 de septiembre de 2015
·Capítulo 28: Perdidos ·
Mientras, en otra parte de la cueva...
-Se han perdido todos.-Dijo C.
Kazen intranquilo siguió la
conversación.-¡Hemos perdido a la Heredera del Poder, a la auténtica y primera Heredera del Poder! Nosotros sí que estamos perdidos,
¡P-e-r-d-i-d-o-s! ¡PER-DIII-DOS!-
-¡Tranquilos los dos que es fácil salir de esta cueva, además, se fue con Tyler, ¿no? Me parece buen chico, él la cuidará.-Habló paz.
-¿¡Con ese mentecato!? Estamos más perdidos aún...-Contestó Kazen.
Andrew, que había encontrado su yegua, intentó suavizar la situación.-A ver, todos tranquilos, venid conmigo, escuchadme. Esta gruta es corta podrán salir sin mi ayuda, nosotros de momento solo podemos salir de aquí y esperar fuera. En cuanto a los gólems, nunca he visto ninguno por aquí, así que algo habrá pasado en su auténtico hábitat...-
-Bueno, está bien salgamos de aquí y esperemos fuera.-Accedió C.
# # #
Una antorcha improvisada circulaba rápidamente por la cueva,agarrada por un chico de cabello anaranjado.
-¡Esperaaa, no me dejes atrás!-No obtuvo respuesta la chica de orejas puntiagudas que lo seguía.-¡Tyler, maldita sea, paraaaa!-
Al oír su nombre por fin reaccionó parando.
-Ah, solo eras tú...-Habló cuando la vio mejor.-Perdón...-
Victoria le espetó con el ceño fruncido y los brazos en jarras.-Vale, vale. Pero no vuelvas a correr así, porque no podré seguirte el ritmo y acabaremos por separarnos.-
-Bueno y ¿dónde habrán acabado
los demás?.-Preguntó el chico.
Hubo un momento de silencio, entonces Victoria añadió pensativa.-Pues la verdad es que no lo sé, nos separamos al huir.-
Tyler añadió con cara de sorna.-Sí ya veo que nos separamos...-
El silencio volvió a reinar entre ellos, hasta que Victoria lo rompió.-Esto...y ¿qué hacemos?-
Tyler pensó y le contestó.-Deberíamos volver por donde vinimos para encontrar la salida.
Vi a Andrew irse en la dirección por la que apareció ese monstruo. Y vinimos por allá.-
-Ah, ya sé, por allí.-
Los dos se asombraron al ver que habían señalado direcciones diferentes al mismo tiempo.
-Me parece que fue por allí...-Dijo ella.
En cambio él la reprochó y dijo.-Pues yo creo que vinimos de allá...-
Así pasó un rato con los dos discutiendo sobre la dirección. Hasta que Tyler reconoció que se habían perdido y Victoria opinó lo mismo.
Otra vez silencio y solo había luz por la antorcha o más bien por el palo con tela a un extremo que había sido encendido con un rayo, que sujetaba el chico.
-Entonces, ¿qué deberíamos...?- Un grito de ira y terror cortó la frase que estaba pronunciando Tyler.-¿Deberíamos ir por allí..?-Terminó.
Victoria estaba nerviosa ahora, con una mezcla de deseos contradictorios.
Por un lado quería ir en la dirección del grito, porque le había parecido Lianndra, y por otro le asustaba lo que podría encontrarse allí...-Vamos hacia el grito.-Se decidió.
Tyler no parecía muy satisfecho, hasta que Victoria añadió.-Me parece que la que gritaba era Lianndra.-
El chico puso una expresión preocupada
y le dijo.-¿Entonces a qué esperamos? Vamos ha ayudarla.-
Ella asintió con una sonrisa y los dos fueron corriendo en esa dirección.
# # #
Andrew se había montado en su corcel, iba galopando por la cueva en dirección a una luz que se veía al fondo.
Lo sorprendió la luminosidad de fuera y le hizo entornar los ojos.
Los tres animales parlantes iban montados con él en su yegua, de forma que Paz iba en su hombro, como siempre, C iba en la grupa del caballo y Kazen estaba situado a su lado.
-Por fin salimos de ahí...-Dijo este último con un suspiro.
Se encontraban en un precipicio con un pequeño camino para bajar, todo estaba nevado a esa altitud, pero más abajo se podía apreciar un prado verde, sin nieve y con un extenso y ancho río en el centro.
C asintió a su comentario, aprobándolo.
Andrew paró a su corcel y añadió.-Ya solo nos queda esperar a ver si nos encuentran los otros.-
-¿Y dónde están ellos?-Preguntó una joven misteriosa de pelo plateado que apareció de la nada.
Andrew se sorprendió al verla, desenroscó su látigo y lo apuntó hacia ella.-¿Quién eres y qué haces aquí?-
Al ver lo que hacía él, una bestia de pico curvo, garras de león y alas,saltó desde detrás de la chica en dirección a Andrew. Pero ella lo paró antes, le dio una orden en un lenguaje raro y este desapareció.
-Disculpa mi descortesía... Como jinete de grifo debería ser más educada.-La chica hablaba tranquila, como si nada hubiera pasado.
-Dime, ¿Andrew? qué les ha pasado a ellos.-
El chico no parecía muy tranquilo, pero al escuchar lo de jinete grifo y ver a esa mezcla de animales, se arrodilló.-Disculpadme usted a mí, señorita... Pero no puedo revelarle información sin saber ni si quiera su nombre. Además ya sabe el mío.-
Kazen encolerizó.-¿Se puede saber qué pasa ahora? ¡Tú, chica identifícate!-
Paz miró con reproche al palomo.
-Kazen, “cierra el pico”, ella no es una enemiga, podéis creerme.-Dijo C.-Esta chica entra en la descripción que me dieron Lianndra y Victoria sobre la chica que nos salvó...-
Paz se impresionó al escuchar a su
amiga.-¿Necesitasteis la ayuda de alguien para llegar hasta Raeren?-
C asintió.-Sí, pero esa es una historia demasiado larga para contar ahora.-
-Estoy de acuerdo con la cerdita. Pero necesito saber dónde y qué les ha pasado exactamente a los demás, bueno eso solo si queréis que os ayude.-
Andrew miró indeciso a C y cuando esta asintió, él empezó a contarle lo sucedido a la chica.-Eso es lo que ha pasado... Por cierto aún no sé tu nombre.-
-Bien, gracias por contármelo todo. Hasta ahora.-La chica misteriosa se alejó por el interior de la cueva con la antorcha que hace un momento había tenido el peliazul en la mano.
-Que chica más rara...-Dijo él.
Los tres animales asintieron conformes.
-Se han perdido todos.-Dijo C.
Kazen intranquilo siguió la
conversación.-¡Hemos perdido a la Heredera del Poder, a la auténtica y primera Heredera del Poder! Nosotros sí que estamos perdidos,
¡P-e-r-d-i-d-o-s! ¡PER-DIII-DOS!-
-¡Tranquilos los dos que es fácil salir de esta cueva, además, se fue con Tyler, ¿no? Me parece buen chico, él la cuidará.-Habló paz.
-¿¡Con ese mentecato!? Estamos más perdidos aún...-Contestó Kazen.
Andrew, que había encontrado su yegua, intentó suavizar la situación.-A ver, todos tranquilos, venid conmigo, escuchadme. Esta gruta es corta podrán salir sin mi ayuda, nosotros de momento solo podemos salir de aquí y esperar fuera. En cuanto a los gólems, nunca he visto ninguno por aquí, así que algo habrá pasado en su auténtico hábitat...-
-Bueno, está bien salgamos de aquí y esperemos fuera.-Accedió C.
# # #
Una antorcha improvisada circulaba rápidamente por la cueva,agarrada por un chico de cabello anaranjado.
-¡Esperaaa, no me dejes atrás!-No obtuvo respuesta la chica de orejas puntiagudas que lo seguía.-¡Tyler, maldita sea, paraaaa!-
Al oír su nombre por fin reaccionó parando.
-Ah, solo eras tú...-Habló cuando la vio mejor.-Perdón...-
Victoria le espetó con el ceño fruncido y los brazos en jarras.-Vale, vale. Pero no vuelvas a correr así, porque no podré seguirte el ritmo y acabaremos por separarnos.-
-Bueno y ¿dónde habrán acabado
los demás?.-Preguntó el chico.
Hubo un momento de silencio, entonces Victoria añadió pensativa.-Pues la verdad es que no lo sé, nos separamos al huir.-
Tyler añadió con cara de sorna.-Sí ya veo que nos separamos...-
El silencio volvió a reinar entre ellos, hasta que Victoria lo rompió.-Esto...y ¿qué hacemos?-
Tyler pensó y le contestó.-Deberíamos volver por donde vinimos para encontrar la salida.
Vi a Andrew irse en la dirección por la que apareció ese monstruo. Y vinimos por allá.-
-Ah, ya sé, por allí.-
Los dos se asombraron al ver que habían señalado direcciones diferentes al mismo tiempo.
-Me parece que fue por allí...-Dijo ella.
En cambio él la reprochó y dijo.-Pues yo creo que vinimos de allá...-
Así pasó un rato con los dos discutiendo sobre la dirección. Hasta que Tyler reconoció que se habían perdido y Victoria opinó lo mismo.
Otra vez silencio y solo había luz por la antorcha o más bien por el palo con tela a un extremo que había sido encendido con un rayo, que sujetaba el chico.
-Entonces, ¿qué deberíamos...?- Un grito de ira y terror cortó la frase que estaba pronunciando Tyler.-¿Deberíamos ir por allí..?-Terminó.
Victoria estaba nerviosa ahora, con una mezcla de deseos contradictorios.
Por un lado quería ir en la dirección del grito, porque le había parecido Lianndra, y por otro le asustaba lo que podría encontrarse allí...-Vamos hacia el grito.-Se decidió.
Tyler no parecía muy satisfecho, hasta que Victoria añadió.-Me parece que la que gritaba era Lianndra.-
El chico puso una expresión preocupada
y le dijo.-¿Entonces a qué esperamos? Vamos ha ayudarla.-
Ella asintió con una sonrisa y los dos fueron corriendo en esa dirección.
# # #
Andrew se había montado en su corcel, iba galopando por la cueva en dirección a una luz que se veía al fondo.
Lo sorprendió la luminosidad de fuera y le hizo entornar los ojos.
Los tres animales parlantes iban montados con él en su yegua, de forma que Paz iba en su hombro, como siempre, C iba en la grupa del caballo y Kazen estaba situado a su lado.
-Por fin salimos de ahí...-Dijo este último con un suspiro.
Se encontraban en un precipicio con un pequeño camino para bajar, todo estaba nevado a esa altitud, pero más abajo se podía apreciar un prado verde, sin nieve y con un extenso y ancho río en el centro.
C asintió a su comentario, aprobándolo.
Andrew paró a su corcel y añadió.-Ya solo nos queda esperar a ver si nos encuentran los otros.-
-¿Y dónde están ellos?-Preguntó una joven misteriosa de pelo plateado que apareció de la nada.
Andrew se sorprendió al verla, desenroscó su látigo y lo apuntó hacia ella.-¿Quién eres y qué haces aquí?-
Al ver lo que hacía él, una bestia de pico curvo, garras de león y alas,saltó desde detrás de la chica en dirección a Andrew. Pero ella lo paró antes, le dio una orden en un lenguaje raro y este desapareció.
-Disculpa mi descortesía... Como jinete de grifo debería ser más educada.-La chica hablaba tranquila, como si nada hubiera pasado.
-Dime, ¿Andrew? qué les ha pasado a ellos.-
El chico no parecía muy tranquilo, pero al escuchar lo de jinete grifo y ver a esa mezcla de animales, se arrodilló.-Disculpadme usted a mí, señorita... Pero no puedo revelarle información sin saber ni si quiera su nombre. Además ya sabe el mío.-
Kazen encolerizó.-¿Se puede saber qué pasa ahora? ¡Tú, chica identifícate!-
Paz miró con reproche al palomo.
-Kazen, “cierra el pico”, ella no es una enemiga, podéis creerme.-Dijo C.-Esta chica entra en la descripción que me dieron Lianndra y Victoria sobre la chica que nos salvó...-
Paz se impresionó al escuchar a su
amiga.-¿Necesitasteis la ayuda de alguien para llegar hasta Raeren?-
C asintió.-Sí, pero esa es una historia demasiado larga para contar ahora.-
-Estoy de acuerdo con la cerdita. Pero necesito saber dónde y qué les ha pasado exactamente a los demás, bueno eso solo si queréis que os ayude.-
Andrew miró indeciso a C y cuando esta asintió, él empezó a contarle lo sucedido a la chica.-Eso es lo que ha pasado... Por cierto aún no sé tu nombre.-
-Bien, gracias por contármelo todo. Hasta ahora.-La chica misteriosa se alejó por el interior de la cueva con la antorcha que hace un momento había tenido el peliazul en la mano.
-Que chica más rara...-Dijo él.
Los tres animales asintieron conformes.
·Capítulo 27: La gruta ·
La inmensa oscuridad reinante en el interior de la gruta solo era interrumpida por una pequeña llama que se distinguía al fondo de esta. C iba en primer lugar con Dirian muy pegado a ella, Kazen iba en el caballo de este y las chicas iban en medio, mientras que los otros dos chicos iban cerrando el grupo con Paz sobre los hombros de Andrew.
Entonces alguien del grupo bostezó ruidosamente.
-Carái, que falta de respeto...-Habló Paz.
Tyler se sonrojó, pero gracias a la oscuridad no se le notó.-Lo siento...-
Victoria se giró hacia él y exclamó.
-Tranquilo no pasa nada.-
Un crujido sonó en la oscuridad absoluta de la cueva.
Lianndra empezó a balbucear.-Eeh...Chicos,
¿Habéis oído eso?-
Al tiempo que ella hablaba, Dirian dio un respingo al escuchar un segundo ruido.
-Espero que no sea ningún monstruo...-
Entonces Tyler se acordó de algo y lo mencionó mirando hacia Dirian:-Tranquilo amigo, no nos va a pasar nada.-
El otro chico paró y se giró
repentinamente.-¡Calla, bocazas!-
Los ruido se fueron acentuando hasta que llegaron a un muro de piedra oscura, aparentemente no había otra salida.
-Esto es imposible, he pasado por aquí muchas veces y había salida...-Dijo Andrew.
-¡Brujería!-Bromeó Lianndra.
Entonces Tyler se acercó a la pared y la palpó, al hacer esto la pared se movió y él se asustó, en realidad todos se sobresaltaron. Los caballos acabaron por salir huyendo, nadie pudo hacer nada para detenerlos.
Un grave temblor amenazó con derrumbar el techo de la cueva. Entonces la piedra fue tomando forma hasta convertirse en una especie de gólem de piedra sobrenatural.
-¿Qué es esto?-Gritó Tyler y acto seguido lanzó truenos por sus manos golpeando al terrible gigante, aunque a este no pareció hacerle gran cosa.
-¿Q-qué hacemos?-Preguntó Lianndra.
-Tengo una ligera idea,-Habló Dirian.-¿Por qué no corremos?-
Ahora fue Victoria la que dijo:-Por mí, bien.-
entonces todos salieron disparados, pero, en diferentes direcciones...
# # #
Dirian apenas podía respirar cuando miró a su alrededor para ver quién era el otro que tenía al lado, se sorprendió al ver a Lianndra mirándole desde abajo.
-¿Estás bien?-Dijo ella.-Pareces cansado...-Ella intentaba disimular sus jadeos pero no lo hacía muy bien.
Ahora el chico se daba cuenta por primera vez desde que estaba solo con Lianndra y que estaba muy oscuro. Intentó erradicar su miedo pero no le resultó posible y acabó por acurrucarse en el suelo.
Lianndra se empezó a preocupar.-Pero...Va a resultar que había alguien con más miedo que yo...-
De repente se produjo un temblor y otro gólem apareció ante ellos.
Lianndra maldijo en voz alta y se agachó para hablarle a él.-Reacciona Dirian hay que salir de aquí...-Dirian alzó la cabeza e intentó incorporarse, pero cayó al suelo.
Entonces Lianndra gritó.-¡No pienso esperar mucho, así que ya te estás levantando!-
El chico realizó su segundo intento, volvió al suelo tan rápido como la primera vez.
Parecía un cervatillo recién nacido...
Entonces Lianndra se le acercó más y le gritó a la cara.-¡Vamooos, apóyate en mi hombro si lo necesitas!-A la chica se le encendió el pelo literalmente, ese ardor y luz recordaban a unas llamas.
El chico se asustó más que de la oscuridad, y eso irónicamente le dio fuerzas para levantarse.-¿Q-qué significa esto Lianndra, qué has hecho?.-
-¿Cómo que qué he hecho? ¡Ya estás de pie salgamos de aquí!-Aún no había terminado Lianndra de hablar cuando el gólem arremetió contra ellos.
Dirian reaccionó rápido saltando hacia ella y agarrándola, mientras rodaba.
Al caer al suelo añadió.-¡Vámonos de aquí, ya!-Agarró a Lianndra de la mano, a esta ya se le había apagado el pelo, así que la oscuridad volvía a reinar en la cueva.
El chico apretó más su mano, y con un sobre esfuerzo echó a correr.-Luego me cuentas qué es lo que has hecho con tu pelo.-
-¡Pero si no sé de que me hablaas!-Le gritó en respuesta y se le volvió a encender el pelo.
Dirian se sorprendió por un lado, por otro le alivió tener algo de luz.
Entonces alguien del grupo bostezó ruidosamente.
-Carái, que falta de respeto...-Habló Paz.
Tyler se sonrojó, pero gracias a la oscuridad no se le notó.-Lo siento...-
Victoria se giró hacia él y exclamó.
-Tranquilo no pasa nada.-
Un crujido sonó en la oscuridad absoluta de la cueva.
Lianndra empezó a balbucear.-Eeh...Chicos,
¿Habéis oído eso?-
Al tiempo que ella hablaba, Dirian dio un respingo al escuchar un segundo ruido.
-Espero que no sea ningún monstruo...-
Entonces Tyler se acordó de algo y lo mencionó mirando hacia Dirian:-Tranquilo amigo, no nos va a pasar nada.-
El otro chico paró y se giró
repentinamente.-¡Calla, bocazas!-
Los ruido se fueron acentuando hasta que llegaron a un muro de piedra oscura, aparentemente no había otra salida.
-Esto es imposible, he pasado por aquí muchas veces y había salida...-Dijo Andrew.
-¡Brujería!-Bromeó Lianndra.
Entonces Tyler se acercó a la pared y la palpó, al hacer esto la pared se movió y él se asustó, en realidad todos se sobresaltaron. Los caballos acabaron por salir huyendo, nadie pudo hacer nada para detenerlos.
Un grave temblor amenazó con derrumbar el techo de la cueva. Entonces la piedra fue tomando forma hasta convertirse en una especie de gólem de piedra sobrenatural.
-¿Qué es esto?-Gritó Tyler y acto seguido lanzó truenos por sus manos golpeando al terrible gigante, aunque a este no pareció hacerle gran cosa.
-¿Q-qué hacemos?-Preguntó Lianndra.
-Tengo una ligera idea,-Habló Dirian.-¿Por qué no corremos?-
Ahora fue Victoria la que dijo:-Por mí, bien.-
entonces todos salieron disparados, pero, en diferentes direcciones...
# # #
Dirian apenas podía respirar cuando miró a su alrededor para ver quién era el otro que tenía al lado, se sorprendió al ver a Lianndra mirándole desde abajo.
-¿Estás bien?-Dijo ella.-Pareces cansado...-Ella intentaba disimular sus jadeos pero no lo hacía muy bien.
Ahora el chico se daba cuenta por primera vez desde que estaba solo con Lianndra y que estaba muy oscuro. Intentó erradicar su miedo pero no le resultó posible y acabó por acurrucarse en el suelo.
Lianndra se empezó a preocupar.-Pero...Va a resultar que había alguien con más miedo que yo...-
De repente se produjo un temblor y otro gólem apareció ante ellos.
Lianndra maldijo en voz alta y se agachó para hablarle a él.-Reacciona Dirian hay que salir de aquí...-Dirian alzó la cabeza e intentó incorporarse, pero cayó al suelo.
Entonces Lianndra gritó.-¡No pienso esperar mucho, así que ya te estás levantando!-
El chico realizó su segundo intento, volvió al suelo tan rápido como la primera vez.
Parecía un cervatillo recién nacido...
Entonces Lianndra se le acercó más y le gritó a la cara.-¡Vamooos, apóyate en mi hombro si lo necesitas!-A la chica se le encendió el pelo literalmente, ese ardor y luz recordaban a unas llamas.
El chico se asustó más que de la oscuridad, y eso irónicamente le dio fuerzas para levantarse.-¿Q-qué significa esto Lianndra, qué has hecho?.-
-¿Cómo que qué he hecho? ¡Ya estás de pie salgamos de aquí!-Aún no había terminado Lianndra de hablar cuando el gólem arremetió contra ellos.
Dirian reaccionó rápido saltando hacia ella y agarrándola, mientras rodaba.
Al caer al suelo añadió.-¡Vámonos de aquí, ya!-Agarró a Lianndra de la mano, a esta ya se le había apagado el pelo, así que la oscuridad volvía a reinar en la cueva.
El chico apretó más su mano, y con un sobre esfuerzo echó a correr.-Luego me cuentas qué es lo que has hecho con tu pelo.-
-¡Pero si no sé de que me hablaas!-Le gritó en respuesta y se le volvió a encender el pelo.
Dirian se sorprendió por un lado, por otro le alivió tener algo de luz.
domingo, 20 de septiembre de 2015
¡Especial 1000 visitas!
Con un poco de retraso... Pero aquí está lo que prometí, ¡Espero que os guste! Es una historia con guiños del blog de una muy buena amiga mía ^^
Podéis ver su blog desde la sección "¡Blogs especiales!" o pinchar el enlace al final de este capítulo. :3 Os dejo leer el capítulo.
_______________________________________________________________________________
Era por la mañana temprano y el Nica's aún no había amanecido, Eiri estaba dormido con Keyla en la casa de la parte de atrás, Yimei iba caminando como un zombie y en pijama.
Demasiado temprano, se moría de sueño, pero alguien estaba aporreando la puerta. Puede que fuese lo último que hiciese, porque el enfado de Yimei aumentaba por momentos.
-¡YA VOY! ¡NO LLAMÉIS MÁS A LA PUERTAAAA! ¡SE TARDA UN MALDITO TIEMPO FÍSICO EN LLEGAR DE UN SITIO A OTROOO!-Llegó hasta la puerta aún un poco adormilada y después de sorprenderse al no ver a nadie a través del cristal, abrió la puerta enfadada, pero cuando iba a gritar maldiciendo a aquellos desalmados que la despertaban tan temprano, alguien que estaba pegada a la pared, saltó y gritó a modo de
saludo:- HEEEEEEEEEEEEYYYYYYYYYYYYY YAAAAAAAAAAAAAAA!-
Yimei se asustó al principio, luego observó con atención. Había dos chicas: La que había gritado de aquella manera, con el pelo rosa suelto sobre los hombros, los ojos del mismo color y llevaba puesto un vestido rosa pastel con el filo amarillo y unas manoletinas del mismo color que el vestido... Se la veía emocionada.
La otra estaba saludando con la mano desde atrás. Llevaba el pelo castaño recogido en una coleta y unas gafas claras reposaban sobre sus ojos marrones. Llevaba una camiseta blanca normal y una falda azul celeste, sus zapatos eran azules también. Parecía algo más tímida que la otra chica.
-¡H-hola! ¡White y Whitey! ¡Es un placer teneros hoy de visita! Peroo... ¿Por qué tan temprano? ¿Y por qué no avisastéis de que vendríais hoy?-Yimei se lamentó por dentro, podría haber arreglado el Nica's y su casa de la parte trasera un poco más...
White fue la que contestó.-Whitey quería aprovechar al máximo el día.-Señaló a la chica de atrás.- Avisamos a Mónica...-Sonrió.
-Ah, m-me pilláis en pijama...-Se le escapó una risita nerviosa.-Oh, no os quedéis ahí,
¡pasad!-Les dejó sitio para que entrasen.-Bueno... Lo malo es que hoy es mi día libre y el Nica's no abre... Así qu-
-¿¡Qué dices!? ¿No vendrán clientes?- Preguntó preocupada Whitey, cortando a Yimei a media frase.
-¡NOOOO PUEDE SER! ¡No podré hacer las entre-! Quiero decir... ¡Whitey no podrá trabajar aquí sin clientes!-
Era cierto, Whitey había sido invitada por Yimei a trabajar en el Nica's, ya que a la muchacha le hacía mucha ilusión la idea. ¿Habría hecho aquello a propósito su jefa Mónica..? Es cierto que la avisó de que ese día iba a pasar algo grande... Como aquella vez en la playa, pero... ¿Qué podría ser?
-No... No vendrán... Pero, ¡Podéis volver otro día! Es raro que Mónica no os avisase de esto... ¡Y tampoco me avisó a mí! Es despistada, pero no se le pasaría algo así...-
Yimei miró a sus invitadas y se le partió el alma al ver sus caritas de desilusión.
-¡Tranquilas, se me ocurrirá algo! Voy a vestirme y a despertar a Keyla, ahora vengo, vosotras como si estuviéseis en vuestra casa.-
-Oke.-Dijo Whitey sonriendo.
-¡Okiiii!-Contestó White siguiéndola.
-Voy a cambiarme... Lo has oído, ¿no?-
-Síp.-Sacó una libreta y un boli de un bolsito que llevaba colgado.
-¡Bienvenidos a El Cotilla en 2D, especial Nica's! ¡Primera entrevista del día, para Yimei!
-¿Q-qué haces..?-
-Bueno, la primera pregunta es de... ¡UnSerDeEsteMundo! Un nombre curioso donde los haya... ¡La pregunta es..! ¿Cuándo empezaste a trabajar en la cafetería? ...
No es de mi estilo, pero valdrá para empezar...
-Empecé a trabajar a los 17 años... Y ahora mismo tengo 21.
-Oh, empezaste pronto... ¡Pues se te ve joven! No parece que tengas esa edad.
-Es que soy joven y esto... ¿Gracias? Voy a ponerme el uniforme y a sacar uno para Whitey.
-¡Espera, hay más preguntas! Esta es de... ¡Anda, es mía! Ya eres una mujer madura, ¿No tienes ningún rollete por ahí?
-¡N-no! ¿Con quién se supone que podría estar saliendo?
-No sé, no sé... Algún romance secreto... ¡Hace poco estuviste en la playa!
-¡White, para! ¡Déjala que vaya a por mi uniforme!
-Whitey, eres una interesada...
-C-calla.
-¡Fin de la entrevista, nos vemos en la próxima!
-¿¡Habrá próxima?! Mmm... Da igual, voy a dentro, ahora vuelvo.
Yimei hizo lo que decía que iba a hacer, despertó a Keyla primero, la cual se levantó de un salto y se vistió velozmente. Después se puso su uniforme y fue a por uno para Whitey, aunque no fuese a trabajar de verdad al menos que sintiese como si lo estuviese haciendo...
Salió y le dio el uniforme a la chica, Keyla ya estaba bajando todas las sillas de las mesas de la cafetería, parecía que no recordaba el día libre, así que Yimei le refrescó la memoria mientras Whitey se cambiaba en el baño.
-¡Hala, es verdad! ¿Y yo para qué me he vestidooo?- Se lamentó Keyla.
Yimei se encogió de hombros, se fijó en que White estaba mirando el tablón de fotos.
En ese momento la chica se giró y dijo algo.
-Sí, debió ser un día divertido.-Sonrió.-¿Segura de que no te salió ningún pretendiente? Con ese bañador...-
-¡Ya te he dicho que no!-
Entonces Whitey salió del baño. El uniforme del Nica's era sencillo, tan solo eran un vestido amarillo apagado y un delantal azul grisáceo, no eran colores muy llamativos. Además en la cabeza se llevaba una especie de cofia, aunque eso era opcional.
White aplaudió a su amiga y jefa, Yimei y Keyla sonrieron.
De repente, alguien entró a la velocidad del rayo en el Nica's, pero no lo hizo por la puerta, sino por la ventana. Ese alguien llevaba ropa oscura y una máscara, también una cámara con la que le sacó varias fotos a Whitey con uniforme... Era alguien bajito y mientras estaba distraído, Yimei lo agarró, le quitó la máscara y...
-¿¡Jefa Mónica!? ¿Qué haces aquí y por qué entras tan furtivamente..?-
-Y de paso, ¿Por qué no nos avisaste de que hoy vendrían Whitey y White?-Añadió Keyla.
-N-no habéis visto nada...-Hizo unos gestos raros con las manos.
Todos se quedaron espectantes hasta que White rompió el silencio.-Sí lo hemos visto.-
-¡Maldición, he sido descubierta!-Vaciló un momento antes de contestar.-Estoy aquí para recibir a nuestras invitadas, entro así para darles una sorpresa... Y no avisé porque... ¡Uy, tengo que hacer algo!-Se guardó la cámara entre la ropa y huyó.
-¡Noooo, se ha escapado! ¡Ahora no podré entrev-! ¡Se ha llevado fotos de Whitey!-Se quejó White.
-Creo que volverá... Tranquila...-
-¿P-para qué quería fotos mías con este uniforme?-
-Misterios del portal...-
Keyla metió baza.-Mejor no pensemos en eso más... Por cierto, yo antes creía que érais la misma persona... ¡Es que vuestros nombres se parecen mucho!-
-¡No se parecen en nada! ¡OTRA IGUAL! ¡MI NOMBRE ES WHITE, W-H-I-T-E SIN LA Y!-
-E-entiendo... Disculpadme...-
-No pasa nada, ya estamos acostumbradas...-Dijo Whitey, aunque por su expresión de mosqueo no parecía opinar eso.
De repente sonó la campanita de la puerta y dos personas entraron, un chico con el pelo gris y los ojos azul verdosos y una chica con el pelo azul y los ojos rojos.
-¡Clientes!-Exclamaron White y Whitey a la vez.
En cambio, Keyla y Yimei se sorprendieron.-¿¡Clientes!?-
Whitey se apresuró a recibirlos.-¡Bienvenidos al Nica's! Tomen asiento ahora les atiendo.-
Yimei se colocó detrás de la barra y fue en ese momento cuando se dio cuenta de que en realidad no eran clientes... Al menos no clientes normales... Pero no dijo nada y preparó las cosas necesarias para hacer dos tés.
-¡Bienvenidoos!-Keyla también los recibió.
-Mmm... Me sonáis de algo... Yo os he visto en alguna parte antes...-Susurró Whitey sin darse cuenta. Ya estaban sentados en una mesa.
-¡Pues claro, si son los famosos Victoria y Dirian de Glishes! ¿Qué os trae al Nica's y en pareja?-White adoptó una sonrisa maliciosa.
Victoria reaccionó sonrojándose.
-¡No vamos juntos... No de esa forma!-Se quejó Dirian también sonrojado.
-Venga, venga, que no os dé vergüenza admitirlo.- Sacó de nuevo la libreta y el boli.
-¡Bienvenidos a El Cotilla en 2D, especial Nica's! ¡Aquí White como entrevistadora! ¡La segunda entrevista del día, para Dirian y Victoria!
-¿¡Eh..!?
-¿Esto es una broma que soléis hacer los plebeyos..?
-Curiosa forma de saludar... Bueno, comencemos. La primera pregunta es de... ¡Sin nombre! Ah, genial. ¡Uuoh, es de las que me gustan! la pregunta es para Victoria. Te esforzaste mucho para poder curar a Dirian cuando estuvo herido, ¿Te gusta?
Hala, así directamente.
-¡N-no me gusta! ¡Quería sentirme útil! Además, estaba así por mi culpa, no podía dejar que le pasase nada.
-¿Segura? Si quitamos de esa frase: "No" y "Además, estaba así por mi culpa." ¿No te parece que queda algo interesante?
-¡Qué retorcida!
-Gracias, es mi trabajo.
Okno.
Bueno, lo siguiente...
-Corta, White, ha llegado la hora de entregar el pedido.
-¿¡Qué, ahora!?
-Sí.
-¡Voy a perder audiencia!
-Nadie está grabando...-
-Está bien... ¡Hasta la próxima, se despide, White!
Whitey llevó una bandeja con dos tacitas de té tradicionales y una tetera a la mesa, la soltó cuidadosamente y les sirvió el contenido de la tetera.
-¡Espero que lo disfrutéis!-
-¡Gracias!-Dijo Dirian.
-¡Muchísimas gracias!-Añadió Victoria más bajo.-Nos has salvado de White...-Ella sonrió.-En realidad es buena chica.-
-¡Os estoy escuchando!-
Victoria se tomó el té muy rápido, Dirian la imitó.
-¡Hasta luego, ha sido un placer!-Se despidió Victoria.
Y en pocos segundos desaparecieron.
-No me lo puedo creer, he atendido a Victoria y Dirian... Los de verdad.-A Whitey no le dio mucho tiempo a soñar despierta, pues la campanita sonó de nuevo y otras dos personas entraron por la puerta.
Una chica bajita y pelirroja acompañada de un chico más alto que ella, con el pelo anaranjado y los ojos verdes.
-¡SÍ! ¡Los estaba esperando!- Se le escapó a White.-Olvidadlo, no he dicho nada.-Después de aquello, se acercó a la barra y le pidió algo a Yimei, las dos sonrieron maliciosamente.
-¡Bienvenidos, Lianndra y Tyler! ¡Tomad asiento! ¡En seguida seréis atendidos!-
Hicieron caso y se sentaron, Eiri se acercó a Lianndra y se sentó en la mesa frente a ella.
Keyla estaba extrañada por estos raros sucesos... Se fue a la parte de atrás de la cafetería.
Whitey estaba recogiendo lo de los clientes anteriores, ese momento lo aprovechó White para meter baza.
-¡Bienvenidos a El Cotilla en 2D, especial Nica's! ¡Soy White! ¡La tercera entrevista del día, para Tyler y Lianndra!
-¿Quién te crees que eres?
-¿Perdona..?
-Sí, en Glishes tenéis que practicar los saludos. Ejem... Comencemos.
Para vosotros hay una pregunta que se repite mucho, ¡Casi todo el mundo pregunta lo mismo! <<Hasta yo misma...>>
¡La pregunta es..! ¿Qué es "eso"? Ya se ha mencionado en varias ocasiones, pero nunca decís qué es y no queréis que se sepa... ¡Esto huele a salseo!
-¡¿Salseo!? ¿Qué quieres decir?
-¡No te vamos a decir "eso"! ¡E-es personal!
-¡Cuidado, Lianndra!
-¡AJÁ! ¡Es personal! ¡Contadme más! ¡Sí, sí, ya os veo sonrojados!
-¡Te vas a enterar!
-A-alto, seamos civilizados ¿¡Qué haces saltando por encima de la mesa!? ¡Para, Lianndra!
¡FIN DE LA ENTREVISTA, NOS VEMOS!
White se vio obligada a acabar por miedo a acabar con un brazo o una pierna menos... Se ocultó tras la barra con Yimei.
-¡Listo, aquí está vuestro pedido!-Dijo Whitey acercándose con una bandeja sobre la que había una copa grande de zumo y dos pajitas.
-¡NOOOO!-
¡¿OTRA VEZ!?-Se quejó Lianndra.
-Uy... ¿Hay algún problema..? Lo siento peroo... No se aceptan devoluciones...-
-¡No hemos pedido esto!-
-No pasa nada, enana, yo me bebo tu parte.-
-Ya me bebo yo la tuya.-
-¡No, esta bebida es para compartir!-
Los dos a la vez cogieron las pajitas y bebieron muy rápido. Estaban sonrojados al acabar y desaparecieron de esta forma.
-Lianndra y Tyler... Yo sí quería saber qué era "eso"... White, podrías haber insistido.-
-¡Whitey, iba a morir! ¿No lo has visto?-
En ese momento, Keyla salió de la parte trasera, se había cambiado de ropa y ahora llevaba unos vaqueros cortos normales y una camiseta de tirantes morada.
Pero ella no era la única que había entrado a la habitación, Andrew estaba en la puerta.
Whitey lo recibió y lo condujo a una mesa. Se puso a recoger la copa que habían usado los clientes anteriores.
Keyla se acercó y lo saludó, él le devolvió el saludo.
White se coló en la conversación.-¡Genial!-
-¡Bienvenidos a El Cotilla en 2D, especial Nica's! ¡White, ya deberíais conocerme! ¡La cuarta entrevista del día, para Keyla y Andrew! <<Espero que no pase como en la anterior...>>
-H-hola, White...
-Estoo... ¿Hola?
-Por fin alguien que me saluda de una forma CASI normal. En fin, empecemos.
Una pregunta de... ¡LaraDamians!
Un momento... Me suena de algo... ¿Esta chica no salía en NMP..? ¡Pues claro, la amiga de Talía!
Ejem, me desvío... La pregunta es... "Se nota que a Keyla le gusta Andrew, pero y a él... ¿Le gusta ella?"
Me cae bien esta chica, tenía su alma de cotilla oculta...
-¡N-n-n-no es cierto! ¡No me gusta Andrew!
-A mí no me gusta esta chica... No d-de esa forma...
-Venga, que hay confianza, sed sinceros.
-¡Q-q-q-que no! ¡No me gusta!
-¡Pero si pareces un tomate de lo roja que estás!
-¿Podemos pasar a otra pregunta? Por favor.
-Si no hay más remedio... La siguiente pregunta es de... ¡Rojelio!
¿Eh..? Me suena a nombre de pez... Bueno, la pregunta es para Keyla... ¿Qué es lo que más te gusta de Andrew?
¡Olé, qué directo!
-¡Y-y-y-y-ya he d-d-dicho que no me gusta!
-No sé... No te veo muy segura, estás mintiendo.
-...
-¡White! ¿Vuelves a molestar a los clientes? ¡Se acabó la entrevista!
-¡Eso lo debería decir yo! ¡Fin de la entrevista, hasta la próxima!
Whitey le sirvió un chocolate caliente a Andrew y Keyla se despidió de él y se alejó a paso rápido.
Después de tomarse el chocolate, el chico se esfumó. Whitey recogió la taza y limpió la mesa.
Yimei decidió preguntarle algo a White.-Has dicho hasta la próxima... ¿Queda alguien a quién entrevistar? ¿Acaso vas a probar con Eiri?-
-No, no pensaba en Eiri, pero aún queda alguien más a quién no he tenido el placer de entrevistar.-
La campanita de la puerta sonó y una chica entró.-Exactamente.-
-Olé, qué oportuna ¡Mónica, bienvenida!-La saludó White.
-No sé para qué he entrado... Mejor me voy.-Se rió y ya se estaba dando la vuelta cuando, White, la agarró del brazo.
-De eso nada, esta vez no escaparás.-
-Ups...-
-¡Bienvenidos a El Cotilla en 2D, especial Nica's! No necesito presentarme ¡La quinta entrevista del día, para Mónica!
-¡Holaa! Diría que es un placer que me entrevisten pero n-
-¡Comencemos!
-Estaba hablando...
-La primera pregunta es de... ¡Margarita Flor del Campo!
... Sí... ¿Pero qué pregunta es esta? Pasemos...
-¡Alto! ¡Yo tengo una pregunta!
-Vale, Whitey, adelante.
-Maldita sea...
-¿Por qué me hiciste fotos antes?
-... Verte con ese uniforme era una oportunidad de oro y quería tener un recuerdo de ello. Y pocas veces tendré la oportunidad de verte en persona... Tenía que aprovechar...
-Uuuuh, se pone la cosa interesante.
-Pues podrías haberte quedado aquí si era eso lo que querías.
-Tenía trabajo...
-¿Qué trabajo?
-...
-Venga, ¿no será una excusa?
-No... ¿Quién crees que les explicó a los chicos y chicas de Glishes la situación..?
No iban a entrar como si nada a tomar algo en la cafetería y menos con esas parejas...
-Oh, buena idea la de separarlos así, me has facilitado las cosas.
-Entonces... ¿Lo has hecho por mí? ¿Para que tuviese algún cliente el día de hoy..?
-Sí...
-¡Muchas gracias..!
-Nadaaa.
-Pero quiero esas fotos de vuelta...
-Está bien...
-Entonces, ¡Doy por concluida la última entrevista de hoy, gracias a todos!
¡Nos vemos en www.letrasconencantodewhitey.blogspot.com!
-¿Eso no es Spam? en realidad da igual...
-¡Es publicidad!
Yimei se acercó a las tres chicas con un vaso en cada mano.-White, Whitey, espero teneros pronto de vuelta... ¡Tomad, un pago por vuestro gran trabajo hoy!-
-Muchas gracias, Yimei.-Dijo Whitey con una sonrisa triste.-¿Esto es una despedida..?-
-Es una despedida, pero no un adiós.-Habló White.
Keyla susurró.-Precisamente, adiós es una despedida...-
-Es un "hasta luego", estoy segura de que volveremos a vernos.-
-Eso espero.-Contestó Mónica.
Las dos chicas se tomaron la tila y desaparecieron.
Mónica suspiró y Yimei la rodeó con el brazo.
-Míralo por el lado positivo, sigues teniendo esa foto.-
A Mónica le cambió la expresión y sus ojos se iluminaron.
-Dais miedo...-Dijo Keyla.
Podéis ver su blog desde la sección "¡Blogs especiales!" o pinchar el enlace al final de este capítulo. :3 Os dejo leer el capítulo.
_______________________________________________________________________________
Era por la mañana temprano y el Nica's aún no había amanecido, Eiri estaba dormido con Keyla en la casa de la parte de atrás, Yimei iba caminando como un zombie y en pijama.
Demasiado temprano, se moría de sueño, pero alguien estaba aporreando la puerta. Puede que fuese lo último que hiciese, porque el enfado de Yimei aumentaba por momentos.
-¡YA VOY! ¡NO LLAMÉIS MÁS A LA PUERTAAAA! ¡SE TARDA UN MALDITO TIEMPO FÍSICO EN LLEGAR DE UN SITIO A OTROOO!-Llegó hasta la puerta aún un poco adormilada y después de sorprenderse al no ver a nadie a través del cristal, abrió la puerta enfadada, pero cuando iba a gritar maldiciendo a aquellos desalmados que la despertaban tan temprano, alguien que estaba pegada a la pared, saltó y gritó a modo de
saludo:- HEEEEEEEEEEEEYYYYYYYYYYYYY YAAAAAAAAAAAAAAA!-
Yimei se asustó al principio, luego observó con atención. Había dos chicas: La que había gritado de aquella manera, con el pelo rosa suelto sobre los hombros, los ojos del mismo color y llevaba puesto un vestido rosa pastel con el filo amarillo y unas manoletinas del mismo color que el vestido... Se la veía emocionada.
La otra estaba saludando con la mano desde atrás. Llevaba el pelo castaño recogido en una coleta y unas gafas claras reposaban sobre sus ojos marrones. Llevaba una camiseta blanca normal y una falda azul celeste, sus zapatos eran azules también. Parecía algo más tímida que la otra chica.
-¡H-hola! ¡White y Whitey! ¡Es un placer teneros hoy de visita! Peroo... ¿Por qué tan temprano? ¿Y por qué no avisastéis de que vendríais hoy?-Yimei se lamentó por dentro, podría haber arreglado el Nica's y su casa de la parte trasera un poco más...
White fue la que contestó.-Whitey quería aprovechar al máximo el día.-Señaló a la chica de atrás.- Avisamos a Mónica...-Sonrió.
-Ah, m-me pilláis en pijama...-Se le escapó una risita nerviosa.-Oh, no os quedéis ahí,
¡pasad!-Les dejó sitio para que entrasen.-Bueno... Lo malo es que hoy es mi día libre y el Nica's no abre... Así qu-
-¿¡Qué dices!? ¿No vendrán clientes?- Preguntó preocupada Whitey, cortando a Yimei a media frase.
-¡NOOOO PUEDE SER! ¡No podré hacer las entre-! Quiero decir... ¡Whitey no podrá trabajar aquí sin clientes!-
Era cierto, Whitey había sido invitada por Yimei a trabajar en el Nica's, ya que a la muchacha le hacía mucha ilusión la idea. ¿Habría hecho aquello a propósito su jefa Mónica..? Es cierto que la avisó de que ese día iba a pasar algo grande... Como aquella vez en la playa, pero... ¿Qué podría ser?
-No... No vendrán... Pero, ¡Podéis volver otro día! Es raro que Mónica no os avisase de esto... ¡Y tampoco me avisó a mí! Es despistada, pero no se le pasaría algo así...-
Yimei miró a sus invitadas y se le partió el alma al ver sus caritas de desilusión.
-¡Tranquilas, se me ocurrirá algo! Voy a vestirme y a despertar a Keyla, ahora vengo, vosotras como si estuviéseis en vuestra casa.-
-Oke.-Dijo Whitey sonriendo.
-¡Okiiii!-Contestó White siguiéndola.
-Voy a cambiarme... Lo has oído, ¿no?-
-Síp.-Sacó una libreta y un boli de un bolsito que llevaba colgado.
-¡Bienvenidos a El Cotilla en 2D, especial Nica's! ¡Primera entrevista del día, para Yimei!
-¿Q-qué haces..?-
-Bueno, la primera pregunta es de... ¡UnSerDeEsteMundo! Un nombre curioso donde los haya... ¡La pregunta es..! ¿Cuándo empezaste a trabajar en la cafetería? ...
No es de mi estilo, pero valdrá para empezar...
-Empecé a trabajar a los 17 años... Y ahora mismo tengo 21.
-Oh, empezaste pronto... ¡Pues se te ve joven! No parece que tengas esa edad.
-Es que soy joven y esto... ¿Gracias? Voy a ponerme el uniforme y a sacar uno para Whitey.
-¡Espera, hay más preguntas! Esta es de... ¡Anda, es mía! Ya eres una mujer madura, ¿No tienes ningún rollete por ahí?
-¡N-no! ¿Con quién se supone que podría estar saliendo?
-No sé, no sé... Algún romance secreto... ¡Hace poco estuviste en la playa!
-¡White, para! ¡Déjala que vaya a por mi uniforme!
-Whitey, eres una interesada...
-C-calla.
-¡Fin de la entrevista, nos vemos en la próxima!
-¿¡Habrá próxima?! Mmm... Da igual, voy a dentro, ahora vuelvo.
Yimei hizo lo que decía que iba a hacer, despertó a Keyla primero, la cual se levantó de un salto y se vistió velozmente. Después se puso su uniforme y fue a por uno para Whitey, aunque no fuese a trabajar de verdad al menos que sintiese como si lo estuviese haciendo...
Salió y le dio el uniforme a la chica, Keyla ya estaba bajando todas las sillas de las mesas de la cafetería, parecía que no recordaba el día libre, así que Yimei le refrescó la memoria mientras Whitey se cambiaba en el baño.
-¡Hala, es verdad! ¿Y yo para qué me he vestidooo?- Se lamentó Keyla.
Yimei se encogió de hombros, se fijó en que White estaba mirando el tablón de fotos.
En ese momento la chica se giró y dijo algo.
-Sí, debió ser un día divertido.-Sonrió.-¿Segura de que no te salió ningún pretendiente? Con ese bañador...-
-¡Ya te he dicho que no!-
Entonces Whitey salió del baño. El uniforme del Nica's era sencillo, tan solo eran un vestido amarillo apagado y un delantal azul grisáceo, no eran colores muy llamativos. Además en la cabeza se llevaba una especie de cofia, aunque eso era opcional.
White aplaudió a su amiga y jefa, Yimei y Keyla sonrieron.
De repente, alguien entró a la velocidad del rayo en el Nica's, pero no lo hizo por la puerta, sino por la ventana. Ese alguien llevaba ropa oscura y una máscara, también una cámara con la que le sacó varias fotos a Whitey con uniforme... Era alguien bajito y mientras estaba distraído, Yimei lo agarró, le quitó la máscara y...
-¿¡Jefa Mónica!? ¿Qué haces aquí y por qué entras tan furtivamente..?-
-Y de paso, ¿Por qué no nos avisaste de que hoy vendrían Whitey y White?-Añadió Keyla.
-N-no habéis visto nada...-Hizo unos gestos raros con las manos.
Todos se quedaron espectantes hasta que White rompió el silencio.-Sí lo hemos visto.-
-¡Maldición, he sido descubierta!-Vaciló un momento antes de contestar.-Estoy aquí para recibir a nuestras invitadas, entro así para darles una sorpresa... Y no avisé porque... ¡Uy, tengo que hacer algo!-Se guardó la cámara entre la ropa y huyó.
-¡Noooo, se ha escapado! ¡Ahora no podré entrev-! ¡Se ha llevado fotos de Whitey!-Se quejó White.
-Creo que volverá... Tranquila...-
-¿P-para qué quería fotos mías con este uniforme?-
-Misterios del portal...-
Keyla metió baza.-Mejor no pensemos en eso más... Por cierto, yo antes creía que érais la misma persona... ¡Es que vuestros nombres se parecen mucho!-
-¡No se parecen en nada! ¡OTRA IGUAL! ¡MI NOMBRE ES WHITE, W-H-I-T-E SIN LA Y!-
-E-entiendo... Disculpadme...-
-No pasa nada, ya estamos acostumbradas...-Dijo Whitey, aunque por su expresión de mosqueo no parecía opinar eso.
De repente sonó la campanita de la puerta y dos personas entraron, un chico con el pelo gris y los ojos azul verdosos y una chica con el pelo azul y los ojos rojos.
-¡Clientes!-Exclamaron White y Whitey a la vez.
En cambio, Keyla y Yimei se sorprendieron.-¿¡Clientes!?-
Whitey se apresuró a recibirlos.-¡Bienvenidos al Nica's! Tomen asiento ahora les atiendo.-
Yimei se colocó detrás de la barra y fue en ese momento cuando se dio cuenta de que en realidad no eran clientes... Al menos no clientes normales... Pero no dijo nada y preparó las cosas necesarias para hacer dos tés.
-¡Bienvenidoos!-Keyla también los recibió.
-Mmm... Me sonáis de algo... Yo os he visto en alguna parte antes...-Susurró Whitey sin darse cuenta. Ya estaban sentados en una mesa.
-¡Pues claro, si son los famosos Victoria y Dirian de Glishes! ¿Qué os trae al Nica's y en pareja?-White adoptó una sonrisa maliciosa.
Victoria reaccionó sonrojándose.
-¡No vamos juntos... No de esa forma!-Se quejó Dirian también sonrojado.
-Venga, venga, que no os dé vergüenza admitirlo.- Sacó de nuevo la libreta y el boli.
-¡Bienvenidos a El Cotilla en 2D, especial Nica's! ¡Aquí White como entrevistadora! ¡La segunda entrevista del día, para Dirian y Victoria!
-¿¡Eh..!?
-¿Esto es una broma que soléis hacer los plebeyos..?
-Curiosa forma de saludar... Bueno, comencemos. La primera pregunta es de... ¡Sin nombre! Ah, genial. ¡Uuoh, es de las que me gustan! la pregunta es para Victoria. Te esforzaste mucho para poder curar a Dirian cuando estuvo herido, ¿Te gusta?
Hala, así directamente.
-¡N-no me gusta! ¡Quería sentirme útil! Además, estaba así por mi culpa, no podía dejar que le pasase nada.
-¿Segura? Si quitamos de esa frase: "No" y "Además, estaba así por mi culpa." ¿No te parece que queda algo interesante?
-¡Qué retorcida!
-Gracias, es mi trabajo.
Okno.
Bueno, lo siguiente...
-Corta, White, ha llegado la hora de entregar el pedido.
-¿¡Qué, ahora!?
-Sí.
-¡Voy a perder audiencia!
-Nadie está grabando...-
-Está bien... ¡Hasta la próxima, se despide, White!
Whitey llevó una bandeja con dos tacitas de té tradicionales y una tetera a la mesa, la soltó cuidadosamente y les sirvió el contenido de la tetera.
-¡Espero que lo disfrutéis!-
-¡Gracias!-Dijo Dirian.
-¡Muchísimas gracias!-Añadió Victoria más bajo.-Nos has salvado de White...-Ella sonrió.-En realidad es buena chica.-
-¡Os estoy escuchando!-
Victoria se tomó el té muy rápido, Dirian la imitó.
-¡Hasta luego, ha sido un placer!-Se despidió Victoria.
Y en pocos segundos desaparecieron.
-No me lo puedo creer, he atendido a Victoria y Dirian... Los de verdad.-A Whitey no le dio mucho tiempo a soñar despierta, pues la campanita sonó de nuevo y otras dos personas entraron por la puerta.
Una chica bajita y pelirroja acompañada de un chico más alto que ella, con el pelo anaranjado y los ojos verdes.
-¡SÍ! ¡Los estaba esperando!- Se le escapó a White.-Olvidadlo, no he dicho nada.-Después de aquello, se acercó a la barra y le pidió algo a Yimei, las dos sonrieron maliciosamente.
-¡Bienvenidos, Lianndra y Tyler! ¡Tomad asiento! ¡En seguida seréis atendidos!-
Hicieron caso y se sentaron, Eiri se acercó a Lianndra y se sentó en la mesa frente a ella.
Keyla estaba extrañada por estos raros sucesos... Se fue a la parte de atrás de la cafetería.
Whitey estaba recogiendo lo de los clientes anteriores, ese momento lo aprovechó White para meter baza.
-¡Bienvenidos a El Cotilla en 2D, especial Nica's! ¡Soy White! ¡La tercera entrevista del día, para Tyler y Lianndra!
-¿Quién te crees que eres?
-¿Perdona..?
-Sí, en Glishes tenéis que practicar los saludos. Ejem... Comencemos.
Para vosotros hay una pregunta que se repite mucho, ¡Casi todo el mundo pregunta lo mismo! <<Hasta yo misma...>>
¡La pregunta es..! ¿Qué es "eso"? Ya se ha mencionado en varias ocasiones, pero nunca decís qué es y no queréis que se sepa... ¡Esto huele a salseo!
-¡¿Salseo!? ¿Qué quieres decir?
-¡No te vamos a decir "eso"! ¡E-es personal!
-¡Cuidado, Lianndra!
-¡AJÁ! ¡Es personal! ¡Contadme más! ¡Sí, sí, ya os veo sonrojados!
-¡Te vas a enterar!
-A-alto, seamos civilizados ¿¡Qué haces saltando por encima de la mesa!? ¡Para, Lianndra!
¡FIN DE LA ENTREVISTA, NOS VEMOS!
White se vio obligada a acabar por miedo a acabar con un brazo o una pierna menos... Se ocultó tras la barra con Yimei.
-¡Listo, aquí está vuestro pedido!-Dijo Whitey acercándose con una bandeja sobre la que había una copa grande de zumo y dos pajitas.
-¡NOOOO!-
¡¿OTRA VEZ!?-Se quejó Lianndra.
-Uy... ¿Hay algún problema..? Lo siento peroo... No se aceptan devoluciones...-
-¡No hemos pedido esto!-
-No pasa nada, enana, yo me bebo tu parte.-
-Ya me bebo yo la tuya.-
-¡No, esta bebida es para compartir!-
Los dos a la vez cogieron las pajitas y bebieron muy rápido. Estaban sonrojados al acabar y desaparecieron de esta forma.
-Lianndra y Tyler... Yo sí quería saber qué era "eso"... White, podrías haber insistido.-
-¡Whitey, iba a morir! ¿No lo has visto?-
En ese momento, Keyla salió de la parte trasera, se había cambiado de ropa y ahora llevaba unos vaqueros cortos normales y una camiseta de tirantes morada.
Pero ella no era la única que había entrado a la habitación, Andrew estaba en la puerta.
Whitey lo recibió y lo condujo a una mesa. Se puso a recoger la copa que habían usado los clientes anteriores.
Keyla se acercó y lo saludó, él le devolvió el saludo.
White se coló en la conversación.-¡Genial!-
-¡Bienvenidos a El Cotilla en 2D, especial Nica's! ¡White, ya deberíais conocerme! ¡La cuarta entrevista del día, para Keyla y Andrew! <<Espero que no pase como en la anterior...>>
-H-hola, White...
-Estoo... ¿Hola?
-Por fin alguien que me saluda de una forma CASI normal. En fin, empecemos.
Una pregunta de... ¡LaraDamians!
Un momento... Me suena de algo... ¿Esta chica no salía en NMP..? ¡Pues claro, la amiga de Talía!
Ejem, me desvío... La pregunta es... "Se nota que a Keyla le gusta Andrew, pero y a él... ¿Le gusta ella?"
Me cae bien esta chica, tenía su alma de cotilla oculta...
-¡N-n-n-no es cierto! ¡No me gusta Andrew!
-A mí no me gusta esta chica... No d-de esa forma...
-Venga, que hay confianza, sed sinceros.
-¡Q-q-q-que no! ¡No me gusta!
-¡Pero si pareces un tomate de lo roja que estás!
-¿Podemos pasar a otra pregunta? Por favor.
-Si no hay más remedio... La siguiente pregunta es de... ¡Rojelio!
¿Eh..? Me suena a nombre de pez... Bueno, la pregunta es para Keyla... ¿Qué es lo que más te gusta de Andrew?
¡Olé, qué directo!
-¡Y-y-y-y-ya he d-d-dicho que no me gusta!
-No sé... No te veo muy segura, estás mintiendo.
-...
-¡White! ¿Vuelves a molestar a los clientes? ¡Se acabó la entrevista!
-¡Eso lo debería decir yo! ¡Fin de la entrevista, hasta la próxima!
Whitey le sirvió un chocolate caliente a Andrew y Keyla se despidió de él y se alejó a paso rápido.
Después de tomarse el chocolate, el chico se esfumó. Whitey recogió la taza y limpió la mesa.
Yimei decidió preguntarle algo a White.-Has dicho hasta la próxima... ¿Queda alguien a quién entrevistar? ¿Acaso vas a probar con Eiri?-
-No, no pensaba en Eiri, pero aún queda alguien más a quién no he tenido el placer de entrevistar.-
La campanita de la puerta sonó y una chica entró.-Exactamente.-
-Olé, qué oportuna ¡Mónica, bienvenida!-La saludó White.
-No sé para qué he entrado... Mejor me voy.-Se rió y ya se estaba dando la vuelta cuando, White, la agarró del brazo.
-De eso nada, esta vez no escaparás.-
-Ups...-
-¡Bienvenidos a El Cotilla en 2D, especial Nica's! No necesito presentarme ¡La quinta entrevista del día, para Mónica!
-¡Holaa! Diría que es un placer que me entrevisten pero n-
-¡Comencemos!
-Estaba hablando...
-La primera pregunta es de... ¡Margarita Flor del Campo!
... Sí... ¿Pero qué pregunta es esta? Pasemos...
-¡Alto! ¡Yo tengo una pregunta!
-Vale, Whitey, adelante.
-Maldita sea...
-¿Por qué me hiciste fotos antes?
-... Verte con ese uniforme era una oportunidad de oro y quería tener un recuerdo de ello. Y pocas veces tendré la oportunidad de verte en persona... Tenía que aprovechar...
-Uuuuh, se pone la cosa interesante.
-Pues podrías haberte quedado aquí si era eso lo que querías.
-Tenía trabajo...
-¿Qué trabajo?
-...
-Venga, ¿no será una excusa?
-No... ¿Quién crees que les explicó a los chicos y chicas de Glishes la situación..?
No iban a entrar como si nada a tomar algo en la cafetería y menos con esas parejas...
-Oh, buena idea la de separarlos así, me has facilitado las cosas.
-Entonces... ¿Lo has hecho por mí? ¿Para que tuviese algún cliente el día de hoy..?
-Sí...
-¡Muchas gracias..!
-Nadaaa.
-Pero quiero esas fotos de vuelta...
-Está bien...
-Entonces, ¡Doy por concluida la última entrevista de hoy, gracias a todos!
¡Nos vemos en www.letrasconencantodewhitey.blogspot.com!
-¿Eso no es Spam? en realidad da igual...
-¡Es publicidad!
Yimei se acercó a las tres chicas con un vaso en cada mano.-White, Whitey, espero teneros pronto de vuelta... ¡Tomad, un pago por vuestro gran trabajo hoy!-
-Muchas gracias, Yimei.-Dijo Whitey con una sonrisa triste.-¿Esto es una despedida..?-
-Es una despedida, pero no un adiós.-Habló White.
Keyla susurró.-Precisamente, adiós es una despedida...-
-Es un "hasta luego", estoy segura de que volveremos a vernos.-
-Eso espero.-Contestó Mónica.
Las dos chicas se tomaron la tila y desaparecieron.
Mónica suspiró y Yimei la rodeó con el brazo.
-Míralo por el lado positivo, sigues teniendo esa foto.-
A Mónica le cambió la expresión y sus ojos se iluminaron.
-Dais miedo...-Dijo Keyla.
"¡Eiri no está! Nica's"
Un día como otro cualquiera en el Nica's, por fin habían podido abrir después del desastre de la lluvia y un nuevo misterio preocupaba a Yimei. Eiri llevaba varios días saliendo justo a la hora de cerrar la cafetería y volvía una hora después... ¿Qué estaría haciendo su gato en esa hora?
Ese día lo descubriría o al menos eso pensaba... Fue a su armario a por un abrigo y su bufanda, el sitio donde estaba su cafetería era más bien fresco, bueno, así vendía más café.
-Keyla ¿Has visto a Eiri?-
-No.-Se quedó pensativa.-¿Se ha vuelto a ir?-
-¡Maldición, se me ha escapado!-
-Bueno, siempre vuelve...-
-Sí... Pero quería saber adónde iba...-
-Es un gato, Yimei.-
-Aunque sea un gato... Es como de mi familia y no quiero que le pase nada.-La chica suspiró.
Se hizo el silencio hasta que sonó la campanita de la puerta y un chico de expresión risueña y pelo anaranjado entró.-¡Holaa! ¡Aquí vuelve el rey de la diversión!-
Keyla lo miró extrañada.-Sigue sin ir nadie contigo...-
-YO soy el rey de la diversión.-
-Si tú lo dices...-
Yimei se llevó la mano a la frente.-Me parece que esto ya lo he vivido antes...-
-¡Jefa, una tila!-Dijo Tyler dirigiéndose a la barra.
-¿Tan pronto? No, no, hablemos antes, cuéntanos tus penas y te aconsejamos.-
-No tengo penas, siempre soy feliz.-
-No hay forma de que nadie se crea eso... Bueno, pues te cuento yo las mías.-Contestó Yimei.
Keyla y su jefa se pusieron tras la barra, mientras la joven la limpiaba con un trapo, Yimei limpiaba un vaso.
Tyler se acomodó en un asiento.
-Por cierto, me impresionó cómo viniste a ayudarnos a limpiar la cafetería.-Yimei lo miró de reojo.-Sí, al final nos ayudó Dirian.
Tyler cambió su expresión preocupada y risa nerviosa por una carcajada.-Claro, Dirian limpiando o haciendo una tarea como esa.- No paraba de reír.
Keyla infló sus mofletes, mosqueada.-Con una disculpa por no venir habría bastado.-
Yimei suspiró.-Ya no se puede hacer nada... ¡Nos debes una!-
-¿Q-qué..?-Desvió un momento la mirada hacia la foto de la playa del tablón que había detrás de Yimei.-Está bien... Y es una suerte que no le haya pasado nada a esa foto... Es oro...-
Keyla le lanzó el trapo a la cara, sonrojada.-¡No la mires con esa cara!-
-Me estás babeando la barra...-Advirtió Yimei.
Tyler se limpió las babas, le devolvió el trapo a Keyla y carraspeó.-Tú tenías algo que contarme...-
-Ah, sí. Es que hace varios días que Eiri desaparece justo después de que cerremos y vuelve una hora más tarde. No sabemos qué hace y adónde va... Estoy preocupada...-
-¿Te refieres al gato..? Tranquila, es un gato.-Se quedó pensativo.-Además, es macho, tiene sus neces-
Keyla le volvió a lanzar el trapo y lo cortó a media frase.
-¡Pervertido!-
Yimei habló tras pensar un rato.-Puede que Lianndra tuviese algo que ver, como la primera vez... Pero no creo que venga tantos días seguidos y no pase por el Nica's...-
En ese momento, se escuchó la campanita y una chica bajita y con una larga melena pelirroja, entró.-He oído mi nombre, ¿Qué estabais diciendo de mí?- Tenía el ceño fruncido.
-¡Enana! Espera... ¿Por qué me miras así? ¿Enana?-
Lianndra se acercó velozmente y le lanzó una patada voladora a Tyler, este se lanzó al suelo y la esquivó de milagro. La chica aterrizó de mala manera sobre la barra.
-¡Maldito, no me esquives!-
-¡¿Y dejo que me hagas daño?! ¡Estás loca, enana!-
-¡NO ME LLAMES ASÍI!-
-No, se ve que Lianndra no tiene nada que ver con este asunto.-
-¿Qué asunto..?-La chica se sentó como si no hubiese pasado nada y se quedó mirando a Yimei, entonces se dio cuenta de la foto que había clavada en el corcho y se sonrojó.-¿Por qué tenéis eso ahí? ¡N-no me queda bien! ¡Recortadme aprovechando que estoy a un lado!-
-Tú como si no hubieses intentado pegarme...- Tyler también se sentó.-Pues yo creo que estás preciosa.-Le dedicó una amplia sonrisa.
-¡Cállate!- Lianndra se sonrojó y empujó de la silla a Tyler, el chico se cayó hacia atrás y se quedó tirado en el suelo.
-Bruta. Encima que te hago un cumplido.-
-Solo te ríes de mí...-
-Bueno, ya está bien, parejita. Dejad vuestra relación de amor/odio para otro momento y prestad atención.-
Keyla estaba asombrada, pero se limitó a seguir limpiando la barra.
-¡No nos llames así!- Protestó Lianndra.-¡Jamás me gustará este... Este..!-
-El saber "eso" hace que no opine lo mismo...-Yimei carraspeó.-Venga, te cuento lo que ha pasado, Lianndra.- Se lo contó todo respecto lo que había estado haciendo Eiri, como había hecho con Tyler y mandó a Keyla que fuese preparando tilas.
Lianndra no dijo nada.
-¿Se te ocurre algo..? ¿Algún sitio don- La chica pelirroja cortó a mitad de frase a Yimei.
-No hagáis ruido un momento...-Algo se escuchaba en la parte de atrás de la cafetería, dentro de la parte de la casa.- ¿Oís eso?-
Lianndra se levantó de un salto y se dirigió hacia donde se escuchaba ese ruido.
-Pues no... Yo no oigo nada, peroo...-Dijo Yimei.
-La enana tan impulsiva como siempre.-Tyler había estado todo el tiempo en el suelo y por fin se levantó para seguir a su amiga.
Yimei los siguió también.
Lianndra estaba de pie y quieta delante de un armario, lo abrió sin permiso y de él salió Eiri de un salto hacia Yimei. Esta lo abrazó.
-¡Eiri! ¡Estabas ahí dentro! Y yo sin darme cuenta... ¡Lo siento! Debiste meterte ahí cuando fui a por mi abrigo y bufanda... ¡Keyla, hemos encontrado a Eiri!-Avisó a la otra chica que se había quedado preparando lo que le había mandado.-¡Muchas graciaaas!- Yimei abrazó también a Lianndra y ella se quejó, pero no se resistió mucho.
-¡Eso es genial!-Gritó Keyla desde fuera.-¡Venid, las tilas están listas!-
Acudieron a la llamada de la chica, Lianndra y Tyler se las bebieron con gusto y desaparecieron a los pocos segundos.
Yimei estaba feliz de haber encontrado a su gato, pero seguía sin saber adónde había ido los otros días...
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¡Espero que os haya gustado este capítulo! ¡A partir de la una el especial 1000 visitas!
Tened paciencia ^^
Ese día lo descubriría o al menos eso pensaba... Fue a su armario a por un abrigo y su bufanda, el sitio donde estaba su cafetería era más bien fresco, bueno, así vendía más café.
-Keyla ¿Has visto a Eiri?-
-No.-Se quedó pensativa.-¿Se ha vuelto a ir?-
-¡Maldición, se me ha escapado!-
-Bueno, siempre vuelve...-
-Sí... Pero quería saber adónde iba...-
-Es un gato, Yimei.-
-Aunque sea un gato... Es como de mi familia y no quiero que le pase nada.-La chica suspiró.
Se hizo el silencio hasta que sonó la campanita de la puerta y un chico de expresión risueña y pelo anaranjado entró.-¡Holaa! ¡Aquí vuelve el rey de la diversión!-
Keyla lo miró extrañada.-Sigue sin ir nadie contigo...-
-YO soy el rey de la diversión.-
-Si tú lo dices...-
Yimei se llevó la mano a la frente.-Me parece que esto ya lo he vivido antes...-
-¡Jefa, una tila!-Dijo Tyler dirigiéndose a la barra.
-¿Tan pronto? No, no, hablemos antes, cuéntanos tus penas y te aconsejamos.-
-No tengo penas, siempre soy feliz.-
-No hay forma de que nadie se crea eso... Bueno, pues te cuento yo las mías.-Contestó Yimei.
Keyla y su jefa se pusieron tras la barra, mientras la joven la limpiaba con un trapo, Yimei limpiaba un vaso.
Tyler se acomodó en un asiento.
-Por cierto, me impresionó cómo viniste a ayudarnos a limpiar la cafetería.-Yimei lo miró de reojo.-Sí, al final nos ayudó Dirian.
Tyler cambió su expresión preocupada y risa nerviosa por una carcajada.-Claro, Dirian limpiando o haciendo una tarea como esa.- No paraba de reír.
Keyla infló sus mofletes, mosqueada.-Con una disculpa por no venir habría bastado.-
Yimei suspiró.-Ya no se puede hacer nada... ¡Nos debes una!-
-¿Q-qué..?-Desvió un momento la mirada hacia la foto de la playa del tablón que había detrás de Yimei.-Está bien... Y es una suerte que no le haya pasado nada a esa foto... Es oro...-
Keyla le lanzó el trapo a la cara, sonrojada.-¡No la mires con esa cara!-
-Me estás babeando la barra...-Advirtió Yimei.
Tyler se limpió las babas, le devolvió el trapo a Keyla y carraspeó.-Tú tenías algo que contarme...-
-Ah, sí. Es que hace varios días que Eiri desaparece justo después de que cerremos y vuelve una hora más tarde. No sabemos qué hace y adónde va... Estoy preocupada...-
-¿Te refieres al gato..? Tranquila, es un gato.-Se quedó pensativo.-Además, es macho, tiene sus neces-
Keyla le volvió a lanzar el trapo y lo cortó a media frase.
-¡Pervertido!-
Yimei habló tras pensar un rato.-Puede que Lianndra tuviese algo que ver, como la primera vez... Pero no creo que venga tantos días seguidos y no pase por el Nica's...-
En ese momento, se escuchó la campanita y una chica bajita y con una larga melena pelirroja, entró.-He oído mi nombre, ¿Qué estabais diciendo de mí?- Tenía el ceño fruncido.
-¡Enana! Espera... ¿Por qué me miras así? ¿Enana?-
Lianndra se acercó velozmente y le lanzó una patada voladora a Tyler, este se lanzó al suelo y la esquivó de milagro. La chica aterrizó de mala manera sobre la barra.
-¡Maldito, no me esquives!-
-¡¿Y dejo que me hagas daño?! ¡Estás loca, enana!-
-¡NO ME LLAMES ASÍI!-
-No, se ve que Lianndra no tiene nada que ver con este asunto.-
-¿Qué asunto..?-La chica se sentó como si no hubiese pasado nada y se quedó mirando a Yimei, entonces se dio cuenta de la foto que había clavada en el corcho y se sonrojó.-¿Por qué tenéis eso ahí? ¡N-no me queda bien! ¡Recortadme aprovechando que estoy a un lado!-
-Tú como si no hubieses intentado pegarme...- Tyler también se sentó.-Pues yo creo que estás preciosa.-Le dedicó una amplia sonrisa.
-¡Cállate!- Lianndra se sonrojó y empujó de la silla a Tyler, el chico se cayó hacia atrás y se quedó tirado en el suelo.
-Bruta. Encima que te hago un cumplido.-
-Solo te ríes de mí...-
-Bueno, ya está bien, parejita. Dejad vuestra relación de amor/odio para otro momento y prestad atención.-
Keyla estaba asombrada, pero se limitó a seguir limpiando la barra.
-¡No nos llames así!- Protestó Lianndra.-¡Jamás me gustará este... Este..!-
-El saber "eso" hace que no opine lo mismo...-Yimei carraspeó.-Venga, te cuento lo que ha pasado, Lianndra.- Se lo contó todo respecto lo que había estado haciendo Eiri, como había hecho con Tyler y mandó a Keyla que fuese preparando tilas.
Lianndra no dijo nada.
-¿Se te ocurre algo..? ¿Algún sitio don- La chica pelirroja cortó a mitad de frase a Yimei.
-No hagáis ruido un momento...-Algo se escuchaba en la parte de atrás de la cafetería, dentro de la parte de la casa.- ¿Oís eso?-
Lianndra se levantó de un salto y se dirigió hacia donde se escuchaba ese ruido.
-Pues no... Yo no oigo nada, peroo...-Dijo Yimei.
-La enana tan impulsiva como siempre.-Tyler había estado todo el tiempo en el suelo y por fin se levantó para seguir a su amiga.
Yimei los siguió también.
Lianndra estaba de pie y quieta delante de un armario, lo abrió sin permiso y de él salió Eiri de un salto hacia Yimei. Esta lo abrazó.
-¡Eiri! ¡Estabas ahí dentro! Y yo sin darme cuenta... ¡Lo siento! Debiste meterte ahí cuando fui a por mi abrigo y bufanda... ¡Keyla, hemos encontrado a Eiri!-Avisó a la otra chica que se había quedado preparando lo que le había mandado.-¡Muchas graciaaas!- Yimei abrazó también a Lianndra y ella se quejó, pero no se resistió mucho.
-¡Eso es genial!-Gritó Keyla desde fuera.-¡Venid, las tilas están listas!-
Acudieron a la llamada de la chica, Lianndra y Tyler se las bebieron con gusto y desaparecieron a los pocos segundos.
Yimei estaba feliz de haber encontrado a su gato, pero seguía sin saber adónde había ido los otros días...
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¡Espero que os haya gustado este capítulo! ¡A partir de la una el especial 1000 visitas!
Tened paciencia ^^
sábado, 19 de septiembre de 2015
·Capítulo 26: Recuerdo oscuro ·
-Bien, voy ha empezar con mi historia...-Se tomó un momento para pensar cómo empezarla.-«Era un día malo, en el que estaba nevando demasiado. Iba con mi familia en nuestro carro... Entonces los caballos resbalaron y el carro se descontroló, terminó por volcarse... Cuando desperté mi madre me decía algo, pero no podía escuchar lo que decía...-
Victoria recordó que algo le sucedió al chico a los 9 años y que en ese suceso perdió a su familia... Ató cabos y se horrorizó pensando en lo que le pasó al chico.
-...Por fin volví en mí, resulta que mi madre me decía que estuviese atento y cuidase a mi hermana. Desgraciadamente no pude cumplir esa promesa... Yo estaba atrapado entre una caja rota y una parte del carro, al parecer en el rato en que había estado inconsciente los lobos habían devorado a los caballos y a mi... A mi padre...-Al chico le empezaron a resbalar lágrimas por las mejillas.
Victoria se sintió mal por haber preguntado, sus temores se habían confirmado. Se limitó a mirar al suelo.
La tensión que se había formado en torno al grupo era tan grande que ninguno se atrevió a preguntar nada. Nadie sabía qué decir.
Lianndra miraba a cada uno de sus compañeros. Tyler dirigió su mirada hacia un lado al advertir que la chica lo miraba.
Mientras, Dirian agarraba tan fuerte las riendas de su caballo que tenía los nudillos blancos.
Paz daba toquecitos en el hombro a Andrew, C y Kazen se miraban mutuamente.
Entonces continuó la historia del chico, realmente le temblaba la voz.
-Menos mal que no llegué a ver el cuerpo de mi padre... Justo cuando los lobos se decidieron a atacar a mi madre, mi hermana despertó y no pude hacer nada para que no viera como se llevaban a nuestra madre, tirando de su ropa.
Eso fue demasiado para mi hermanita pequeña, que me preguntó qué pasaba y adónde se llevaban a mi madre. No supe qué responderle a eso... Entonces ella salió corriendo de los restos del carro donde estábamos, no pude seguirla porque estaba atrapado, lo intenté con todas mis fuerzas, incluso me hice daño. Pero no logré nada.
Escuché un ruido fuerte y a partir de ahí mis recuerdos no son muy buenos, creo que se me cayó una parte del carro encima...
Me desperté y vi a un lobo mirándome desde arriba, pero enseguida volví a desmayarme. Después de eso me encontraba en una casa del pueblo de la montaña, demasiada confusión... Para un niño de nueve años. Me cuidó una anciana, en su casa, en mi casa actual. Hasta que se puso enferma y tuvo que irse, porque aquí en Raeren no hay de los tratamientos que necesitaba ella.
Desde hace dos años vivo solo.»
Esa es mi historia...Todo lo que recuerdo al menos.- Su cara estaba llena de lágrimas y la suya no era la única, Victoria también había empezado a sollozar y Tyler escondía la suya detrás de la espalda de ella. Dirian lanzaba maldiciones, pero Lianndra no estaba segura si era por la historia o era porque sin darse cuenta lo había agarrado muy fuerte por la espalda.
-Bueno... Lo siento de verdad por haberte hecho otra vez la pregunta...-Dijo Victoria sombría.
Luego advirtió que Dirian la miraba con preocupación, aún así lo ignoró.
-No puedo veros así... Estáis todos demasiado tristes...-Habló Lianndra.-No quiero que penséis que soy una insensible... Ni que soy una estúpida.-Miró fugazmente a Tyler al decir lo último.-Solo que esto no es justo...-Rompió a llorar.-Un chico tan bueno como Andrew... No se merece esto, ninguno nos merecemos nada malo, no quiero llorar, no, no, no, ¡No!-
-Calmaos niños...-Intentó suavizar la situación Paz.
-¡No he terminado!-Anunció Lianndra mientras se limpiaba las lágrimas e intentaba sonreír.-Cada uno tiene sus momentos malos y los buenos... Pero lo malo pasa y lo bueno llega.
Cuando uno está triste solo tiene que pensar en algún momento bueno, cuanto mayor sea la pena, mayor tendrá que ser de feliz el recuerdo.
Por eso... Os propongo que desde ahora solo tengamos momentos felices y si por alguna razón tenemos una mala racha, la pasemos juntos.-
No obtuvo una respuesta inmediata. Pero al cabo de unos minutos, C habló:-Chica, has logrado impresionarme...-
-¿De dónde decías que había salido esta niña?-Preguntó Kazen.
Tyler añadió después de un largo
silbido.-Maldita sea enana, pasas de gritar como una verdulera a hablar como una señorita.-
Con esa comparación la chica se sonrojó.-Tienes suerte de estar en otro caballo, porque te habría dado una tunda por llamarme enana y verdulera en la misma frase!-
Victoria bajó de la yegua y se acercó a Andrew que ahora estaba también bajado del caballo.
-A-andrew.-La chica parecía a punto de llorar otra vez, por el contrario cuando miró del todo al chico le dedicó una amplia sonrisa y le tendió
la mano.-¿Quieres ser uno de mis compañeros de penas? Nunca volveré a incomodarte ni a entristecerte y siempre que lo necesites podrás contar conmigo.-
Él no parecía saber cómo reaccionar, le intentó dar la mano, pero no podía sonreír.
Entonces cuando sus manos casi se tocaban Lianndra saltó del caballo, casi tirando a Dirian y se acercó a ellos.-Venga aunque sea una pequeña sonrisaa.-Comenzó a hacerle cosquillas a Andrew mientras que se reía, entonces el chico empezó a reírse sin poder contenerse.
###
Andrew los había llevado durante un día más andando por la montaña, hasta llegar a una grieta en medio de la roca, allí les indicó que había que entrar.
Pero alguien siempre tiene que oponerse a todo...
-¿Piensas que entraremos ahí?-Preguntó Lianndra.
Tyler soltó una risita estúpida y añadió.-¿Es que te da miedo la oscuridad, enana?-
Ella enrojeció de enfado, entonces estuvo a punto de volver a gritarle, pero Kazen
la interrumpió.-Bueno habrá que seguir adelante, porque no hay otro camino.-
Dirian no parecía muy seguro de querer entrar ahí, es más, antes al mencionar Tyler eso de la oscuridad, pareció mosquearse.-Oíd ¿alguien tiene antorchas o algo parecido?-
-Sí, algo parecido...-Nada más decir esto C invocó una bola de fuego justo sobre su cabeza y sonrió.-¿Esto te parece suficiente?-
-Mientras que no nos quemes...-Le contestó él.
Andrew bajó de Ventisca y llevándole de las riendas, se dirigió hacia la grieta.
Justo antes de entrar se giró.-Venga en marcha. Desmontad también.-
Obedecieron enseguida y se acercaron a él, ahora C tenía que ir delante para alumbrar.
________________________________________________________________________
Espero que os hayan gustado los capítulos de hoy ^^
Quiería avisaros de que como he llegado a las 1000 visitas voy a hacer un especial y será aún más especial por los personajes que saldrán... Ya veréis mañana a las 12.
Victoria recordó que algo le sucedió al chico a los 9 años y que en ese suceso perdió a su familia... Ató cabos y se horrorizó pensando en lo que le pasó al chico.
-...Por fin volví en mí, resulta que mi madre me decía que estuviese atento y cuidase a mi hermana. Desgraciadamente no pude cumplir esa promesa... Yo estaba atrapado entre una caja rota y una parte del carro, al parecer en el rato en que había estado inconsciente los lobos habían devorado a los caballos y a mi... A mi padre...-Al chico le empezaron a resbalar lágrimas por las mejillas.
Victoria se sintió mal por haber preguntado, sus temores se habían confirmado. Se limitó a mirar al suelo.
La tensión que se había formado en torno al grupo era tan grande que ninguno se atrevió a preguntar nada. Nadie sabía qué decir.
Lianndra miraba a cada uno de sus compañeros. Tyler dirigió su mirada hacia un lado al advertir que la chica lo miraba.
Mientras, Dirian agarraba tan fuerte las riendas de su caballo que tenía los nudillos blancos.
Paz daba toquecitos en el hombro a Andrew, C y Kazen se miraban mutuamente.
Entonces continuó la historia del chico, realmente le temblaba la voz.
-Menos mal que no llegué a ver el cuerpo de mi padre... Justo cuando los lobos se decidieron a atacar a mi madre, mi hermana despertó y no pude hacer nada para que no viera como se llevaban a nuestra madre, tirando de su ropa.
Eso fue demasiado para mi hermanita pequeña, que me preguntó qué pasaba y adónde se llevaban a mi madre. No supe qué responderle a eso... Entonces ella salió corriendo de los restos del carro donde estábamos, no pude seguirla porque estaba atrapado, lo intenté con todas mis fuerzas, incluso me hice daño. Pero no logré nada.
Escuché un ruido fuerte y a partir de ahí mis recuerdos no son muy buenos, creo que se me cayó una parte del carro encima...
Me desperté y vi a un lobo mirándome desde arriba, pero enseguida volví a desmayarme. Después de eso me encontraba en una casa del pueblo de la montaña, demasiada confusión... Para un niño de nueve años. Me cuidó una anciana, en su casa, en mi casa actual. Hasta que se puso enferma y tuvo que irse, porque aquí en Raeren no hay de los tratamientos que necesitaba ella.
Desde hace dos años vivo solo.»
Esa es mi historia...Todo lo que recuerdo al menos.- Su cara estaba llena de lágrimas y la suya no era la única, Victoria también había empezado a sollozar y Tyler escondía la suya detrás de la espalda de ella. Dirian lanzaba maldiciones, pero Lianndra no estaba segura si era por la historia o era porque sin darse cuenta lo había agarrado muy fuerte por la espalda.
-Bueno... Lo siento de verdad por haberte hecho otra vez la pregunta...-Dijo Victoria sombría.
Luego advirtió que Dirian la miraba con preocupación, aún así lo ignoró.
-No puedo veros así... Estáis todos demasiado tristes...-Habló Lianndra.-No quiero que penséis que soy una insensible... Ni que soy una estúpida.-Miró fugazmente a Tyler al decir lo último.-Solo que esto no es justo...-Rompió a llorar.-Un chico tan bueno como Andrew... No se merece esto, ninguno nos merecemos nada malo, no quiero llorar, no, no, no, ¡No!-
-Calmaos niños...-Intentó suavizar la situación Paz.
-¡No he terminado!-Anunció Lianndra mientras se limpiaba las lágrimas e intentaba sonreír.-Cada uno tiene sus momentos malos y los buenos... Pero lo malo pasa y lo bueno llega.
Cuando uno está triste solo tiene que pensar en algún momento bueno, cuanto mayor sea la pena, mayor tendrá que ser de feliz el recuerdo.
Por eso... Os propongo que desde ahora solo tengamos momentos felices y si por alguna razón tenemos una mala racha, la pasemos juntos.-
No obtuvo una respuesta inmediata. Pero al cabo de unos minutos, C habló:-Chica, has logrado impresionarme...-
-¿De dónde decías que había salido esta niña?-Preguntó Kazen.
Tyler añadió después de un largo
silbido.-Maldita sea enana, pasas de gritar como una verdulera a hablar como una señorita.-
Con esa comparación la chica se sonrojó.-Tienes suerte de estar en otro caballo, porque te habría dado una tunda por llamarme enana y verdulera en la misma frase!-
Victoria bajó de la yegua y se acercó a Andrew que ahora estaba también bajado del caballo.
-A-andrew.-La chica parecía a punto de llorar otra vez, por el contrario cuando miró del todo al chico le dedicó una amplia sonrisa y le tendió
la mano.-¿Quieres ser uno de mis compañeros de penas? Nunca volveré a incomodarte ni a entristecerte y siempre que lo necesites podrás contar conmigo.-
Él no parecía saber cómo reaccionar, le intentó dar la mano, pero no podía sonreír.
Entonces cuando sus manos casi se tocaban Lianndra saltó del caballo, casi tirando a Dirian y se acercó a ellos.-Venga aunque sea una pequeña sonrisaa.-Comenzó a hacerle cosquillas a Andrew mientras que se reía, entonces el chico empezó a reírse sin poder contenerse.
###
Andrew los había llevado durante un día más andando por la montaña, hasta llegar a una grieta en medio de la roca, allí les indicó que había que entrar.
Pero alguien siempre tiene que oponerse a todo...
-¿Piensas que entraremos ahí?-Preguntó Lianndra.
Tyler soltó una risita estúpida y añadió.-¿Es que te da miedo la oscuridad, enana?-
Ella enrojeció de enfado, entonces estuvo a punto de volver a gritarle, pero Kazen
la interrumpió.-Bueno habrá que seguir adelante, porque no hay otro camino.-
Dirian no parecía muy seguro de querer entrar ahí, es más, antes al mencionar Tyler eso de la oscuridad, pareció mosquearse.-Oíd ¿alguien tiene antorchas o algo parecido?-
-Sí, algo parecido...-Nada más decir esto C invocó una bola de fuego justo sobre su cabeza y sonrió.-¿Esto te parece suficiente?-
-Mientras que no nos quemes...-Le contestó él.
Andrew bajó de Ventisca y llevándole de las riendas, se dirigió hacia la grieta.
Justo antes de entrar se giró.-Venga en marcha. Desmontad también.-
Obedecieron enseguida y se acercaron a él, ahora C tenía que ir delante para alumbrar.
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Espero que os hayan gustado los capítulos de hoy ^^
Quiería avisaros de que como he llegado a las 1000 visitas voy a hacer un especial y será aún más especial por los personajes que saldrán... Ya veréis mañana a las 12.
·Capítulo 25: Los lobos ·
Después de una noche inquieta el grupo siguió el camino por la montaña, todos siguiendo a Andrew para no perderse.
La disposición de los caballos era la misma.
Lianndra aún seguía enfadada por lo ocurrido la noche anterior y creía que Dirian lo había notado, porque parecía nervioso de estar tan cerca de ella.
Nadie se atrevía a romper el silencio reinante en el camino. Hasta que un feroz aullido se escuchó en la lejanía y al momento más lo secundaron.
Victoria se asustó y se giró para abrazar
a Tyler. La chica temblaba de miedo.
Tyler se impresionó por la reacción de Victoria y tuvo que agarrarse a la silla para no caerse.
-Lobos...-Habló Andrew aterrado.
-Me han dicho que los de la montaña son tan grandes como un caballo.-Dijo Dirian con el ceño fruncido.
-Será mejor que nos larguemos antes de que nos alcancen...-Lianndra decidió hacer una tregua con todos.
Paz los miró.-Vamos niños, no es momento de dudar. Movámonos.-
Acto seguido dio unos toquecitos en la espalda de Andrew, para que este comenzara la marcha. Sin embargo no se movió, estaba ido...
Dirian decidió pasar a la acción.-¡Andrew, vuelve en ti! ¡Tenemos que irnos y pronto!-
-¡Nos atraparán!-Añadió Victoria.
Paz se acercó más a Andrew, se le subió en el hombro y le susurró algo al oído. En
cuanto Paz se retiró por fin reaccionó y mientras comenzaba a galopar gritó.-¡Deprisa, seguidme!-
Dirian golpeó los flancos de su caballo y lo siguió, por poco tira a Lianndra con su movimiento repentino.
A Tyler le costó más reaccionar, porque Victoria estaba medio abrazada a él y sonrojada, mirándole con una expresión confusa. Cuando consiguió que la chica se moviese siguió a los demás.
Aparentemente deberían estar lejos, pero gracias a las robustas patas de Bruma, consiguieron alcanzarlos en poco tiempo.
Fueron avanzando terreno hasta salir del bosque helado para pasar a cruzar una llanura cubierta de nieve.
Lianndra se giró y divisó a la manada de lobos parados en la linde del bosque, eran tantos que no podía contarlos a simple vista y desde aquella distancia.-¡Se han parado, son muchos!-
-¡Aunque no nos persigan debemos seguir!-Dijo Dirian.
Andrew se puso histérico.-¡¡Tenemos que huir, no lo soporto más!!- Aceleró la marcha y los dejó a todos atrás.
Después de pasar el prado y entrar de nuevo en el bosque, Lianndra notó que Dirian se tensaba.
-¡Andrew! ¡Ya podemos aminorar la marcha, los caballos no soportarán mucho más este ritmo..!-
-¡¡No podemos parar, nos alcanzarán!! ¡NO PUEDE SUCEDER!-Contestó al chico.
Entonces Paz se subió al hombro de Andrew y susurró algo en su oído. Fuera lo que fuese lo que le dijo, pareció hacerlo entrar en razón y fue reduciendo la velocidad. Los demás lo imitaron.
Todos miraban a Andrew cuando por fin, Tyler se decidió a preguntarle.-Tío... ¿Qué te pasa con los lobos..?-
Andrew dio un respingo y tras unos minutos de reflexión, le ofreció una respuesta.-No los menciones.-
Este fue el último comentario del grupo en un rato.
Andrew tenía una mirada tan oscura y penetrante que nadie se atrevió a volver a hablar.
###
Empezó a nevar sobre sus cabezas cuando Victoria decidió las palabras adecuadas para formular de nuevo la pregunta.-Disculpa que te moleste Andrew, peroo... Si de verdad tienes algún problema con algo... Puedes confiar en mí... ¿qué digo? en nosotros, para contárnoslo. Así a lo mejor podemos ayudarte...-
Andrew frenó su caballo en seco y lo hizo dar la vuelta para colocarse junto a la yegua
de Tyler.-Gracias por preocuparte, en serio.-Dijo secamente.-Pero de verdad que no me gusta hablar de ese tema.
Todos le miraban, Paz se le encaramó al hombro y volvió a susurrarle algo. Entonces el chico soltó un gran suspiro y dijo.-Está bien...os aclararé el asunto...-
La disposición de los caballos era la misma.
Lianndra aún seguía enfadada por lo ocurrido la noche anterior y creía que Dirian lo había notado, porque parecía nervioso de estar tan cerca de ella.
Nadie se atrevía a romper el silencio reinante en el camino. Hasta que un feroz aullido se escuchó en la lejanía y al momento más lo secundaron.
Victoria se asustó y se giró para abrazar
a Tyler. La chica temblaba de miedo.
Tyler se impresionó por la reacción de Victoria y tuvo que agarrarse a la silla para no caerse.
-Lobos...-Habló Andrew aterrado.
-Me han dicho que los de la montaña son tan grandes como un caballo.-Dijo Dirian con el ceño fruncido.
-Será mejor que nos larguemos antes de que nos alcancen...-Lianndra decidió hacer una tregua con todos.
Paz los miró.-Vamos niños, no es momento de dudar. Movámonos.-
Acto seguido dio unos toquecitos en la espalda de Andrew, para que este comenzara la marcha. Sin embargo no se movió, estaba ido...
Dirian decidió pasar a la acción.-¡Andrew, vuelve en ti! ¡Tenemos que irnos y pronto!-
-¡Nos atraparán!-Añadió Victoria.
Paz se acercó más a Andrew, se le subió en el hombro y le susurró algo al oído. En
cuanto Paz se retiró por fin reaccionó y mientras comenzaba a galopar gritó.-¡Deprisa, seguidme!-
Dirian golpeó los flancos de su caballo y lo siguió, por poco tira a Lianndra con su movimiento repentino.
A Tyler le costó más reaccionar, porque Victoria estaba medio abrazada a él y sonrojada, mirándole con una expresión confusa. Cuando consiguió que la chica se moviese siguió a los demás.
Aparentemente deberían estar lejos, pero gracias a las robustas patas de Bruma, consiguieron alcanzarlos en poco tiempo.
Fueron avanzando terreno hasta salir del bosque helado para pasar a cruzar una llanura cubierta de nieve.
Lianndra se giró y divisó a la manada de lobos parados en la linde del bosque, eran tantos que no podía contarlos a simple vista y desde aquella distancia.-¡Se han parado, son muchos!-
-¡Aunque no nos persigan debemos seguir!-Dijo Dirian.
Andrew se puso histérico.-¡¡Tenemos que huir, no lo soporto más!!- Aceleró la marcha y los dejó a todos atrás.
Después de pasar el prado y entrar de nuevo en el bosque, Lianndra notó que Dirian se tensaba.
-¡Andrew! ¡Ya podemos aminorar la marcha, los caballos no soportarán mucho más este ritmo..!-
-¡¡No podemos parar, nos alcanzarán!! ¡NO PUEDE SUCEDER!-Contestó al chico.
Entonces Paz se subió al hombro de Andrew y susurró algo en su oído. Fuera lo que fuese lo que le dijo, pareció hacerlo entrar en razón y fue reduciendo la velocidad. Los demás lo imitaron.
Todos miraban a Andrew cuando por fin, Tyler se decidió a preguntarle.-Tío... ¿Qué te pasa con los lobos..?-
Andrew dio un respingo y tras unos minutos de reflexión, le ofreció una respuesta.-No los menciones.-
Este fue el último comentario del grupo en un rato.
Andrew tenía una mirada tan oscura y penetrante que nadie se atrevió a volver a hablar.
###
Empezó a nevar sobre sus cabezas cuando Victoria decidió las palabras adecuadas para formular de nuevo la pregunta.-Disculpa que te moleste Andrew, peroo... Si de verdad tienes algún problema con algo... Puedes confiar en mí... ¿qué digo? en nosotros, para contárnoslo. Así a lo mejor podemos ayudarte...-
Andrew frenó su caballo en seco y lo hizo dar la vuelta para colocarse junto a la yegua
de Tyler.-Gracias por preocuparte, en serio.-Dijo secamente.-Pero de verdad que no me gusta hablar de ese tema.
Todos le miraban, Paz se le encaramó al hombro y volvió a susurrarle algo. Entonces el chico soltó un gran suspiro y dijo.-Está bien...os aclararé el asunto...-
domingo, 13 de septiembre de 2015
"Limpieza en el Nica's"
¡Hola! Solo quería avisaros de que a partir de esta semana empiezan las clases y voy a cambiar el horario. A partir de ahora publicaré los fines de semana, dos capítulos de la historia normal el sábado a las 12 de la mañana y el Nica's se mantiene en su día y hora.
Además voy a inaugurar hoy una nueva sección, en la barra derecha del blog añadiré las imágenes de los especiales, para que podáis disfrutar de ellas siempre que queráis.
También el portal está a punto de recibir las 1000 visitas y cuando llegue a ellas haré un especial. Eso es todo por ahora. ¡Gracias! ¡Mucha suerte a todos en el curso que entra, demos nuestro mejor esfuerzo!
Bueno, os dejo disfrutar del capítulo ^^
________________________________________________________________________
Por fin había dejado de llover y habían conseguido sacar la mayoría del agua, pero el interior del Nica's estaba completamente lleno de barro. Había una marca a metro y medio de la pared que demostraba hasta dónde había llegado el agua...
Bajaron todas las mesas y sillas de la planta superior, además de todo lo que pudiese estorbar. Yimei cogió su fregona y procedió a fregar la sala de arriba. No, ese día no iban a abrir tampoco... Antes de fregar sería mejor limpiar la pared, aunque allí arriba no estaba muy sucia. Definitivamente, tendrían que pintar la pared de nuevo...
Le dio dinero a Keyla y la mandó a comprar pintura, ella se quedó con Eiri en la tienda, siguió con su trabajo de limpiar el piso superior. Terminó con la pared y se puso a fregar el suelo.
-Pobrecillas... Tenéis mucho trabajo... ¡Bien..! ¡Os voy a ayudar!-
Yimei se giró al oir esa declaración y se sorprendió cuando vio quién era...
Su jefa, Mónica se estaba poniendo unos guantes, un delantal y se recogió el pelo.-Venga, no te pares ahora que ibas muy bien.- Sonrió.
-¡Vale! ¡Muchas gracias, jefa!-
-Nadaa, llámame Mónica, por favor.- Cogió una fregona y ayudó a Yimei.
Pasado un rato, habían conseguido fregarlo todo y dejarlo limpio entre las dos. Incluso las ventanas, que también se habían ensuciado.
De repente, unos pasos se escucharon por la escalera, la campanita también se había llenado de barro y no sonaba al abrirse y cerrarse la puerta, por lo que no las había podido avisar de la llegada de alguien. Yimei supuso que sería Keyla con la pintura, había llegado antes de lo que esperaba, pero bueno, así tardarían menos.
Pero el que apareció no era precisamente Keyla.
-¿Hola..? ¿Yimei..? ¿Por qué la planta de abajo está tan sucia?-
-¡¿Dirian!? ¡No te esperaba! Puees... Que llueva durante varios días seguidos provoca esto al Nica's... Eso me recuerda que tengo que arreglar las goteras o la próxima vez que ocurra, volverá a pasar...-
-Aaahh... Pues es un desastre, ¡Suerte!- Se quedó mirando un rato a Mónica, luego miró a Yimei y así sucesivamente.-¿Es familia tuya... Una hermanita o algo así? ¡Encantado de conocerte, soy Dirian Riyeor, príncipe de Glishes.-
-Lo sé, lo sé... Yo soy Mónica, la jefa de Yimei.-Hizo una reverencia a Dirian por educación.- Aunque en realidad no eres ningún príncipe, pero gracias a ti, Glishes ha ido bien durante 15 años. ¡Gracias!-
-¿Cómo sabes que no soy el verdadero príncipe..? Si se corre la voz estaré acabado...-
Mónica se acercó, era más bajita que él. Le tocó el hombro.-Tranquilo, no debes preocuparte por nada, todo ocurrirá cuando tenga que ocurrir.-
Él pareció sorprenderse y exclamó con admiración.-Eres... Diferente...-
Entonces ella se separó bruscamente.-Yimei, a las goteras, yo voy a limpiar las mesas y sillas, Dirian, cuando haya terminado de limpiar alguna, la subes. Bien, este es el plan, ¡adelante!-
Lo dijo a tal velocidad que Yimei se quedó a cuadros.-¡A la orden!- Salió a paso rápido a por el material necesario.
-U-un momento... ¿Yo debo ayudaros..? Nunca he...-
Mónica lo cortó a media frase.-Sí, te he pedido ayuda... Lo sé, no estás acostumbrado a hacer estas cosas.-
-Parece que sabes mucho.-
-Yo lo sé todo. Sé que vas a aceptar a regañadientes y que vas a tropezar con una fregona olvidada y a caerte.-
Pasó como predijo y tropezó con una fregona, pero lo sujetó para que no se cayese. Después de mirarla con asombro, aceptó a regañadientes y volvió a sorprenderse.
-¿Lo ves?-
-Sabía que eras diferente...-
Comenzaron con sus trabajos. Cuando llevaban casi la mitad de mesas y sillas limpias, llegó Keyla cargada de pintura, la soltó a un lado y subió a organizar la sala.
Yimei acabó con las goteras y se puso a ayudar a limpiar los muebles. Acabaron con aquello más rápido de lo esperado y decidieron ponerse a pintar la pared de arriba, pero Dirian parecía cansado, en realidad todos lo parecían.
-Voy a preparar zumos fresquitos, bajad a la barra.- Dijo Yimei con una sonrisa.
-¡Genial!- Contestó Dirian y bajó apresuradamente la escalera.
Las demás lo imitaron y en poco tiempo Yimei tenía preparados los zumos.
Dirian se quedó mirando su vaso, sin beber ni nada.
-¿En qué piensas?- Preguntó Yimei.
Dirian se sorprendió, no esperaba que nadie le hablase.-Pregunta a Mónica, ella lo sabe todo.-
La chica mencionada frunció el ceño.
-Pero yo quiero oírlo de tus labios... No de los de ella, además, quién va a saber mejor en lo que piensas... ¿Tú o ella? Aunque lo sepa todo.-
En ese momento apareció Eiri maullando y se tumbó encima de Dirian.
-Eh...-Soltó el zumo en la barra y puso las manos sobre él.-La verdad... Es que este zumo me ha recordado al día que pasamos en la playa, me gustaría repetirlo algún día... A pesar de esos atuendos tan...-
Yimei le señaló el tablón que había detrás suya. Dirian vio la foto de las chicas en bikini y se sonrojó.
-Todas sabemos que te habría gustado un zumo compartido con...-
-¡P-para! ¡No quería ningún zumo compartido!-
-Venga, ni siquiera lo sabemos todo como Mónica, si es que se te nota en la cara. Tú tranquilo, la próxima vez me acordaré de hacer un zumo compartido.-Yimei se rió.
-¡N-no! ¡Nadie puede tomar de mi mismo zumo, soy el príncipe por algo..!-
-¿Ni siquiera tu princesa?- Intervino Keyla.
-¡Ni siquiera mi princesa..!- Dirian estaba más colorado y nervioso que antes, se bebió el zumo del vaso de un trago.-Además, aún no tengo ninguna princesa.-
-¿Estás seguro? A veces tu princesa está delante tuya todo el tiempo y no te das cuenta.-
-¡Basta... No... P-permitiré semejante... ultraje...- Y así desapareció Dirian.
Mónica estaba contenta y animada.-¡Bien, a trabajar, chicas! ¡El Nica's no se limpiará solo!-
Al terminar sus zumos siguieron trabajando, si seguían a ese ritmo podrían abrir al día siguiente.
Además voy a inaugurar hoy una nueva sección, en la barra derecha del blog añadiré las imágenes de los especiales, para que podáis disfrutar de ellas siempre que queráis.
También el portal está a punto de recibir las 1000 visitas y cuando llegue a ellas haré un especial. Eso es todo por ahora. ¡Gracias! ¡Mucha suerte a todos en el curso que entra, demos nuestro mejor esfuerzo!
Bueno, os dejo disfrutar del capítulo ^^
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Por fin había dejado de llover y habían conseguido sacar la mayoría del agua, pero el interior del Nica's estaba completamente lleno de barro. Había una marca a metro y medio de la pared que demostraba hasta dónde había llegado el agua...
Bajaron todas las mesas y sillas de la planta superior, además de todo lo que pudiese estorbar. Yimei cogió su fregona y procedió a fregar la sala de arriba. No, ese día no iban a abrir tampoco... Antes de fregar sería mejor limpiar la pared, aunque allí arriba no estaba muy sucia. Definitivamente, tendrían que pintar la pared de nuevo...
Le dio dinero a Keyla y la mandó a comprar pintura, ella se quedó con Eiri en la tienda, siguió con su trabajo de limpiar el piso superior. Terminó con la pared y se puso a fregar el suelo.
-Pobrecillas... Tenéis mucho trabajo... ¡Bien..! ¡Os voy a ayudar!-
Yimei se giró al oir esa declaración y se sorprendió cuando vio quién era...
Su jefa, Mónica se estaba poniendo unos guantes, un delantal y se recogió el pelo.-Venga, no te pares ahora que ibas muy bien.- Sonrió.
-¡Vale! ¡Muchas gracias, jefa!-
-Nadaa, llámame Mónica, por favor.- Cogió una fregona y ayudó a Yimei.
Pasado un rato, habían conseguido fregarlo todo y dejarlo limpio entre las dos. Incluso las ventanas, que también se habían ensuciado.
De repente, unos pasos se escucharon por la escalera, la campanita también se había llenado de barro y no sonaba al abrirse y cerrarse la puerta, por lo que no las había podido avisar de la llegada de alguien. Yimei supuso que sería Keyla con la pintura, había llegado antes de lo que esperaba, pero bueno, así tardarían menos.
Pero el que apareció no era precisamente Keyla.
-¿Hola..? ¿Yimei..? ¿Por qué la planta de abajo está tan sucia?-
-¡¿Dirian!? ¡No te esperaba! Puees... Que llueva durante varios días seguidos provoca esto al Nica's... Eso me recuerda que tengo que arreglar las goteras o la próxima vez que ocurra, volverá a pasar...-
-Aaahh... Pues es un desastre, ¡Suerte!- Se quedó mirando un rato a Mónica, luego miró a Yimei y así sucesivamente.-¿Es familia tuya... Una hermanita o algo así? ¡Encantado de conocerte, soy Dirian Riyeor, príncipe de Glishes.-
-Lo sé, lo sé... Yo soy Mónica, la jefa de Yimei.-Hizo una reverencia a Dirian por educación.- Aunque en realidad no eres ningún príncipe, pero gracias a ti, Glishes ha ido bien durante 15 años. ¡Gracias!-
-¿Cómo sabes que no soy el verdadero príncipe..? Si se corre la voz estaré acabado...-
Mónica se acercó, era más bajita que él. Le tocó el hombro.-Tranquilo, no debes preocuparte por nada, todo ocurrirá cuando tenga que ocurrir.-
Él pareció sorprenderse y exclamó con admiración.-Eres... Diferente...-
Entonces ella se separó bruscamente.-Yimei, a las goteras, yo voy a limpiar las mesas y sillas, Dirian, cuando haya terminado de limpiar alguna, la subes. Bien, este es el plan, ¡adelante!-
Lo dijo a tal velocidad que Yimei se quedó a cuadros.-¡A la orden!- Salió a paso rápido a por el material necesario.
-U-un momento... ¿Yo debo ayudaros..? Nunca he...-
Mónica lo cortó a media frase.-Sí, te he pedido ayuda... Lo sé, no estás acostumbrado a hacer estas cosas.-
-Parece que sabes mucho.-
-Yo lo sé todo. Sé que vas a aceptar a regañadientes y que vas a tropezar con una fregona olvidada y a caerte.-
Pasó como predijo y tropezó con una fregona, pero lo sujetó para que no se cayese. Después de mirarla con asombro, aceptó a regañadientes y volvió a sorprenderse.
-¿Lo ves?-
-Sabía que eras diferente...-
Comenzaron con sus trabajos. Cuando llevaban casi la mitad de mesas y sillas limpias, llegó Keyla cargada de pintura, la soltó a un lado y subió a organizar la sala.
Yimei acabó con las goteras y se puso a ayudar a limpiar los muebles. Acabaron con aquello más rápido de lo esperado y decidieron ponerse a pintar la pared de arriba, pero Dirian parecía cansado, en realidad todos lo parecían.
-Voy a preparar zumos fresquitos, bajad a la barra.- Dijo Yimei con una sonrisa.
-¡Genial!- Contestó Dirian y bajó apresuradamente la escalera.
Las demás lo imitaron y en poco tiempo Yimei tenía preparados los zumos.
Dirian se quedó mirando su vaso, sin beber ni nada.
-¿En qué piensas?- Preguntó Yimei.
Dirian se sorprendió, no esperaba que nadie le hablase.-Pregunta a Mónica, ella lo sabe todo.-
La chica mencionada frunció el ceño.
-Pero yo quiero oírlo de tus labios... No de los de ella, además, quién va a saber mejor en lo que piensas... ¿Tú o ella? Aunque lo sepa todo.-
En ese momento apareció Eiri maullando y se tumbó encima de Dirian.
-Eh...-Soltó el zumo en la barra y puso las manos sobre él.-La verdad... Es que este zumo me ha recordado al día que pasamos en la playa, me gustaría repetirlo algún día... A pesar de esos atuendos tan...-
Yimei le señaló el tablón que había detrás suya. Dirian vio la foto de las chicas en bikini y se sonrojó.
-Todas sabemos que te habría gustado un zumo compartido con...-
-¡P-para! ¡No quería ningún zumo compartido!-
-Venga, ni siquiera lo sabemos todo como Mónica, si es que se te nota en la cara. Tú tranquilo, la próxima vez me acordaré de hacer un zumo compartido.-Yimei se rió.
-¡N-no! ¡Nadie puede tomar de mi mismo zumo, soy el príncipe por algo..!-
-¿Ni siquiera tu princesa?- Intervino Keyla.
-¡Ni siquiera mi princesa..!- Dirian estaba más colorado y nervioso que antes, se bebió el zumo del vaso de un trago.-Además, aún no tengo ninguna princesa.-
-¿Estás seguro? A veces tu princesa está delante tuya todo el tiempo y no te das cuenta.-
-¡Basta... No... P-permitiré semejante... ultraje...- Y así desapareció Dirian.
Mónica estaba contenta y animada.-¡Bien, a trabajar, chicas! ¡El Nica's no se limpiará solo!-
Al terminar sus zumos siguieron trabajando, si seguían a ese ritmo podrían abrir al día siguiente.
jueves, 10 de septiembre de 2015
·Capítulo 24: Cae.
Se acercaba la media mañana y apunto estaban de irse de casa de Andrew, solo faltaba que las chicas se montasen cada una en un caballo. Como eran muchos y solo había 3 caballos, tocaba compartir.
-Victoria, ven a montarte en Bruma.-Dijo Tyler con una sonrisa.-Rápido, antes de que venga la enana.-
A Victoria se le escapó una risita nerviosa, entonces Lianndra los miró ceñuda y añadió.-¿Y quién te ha dicho que iba a sentarme en el mismo caballo que tú?-También pensó que si no hubiese dicho nada a lo mejor se habría sentado con él...
Dirian interrumpió los pensamientos de Lianndra para ofrecerle un sitio en su caballo, se llamaba Eclipse, todo un caballo para un príncipe.
A pesar de todo la yegua de Tyler era mucho más alta que el animal del otro chico y tenía un color grisáceo.
-¿Cuánto más va a tardar Andrew?-Exclamó Dirian mientras ayudaba a Lianndra a subir a su ancha silla de montar.
La silla de la yegua de Tyler también era ancha, lo que permitía a Victoria colocarse delante de este.
-No seas impaciente.-Se escuchó la voz de Andrew desde dentro del establo.-Ya estoy listo.- Acto seguido salió montado en su gran yegua blanca como la nieve e imponente como una montaña, llamada Ventisca por su violencia y ferocidad, con él iban los tres “animalitos”.
-Muy bien, partamos pues.-Habló C.-Andrew ellos te seguirán, así que adelante.-
Comenzaron la marcha, que, calculó Paz, duraría todo el día...
###
Una hoguera improvisada en un claro de un bosque nevado proporcionaba calor y seguridad ante el amparo de la noche al grupo.
Fuera de ese campamento improvisado se encontraban Lianndra y Andrew.
-¿Oye, estás seguro de que por aquí hay algún animal?-Preguntó Lianndra al chico.
Andrew se giró y levantó un perrinejo* que llevaba colgado del cinturón.-Tenemos uno, habrá más, además, con suerte este nos bastará.-
Ella no se quedó muy satisfecha con la respuesta.
Repentinamente un crujir de ramas se escuchó de entre unos arbustos. De ellos salió un perrinejo* blanco que se quedó mirando a Lianndra, acto seguido pasó por su lado como retándola a seguirle.
Sin tardar un segundo la chica pelirroja se lanzó a por él, ignorando las advertencias de Andrew de que lo esperase.
-¡Maldito bicho! ¡Cuándo te pille ver... Aaaaahh!-Un grito desgarrador salió de la garganta de Lianndra.-
-¡Lianndraaaaa!-Gritó Andrew desesperadamente al no verla por ninguna parte.
###
-¿Q-qué ha sido eso? ¿L-Lianndra?-Habló Victoria con cara de terror.
Tyler se levantó bruscamente.-La enana...-Y lanzó una maldición por lo bajo.
-Calma muchachos, seguro que no es nada.-Dijo Paz aparentemente tranquila.
C siguió a su vez.-Es verdad todavía noto a Lianndra...-
Dirian la miró extrañado.-¿Cómo que la notas..?-
Victoria también se había quedado extrañada, sabía que su cerdita tenía poderes, pero no hasta qué punto...
-Nada, nada...-Siguió hablando Kazen.-Luego tenemos que hablar, "C".
-Está bien, pero no sé de qué quieres hablar.-Le contestó C.
Victoria iba a protestar pero Dirian que parecía furioso se le adelantó.-Puede que unos amigos nuestros estén en peligro y vosotros encima nos ocultáis cosas.-
A Tyler pareció impresionarle la reacción de su amigo.-Vamos a ir a buscarlos, no podemos dejarlos así.-
-Tienen razón, además estoy preocupada por ellos...-Añadió Victoria.
Después de unos minutos de completo silencio y miradas incómodas Victoria se levantó.
-¿No pensáis hacer nada? ¿esto es todo lo que os preocupáis?-
-Relájate, ya te he dicho que está bien.-Habló C.
Un ruido sonó a lo lejos, provocando que Dirian sacase su hacha y Tyler preparase sus manos. El ruido cada vez más cercano acabó con unos arbustos agitándose y una enfadada Lianndra seguida de un atónito Andrew.
Victoria se abalanzó sobre su amiga y le dio un fuerte abrazo, entonces esta última cambió de expresión esbozando una sonrisa.
Andrew las vio y dijo.-Es increíble que hayas gritado por eso, ni que fueras una niña pequeña...-
Entonces la pelirroja se separó de Victoria miró con un destello de ira en los ojos a Andrew.-¡Tú también te habrías asustado por eso..!-
El chico negó con la cabeza haciendo que Lianndra se pusiese roja.
Tyler se revolvió nervioso.-Entonces... ¿qué ha pasado..?-
Andrew lo miró, resopló y le contestó.-Iba persiguiendo a un perrinejo cuando de repente, sí reconozco que me asusté, pero fue por el grito que soltó.-Suspiró.-Al principio no la veía por ningún lado, después vi que había un pequeño agujero, miré y ahí estaba ella. Había caído en una madriguera de perrinejo*.-
Las caras que pusieron a continuación los demás resultan indescriptibles.
Sin que ninguno lo esperase Tyler estalló en carcajadas.-¡No lo puedo creer!-Más risas.-¿En serio TÚ que eres tan buena en todo lo que haces, te caíste en una madriguera de perrinejo*?-
Dirian soltó una risita aguda al ver la cara de furia de Lianndra. Y Victoria para intentar suavizar la situación añadió.-B-bueno, eso le podría ocurrir a cualquiera...-
-Creo que deberíais dejarlo estar.-Dijo Kazen.
Paz se movió incómoda.-Sí, venga niños, a relajarse.-
C parecía no encontrarse bien cuando
dijo.-Deberíais dejarla tranquila un momento... Porque si seguís así puede que explote...-
-Es tarde para decir nada.-Lianndra soltó una risita siniestra.
-¿L-L-Lianndra...?-Preguntó Victoria.
Dirian se levantó con intención de irse.-Algo me dice que vamos a descubrir el lado oscuro de Lianndra...-
Tyler seguía riéndose sin darse cuenta de que la chica lo había elegido como primera víctima.
Los demás se alejaban disimuladamente, cuando Lianndra empezó a gritarle exageradamente a Tyler, incluso le pegó...
-Victoria, ven a montarte en Bruma.-Dijo Tyler con una sonrisa.-Rápido, antes de que venga la enana.-
A Victoria se le escapó una risita nerviosa, entonces Lianndra los miró ceñuda y añadió.-¿Y quién te ha dicho que iba a sentarme en el mismo caballo que tú?-También pensó que si no hubiese dicho nada a lo mejor se habría sentado con él...
Dirian interrumpió los pensamientos de Lianndra para ofrecerle un sitio en su caballo, se llamaba Eclipse, todo un caballo para un príncipe.
A pesar de todo la yegua de Tyler era mucho más alta que el animal del otro chico y tenía un color grisáceo.
-¿Cuánto más va a tardar Andrew?-Exclamó Dirian mientras ayudaba a Lianndra a subir a su ancha silla de montar.
La silla de la yegua de Tyler también era ancha, lo que permitía a Victoria colocarse delante de este.
-No seas impaciente.-Se escuchó la voz de Andrew desde dentro del establo.-Ya estoy listo.- Acto seguido salió montado en su gran yegua blanca como la nieve e imponente como una montaña, llamada Ventisca por su violencia y ferocidad, con él iban los tres “animalitos”.
-Muy bien, partamos pues.-Habló C.-Andrew ellos te seguirán, así que adelante.-
Comenzaron la marcha, que, calculó Paz, duraría todo el día...
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Una hoguera improvisada en un claro de un bosque nevado proporcionaba calor y seguridad ante el amparo de la noche al grupo.
Fuera de ese campamento improvisado se encontraban Lianndra y Andrew.
-¿Oye, estás seguro de que por aquí hay algún animal?-Preguntó Lianndra al chico.
Andrew se giró y levantó un perrinejo* que llevaba colgado del cinturón.-Tenemos uno, habrá más, además, con suerte este nos bastará.-
Ella no se quedó muy satisfecha con la respuesta.
Repentinamente un crujir de ramas se escuchó de entre unos arbustos. De ellos salió un perrinejo* blanco que se quedó mirando a Lianndra, acto seguido pasó por su lado como retándola a seguirle.
Sin tardar un segundo la chica pelirroja se lanzó a por él, ignorando las advertencias de Andrew de que lo esperase.
-¡Maldito bicho! ¡Cuándo te pille ver... Aaaaahh!-Un grito desgarrador salió de la garganta de Lianndra.-
-¡Lianndraaaaa!-Gritó Andrew desesperadamente al no verla por ninguna parte.
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-¿Q-qué ha sido eso? ¿L-Lianndra?-Habló Victoria con cara de terror.
Tyler se levantó bruscamente.-La enana...-Y lanzó una maldición por lo bajo.
-Calma muchachos, seguro que no es nada.-Dijo Paz aparentemente tranquila.
C siguió a su vez.-Es verdad todavía noto a Lianndra...-
Dirian la miró extrañado.-¿Cómo que la notas..?-
Victoria también se había quedado extrañada, sabía que su cerdita tenía poderes, pero no hasta qué punto...
-Nada, nada...-Siguió hablando Kazen.-Luego tenemos que hablar, "C".
-Está bien, pero no sé de qué quieres hablar.-Le contestó C.
Victoria iba a protestar pero Dirian que parecía furioso se le adelantó.-Puede que unos amigos nuestros estén en peligro y vosotros encima nos ocultáis cosas.-
A Tyler pareció impresionarle la reacción de su amigo.-Vamos a ir a buscarlos, no podemos dejarlos así.-
-Tienen razón, además estoy preocupada por ellos...-Añadió Victoria.
Después de unos minutos de completo silencio y miradas incómodas Victoria se levantó.
-¿No pensáis hacer nada? ¿esto es todo lo que os preocupáis?-
-Relájate, ya te he dicho que está bien.-Habló C.
Un ruido sonó a lo lejos, provocando que Dirian sacase su hacha y Tyler preparase sus manos. El ruido cada vez más cercano acabó con unos arbustos agitándose y una enfadada Lianndra seguida de un atónito Andrew.
Victoria se abalanzó sobre su amiga y le dio un fuerte abrazo, entonces esta última cambió de expresión esbozando una sonrisa.
Andrew las vio y dijo.-Es increíble que hayas gritado por eso, ni que fueras una niña pequeña...-
Entonces la pelirroja se separó de Victoria miró con un destello de ira en los ojos a Andrew.-¡Tú también te habrías asustado por eso..!-
El chico negó con la cabeza haciendo que Lianndra se pusiese roja.
Tyler se revolvió nervioso.-Entonces... ¿qué ha pasado..?-
Andrew lo miró, resopló y le contestó.-Iba persiguiendo a un perrinejo cuando de repente, sí reconozco que me asusté, pero fue por el grito que soltó.-Suspiró.-Al principio no la veía por ningún lado, después vi que había un pequeño agujero, miré y ahí estaba ella. Había caído en una madriguera de perrinejo*.-
Las caras que pusieron a continuación los demás resultan indescriptibles.
Sin que ninguno lo esperase Tyler estalló en carcajadas.-¡No lo puedo creer!-Más risas.-¿En serio TÚ que eres tan buena en todo lo que haces, te caíste en una madriguera de perrinejo*?-
Dirian soltó una risita aguda al ver la cara de furia de Lianndra. Y Victoria para intentar suavizar la situación añadió.-B-bueno, eso le podría ocurrir a cualquiera...-
-Creo que deberíais dejarlo estar.-Dijo Kazen.
Paz se movió incómoda.-Sí, venga niños, a relajarse.-
C parecía no encontrarse bien cuando
dijo.-Deberíais dejarla tranquila un momento... Porque si seguís así puede que explote...-
-Es tarde para decir nada.-Lianndra soltó una risita siniestra.
-¿L-L-Lianndra...?-Preguntó Victoria.
Dirian se levantó con intención de irse.-Algo me dice que vamos a descubrir el lado oscuro de Lianndra...-
Tyler seguía riéndose sin darse cuenta de que la chica lo había elegido como primera víctima.
Los demás se alejaban disimuladamente, cuando Lianndra empezó a gritarle exageradamente a Tyler, incluso le pegó...
martes, 8 de septiembre de 2015
·Capítulo 23: Vestigios de oscuridad ·
Era un lugar sombrío, con paredes de piedra grisácea, una alfombra roja cubría la parte central de un largo corredor.
Al final de este había una gruesa puerta de madera, con los bordes enmohecidos por la humedad, en la sala contigua se encontraba una mujer de cabello blanco, lengua bífida y cola de serpiente. Parecía preocupada.
Entre las sombras del fondo de la sala se distinguía un trono y alguien sentado en él, era un hombre, pero parecía deteriorado por alguna pelea, ya que, le faltaban una mano y un ojo.
Una cadena gruesa se enrollaba alrededor de su pierna y subía hasta su pecho.
En el lugar donde debía estar aquella mano izquierda había una hoja cortante hecha de un metal negro, su único ojo era de color rojo como la sangre.
Su pelo era oscuro y sus ropajes también.
Un aura extraña lo rodeaba y su mirada denotaba cansancio.
De improviso exclamó.-Silvei... me has vuelto a fallar, esta vez era sencillo. Ese chico no tenía ningún guardián, iba solo con el otro, el ladrón. Además me parece recordar que solo quería que capturases a esa paloma, para preguntarle sobre el paradero de la verdadera Heredera del Poder*.-Suspiró y habló en un tono más bajo.-Poder saber que han despertado sus poderes y no saber su paradero exacto...-
-Señor, discúlpeme hice lo que pude, pero no estaban solos, también tenían el apoyo de tres de ellas y...-
-¡Tres! ¡Tres de cuatro! Se supone que a ese niño solo le acompañaba una, cuéntame lo que sepas.-
-A eso iba señor...-Silvei tragó saliva.
-Por lo visto otro mocoso iba con una de ellas y-y había dos chicas más, una pelirroja y otra que... Estoy segura de que... Era la verdadera Heredera del Poder*, iban con la tercera. P-pero señor hay algo más, nadie ha instruido a la Heredera del Poder*, no sabe nada de sus poderes...-
Parecía que el hombre iba a explotar de un momento a otro.-...¿¡La maldita Heredera del Poder* en tus narices y no has podido capturarla!? ¡Debería desollarte por esto! Por lo menos me has traído más información... Bueno, todavía me serás útil, necesito que encuentres a mi hijo y a la novata y los traigas aquí. Confío en que no falles en esto.-
-Muy bien, mi señor, muchísimas gracias por todo, mi señor... Encontraré a su hijo.-Silvei parecía querer salir corriendo, o arrastrándose, pero logró controlarse y tras hacer una gran reverencia se fue.
La estancia se quedó en silencio hasta la salida de la mujer serpiente.
En ese momento otro hombre salió de la oscuridad.
Su pelo azul oscuro era liso y le llegaba por los hombros, llevaba una chaqueta larga cubriendo un jersey oscuro y unos pantalones del mismo color. llevaba un bastón de madera con una calavera tallada.
Realizó una profunda reverencia.-Mi señor...-
-Oh, Lord Xelsen, ¿Lo has escuchado? Ya tienes una tarea, ir a capturar a la Heredera del Poder*. Tenemos que atraparla mientras esté débil y que no sepa usar su poder.
Silvei fue a lo alto de Rearen y allí estaba la chica.-
-Sí.-Xelsen paró pensativo.-Entonces iré allí a seguir su rastro, volveré pronto y yo no fallaré.-Se dio la vuelta para salir de la sala, pero paró a medio camino.-Una última cosa, señor, necesitaré algunas bestias.-
-Sin problemas Xelsen.-Una sonrisa pícara se dibujó en la cara del hombre siniestro.
-Hay que atraparla antes de que llegue a Firyuk* o será demasiado tarde...-
Al final de este había una gruesa puerta de madera, con los bordes enmohecidos por la humedad, en la sala contigua se encontraba una mujer de cabello blanco, lengua bífida y cola de serpiente. Parecía preocupada.
Entre las sombras del fondo de la sala se distinguía un trono y alguien sentado en él, era un hombre, pero parecía deteriorado por alguna pelea, ya que, le faltaban una mano y un ojo.
Una cadena gruesa se enrollaba alrededor de su pierna y subía hasta su pecho.
En el lugar donde debía estar aquella mano izquierda había una hoja cortante hecha de un metal negro, su único ojo era de color rojo como la sangre.
Su pelo era oscuro y sus ropajes también.
Un aura extraña lo rodeaba y su mirada denotaba cansancio.
De improviso exclamó.-Silvei... me has vuelto a fallar, esta vez era sencillo. Ese chico no tenía ningún guardián, iba solo con el otro, el ladrón. Además me parece recordar que solo quería que capturases a esa paloma, para preguntarle sobre el paradero de la verdadera Heredera del Poder*.-Suspiró y habló en un tono más bajo.-Poder saber que han despertado sus poderes y no saber su paradero exacto...-
-Señor, discúlpeme hice lo que pude, pero no estaban solos, también tenían el apoyo de tres de ellas y...-
-¡Tres! ¡Tres de cuatro! Se supone que a ese niño solo le acompañaba una, cuéntame lo que sepas.-
-A eso iba señor...-Silvei tragó saliva.
-Por lo visto otro mocoso iba con una de ellas y-y había dos chicas más, una pelirroja y otra que... Estoy segura de que... Era la verdadera Heredera del Poder*, iban con la tercera. P-pero señor hay algo más, nadie ha instruido a la Heredera del Poder*, no sabe nada de sus poderes...-
Parecía que el hombre iba a explotar de un momento a otro.-...¿¡La maldita Heredera del Poder* en tus narices y no has podido capturarla!? ¡Debería desollarte por esto! Por lo menos me has traído más información... Bueno, todavía me serás útil, necesito que encuentres a mi hijo y a la novata y los traigas aquí. Confío en que no falles en esto.-
-Muy bien, mi señor, muchísimas gracias por todo, mi señor... Encontraré a su hijo.-Silvei parecía querer salir corriendo, o arrastrándose, pero logró controlarse y tras hacer una gran reverencia se fue.
La estancia se quedó en silencio hasta la salida de la mujer serpiente.
En ese momento otro hombre salió de la oscuridad.
Su pelo azul oscuro era liso y le llegaba por los hombros, llevaba una chaqueta larga cubriendo un jersey oscuro y unos pantalones del mismo color. llevaba un bastón de madera con una calavera tallada.
Realizó una profunda reverencia.-Mi señor...-
-Oh, Lord Xelsen, ¿Lo has escuchado? Ya tienes una tarea, ir a capturar a la Heredera del Poder*. Tenemos que atraparla mientras esté débil y que no sepa usar su poder.
Silvei fue a lo alto de Rearen y allí estaba la chica.-
-Sí.-Xelsen paró pensativo.-Entonces iré allí a seguir su rastro, volveré pronto y yo no fallaré.-Se dio la vuelta para salir de la sala, pero paró a medio camino.-Una última cosa, señor, necesitaré algunas bestias.-
-Sin problemas Xelsen.-Una sonrisa pícara se dibujó en la cara del hombre siniestro.
-Hay que atraparla antes de que llegue a Firyuk* o será demasiado tarde...-
domingo, 6 de septiembre de 2015
"Goteras en el Nica's"
¡Hola, queridos glishen@s! Por fin he arreglado varios problemas que me impedían usar plenamente las funciones de mi ordenador (Sí, no os lo había dicho... Bueno, ya lo sabéis ^^")
Por fin he podido hacer un avatar para cada personaje, esto es provisional, espero cambiarlos a dibujos míos en navidad... Eso si recibo el regalo que quiero. La página que he usado me limitaba mucho, pero más o menos son así. (Crucemos los dedos para que en navidad pueda arreglarlo.)
Actualizada la lista de personajes y el Glishcionario.
Bueno, no me enrollo más, os dejo disfrutar del capítulo de hoy. ¡Hasta la próxima!
__________________________________________________________________________________
Todo era un caos en la cafetería, llevaba cerrada dos días por la fuerte tormenta que caía. No había parado desde la otra vez que apareció Andrew mojado... Todo había empeorado desde ese día, la lluvia no paraba de caer y los truenos sonaban justo encima, a Keyla no le había quedado más remedio que acostumbrarse a ellos.
La parte de abajo de la cafetería estaba inundada por aquella lluvia, el techo había aguantado bien hasta hacía medio día. Pero el choque repetitivo del agua en las tejas, las había desgastado y ahora el agua se colaba al interior.
-¡Yimei! ¿Dónde pongo este cubo?-
-¡D-da igual dónde lo pongas! ¡Es el último y quedan demasiadas goteras! Además... Esto ya es una piscina... Da igual, cuando pare de llover lo arreglaremos todo.-Yimei suspiró.
Eiri flotaba sobre una cacerola y maullaba nervioso.
-Pero... ¿Tú crees que esto parará..? ¡Lleva así días!-
-Por eso, tiene que parar pronto...-Se acercó a Eiri, lo cogió y lo puso en una mesa. El agua le llegaba hasta los tobillos.
En ese momento sonó algo en la planta de arriba y un chico de pelo anaranjado bajó la escalera, que parecía una cascada, cerró el paraguas que llevaba y lo soltó en un paragüero que hacía de recoge goteras.
-¡Ya está aquí el rey de la diversión!-
-¿Dónde dices que está..?-Preguntó Keyla.
-Hablaba de mí...-
-Aahhh... Pues vale...-
Yimei intervino.-¿Cómo has entrado?-
El chico dudó unos instantes en qué contestar.-Por una ventana... Es que la puerta no podía abrirla, está atrancada por toda esta agua... ¡Malditas tormentas!-
-¿Tú hablas de tormentas?-Se río Yimei.
Keyla lo miró con el ceño fruncido.-¿No piensas presentarte?-
Ahora era él el que la miraba con el ceño fruncido.-Si nos vimos la semana pasada,en la playa...-
-Y-yo no recuerdo tal cosa...-Se hizo la tonta Keyla.
-Si tenéis una foto y todo ahí pegada en ese tablón...-Señaló un tablón de corcho que había detrás de la barra.-Encima esa foto la hice yo... Estáis: Lianndra, tú Yimei, Keyla y Victoria.-
[Foto de la playa]
-Este Tyler... Es más listo y observador de lo que pensaba, creía que era tonto...-Dijo Yimei sin disimular.
-¡Ey, que te estoy oyendo!-
Yimei se rió.-Que recuerdes eso nos pone las cosas más fáciles.-
-Sí... Recuerdo lo BIEN que os quedaban esos... ¿Bikinis se llamaban? Sí, os quedaban ¡PERFECTOS!- Tyler casi se puso a babear.
Keyla se sonrojó.- ¡M-maldito pervertido!-
En cambio Yimei optó por otra táctica.-Sí, muchas graciaas... Pero estoy segura de que quien más te gustaba con él puesto era Lianndra... ¡No parabas de perseguirla!-
Tyler se fue poniendo colorado poco a poco.-¡No es cierto! Ella... Ella no tiene...-
-Hala, hala... Pero si no hace falta que disimules, no me hagas mencionar "eso"...-
-¿¡"ESO"!? ¡E-es imposible que sepas "eso"!-
-Sé "eso" y si estás pensando en que me lo dijo Dirian, te equivocas, lo sé por mí misma... Y porque me lo dijo mi jefa.-
-¿¡Quién es tu jefa y cómo sabe "eso"!?-
-Misterios del portal...-
-¡Yimei, eso no tiene nada que ver ahora..!-Protestó Keyla.-Además... Yo quiero saber "eso".-
-¡NO! ¡Por favor, te ruego que no se lo digas a nadie!-
-Bueno, bueno, tranquilo, no pensaba...-Tyler cortó a Yimei a media frase.
-¡OS AYUDARÉ A LIMPIAR ESTE DESASTRE SI HACE FALTA!-
-¡Oh, eso es perfecto! Venga, sé que tienes una especie de poder que te permite generar electricidad... ¿Cres que podrás controlar tormentas..?-
-... Puedo lanzar rayos... No creo que pueda mover nubes...-
-Por intentarlo...-
Keyla interrumpió la conversación.-Bueno... Pues me quedo sin saber "eso", pero Yimei... Olvidas que aquí no se puede usar magia. La tormenta tendrá que desaparecer de forma natural y mientras a nosotras nos saldrán branquias para sobrevivir.-
-Es cierto... Mi memoria ya no es lo que era...-La expresión de Yimei cambió de preocupada a una sonrisa.-Ya que estás aquí, ¿Te gustaría desahogarte contándonos algo que te preocupe?-
Keyla puso los ojos en blanco observando el ambiente. Las goteras se habían multiplicado, la lluvia caía más fuerte, el agua ya le pasaba de los tobillos, Eiri volvía a flotar sin rumbo aparente y por la escalera bajaba una cascada con una potencia más fuerte.
-¡¿DE VERDAD!? ¿¡C-crees que es el momento para eso!?-
-Está bien, ¿Nos sentamos en la barra?- Contestó Tyler.
Keyla cayó sobre una mesa, abatida, viendo como los dos se iban tranquilamente a sentarse.-<<No tienen remedio...>> - Pensó.
Yimei se puso a limpiar un vaso como si nada.-Dime pues ¿En qué puedo ayudarte?-
-Verás... Yo inicié este viaje en parte para desubrir de dónde vienen mis poderes... ¿Sabrías contestarme tú esa duda? -
-Todas las respuestas llegan tarde o temprano.-Yimei comenzó los preparativos de una tila.
-¿Eh..? ¿Eso es que no sabes darme una respuesta?-
-Tranquilo, no son unos poderes malignos, eso debes recordarlo. Son poderes del bien, incluso salvan vidas, recuerda como salvaste a Lianndra.-
-Es cierto...-Dijo cabizbajo.-Esto... Prométeme que no contarás "eso" a nadie...-
-¡Por supuesto que no! No soy ninguna chismosa.-
-Cualquiera lo diría...-
-Te he escuchado, chico.-
-¿Qué has escuchado?-
-Déjalo... ¿Tienes algo más que contarme? Como por ejemplo... ¿De dónde sacaste el paraguas? y ¿cómo subiste hasta el segundo piso?-
-...-
-Vamos, vamos, si en realidad lo sé, pero quiero oírlo de tus labios.-
-El paraguas se lo robé a un señor... Y pude subir al segundo piso porque tengo práctica... Sabes mucho, así que sabrás que yo antes era todo un ladrón...-
-Sí, lo sabía... ¿Por qué vuelves a robar ahora que no te hace falta?-
-¡Para no perder la práctica! Nunca se sabe cuándo harán falta las habilidades de unas manos rápidas.-
-Si tú lo dices... Bueno, te he preparado esto, es una tila, invita la casa.-
-¿Estás segura de querer dar un regalo a un ladrón?-
-Sí, sé que antes solo lo hacías porque no te quedaba más remedio... Aunque podrías haber dejado, simplemente, que te metiesen en un orfanato.-
-¡JAMÁS! ¡No soy un simple huérfano! ¡No dejaré que me quiten mi libertad nunca! Además... Si alguien hubiese visto mi poder... Me habrían acusado de brujería y habría acabado realmente mal...- Al chico le entraron escalofríos.
-Lo siento... Tómate la tila, anda.-
Le hizo caso sin rechistar.-Uooh, es espectacular, como aquel zumo... Aquel que tuve que compartir de esa forma tan ridícula con Lianndra.-
Yimei soltó una carcajada al ver a Tyler sonrojado y a Keyla observando la escena con una sonrisa pícara.
-¡Nos vemos, chico! Y no se me olvida tu promesa de ayudarnos a limpiar.-Yimei le guiñó un ojo.
-¿Nos vemos..? ¿Acaso... m-me... vo..?- Tyler desapareció sin dejar rastro.
-¡Nos toca bucear! ¡El agua nos llega a las rodillas!-Dijo Keyla.
-Tranquila, todo pasará...-Yimei suspiró y volvió a rescatar a Eiri, este maulló feliz.
Por fin he podido hacer un avatar para cada personaje, esto es provisional, espero cambiarlos a dibujos míos en navidad... Eso si recibo el regalo que quiero. La página que he usado me limitaba mucho, pero más o menos son así. (Crucemos los dedos para que en navidad pueda arreglarlo.)
Actualizada la lista de personajes y el Glishcionario.
Bueno, no me enrollo más, os dejo disfrutar del capítulo de hoy. ¡Hasta la próxima!
__________________________________________________________________________________
Todo era un caos en la cafetería, llevaba cerrada dos días por la fuerte tormenta que caía. No había parado desde la otra vez que apareció Andrew mojado... Todo había empeorado desde ese día, la lluvia no paraba de caer y los truenos sonaban justo encima, a Keyla no le había quedado más remedio que acostumbrarse a ellos.
La parte de abajo de la cafetería estaba inundada por aquella lluvia, el techo había aguantado bien hasta hacía medio día. Pero el choque repetitivo del agua en las tejas, las había desgastado y ahora el agua se colaba al interior.
-¡Yimei! ¿Dónde pongo este cubo?-
-¡D-da igual dónde lo pongas! ¡Es el último y quedan demasiadas goteras! Además... Esto ya es una piscina... Da igual, cuando pare de llover lo arreglaremos todo.-Yimei suspiró.
Eiri flotaba sobre una cacerola y maullaba nervioso.
-Pero... ¿Tú crees que esto parará..? ¡Lleva así días!-
-Por eso, tiene que parar pronto...-Se acercó a Eiri, lo cogió y lo puso en una mesa. El agua le llegaba hasta los tobillos.
En ese momento sonó algo en la planta de arriba y un chico de pelo anaranjado bajó la escalera, que parecía una cascada, cerró el paraguas que llevaba y lo soltó en un paragüero que hacía de recoge goteras.
-¡Ya está aquí el rey de la diversión!-
-¿Dónde dices que está..?-Preguntó Keyla.
-Hablaba de mí...-
-Aahhh... Pues vale...-
Yimei intervino.-¿Cómo has entrado?-
El chico dudó unos instantes en qué contestar.-Por una ventana... Es que la puerta no podía abrirla, está atrancada por toda esta agua... ¡Malditas tormentas!-
-¿Tú hablas de tormentas?-Se río Yimei.
Keyla lo miró con el ceño fruncido.-¿No piensas presentarte?-
Ahora era él el que la miraba con el ceño fruncido.-Si nos vimos la semana pasada,en la playa...-
-Y-yo no recuerdo tal cosa...-Se hizo la tonta Keyla.
-Si tenéis una foto y todo ahí pegada en ese tablón...-Señaló un tablón de corcho que había detrás de la barra.-Encima esa foto la hice yo... Estáis: Lianndra, tú Yimei, Keyla y Victoria.-
[Foto de la playa]
-Este Tyler... Es más listo y observador de lo que pensaba, creía que era tonto...-Dijo Yimei sin disimular.
-¡Ey, que te estoy oyendo!-
Yimei se rió.-Que recuerdes eso nos pone las cosas más fáciles.-
-Sí... Recuerdo lo BIEN que os quedaban esos... ¿Bikinis se llamaban? Sí, os quedaban ¡PERFECTOS!- Tyler casi se puso a babear.
Keyla se sonrojó.- ¡M-maldito pervertido!-
En cambio Yimei optó por otra táctica.-Sí, muchas graciaas... Pero estoy segura de que quien más te gustaba con él puesto era Lianndra... ¡No parabas de perseguirla!-
Tyler se fue poniendo colorado poco a poco.-¡No es cierto! Ella... Ella no tiene...-
-Hala, hala... Pero si no hace falta que disimules, no me hagas mencionar "eso"...-
-¿¡"ESO"!? ¡E-es imposible que sepas "eso"!-
-Sé "eso" y si estás pensando en que me lo dijo Dirian, te equivocas, lo sé por mí misma... Y porque me lo dijo mi jefa.-
-¿¡Quién es tu jefa y cómo sabe "eso"!?-
-Misterios del portal...-
-¡Yimei, eso no tiene nada que ver ahora..!-Protestó Keyla.-Además... Yo quiero saber "eso".-
-¡NO! ¡Por favor, te ruego que no se lo digas a nadie!-
-Bueno, bueno, tranquilo, no pensaba...-Tyler cortó a Yimei a media frase.
-¡OS AYUDARÉ A LIMPIAR ESTE DESASTRE SI HACE FALTA!-
-¡Oh, eso es perfecto! Venga, sé que tienes una especie de poder que te permite generar electricidad... ¿Cres que podrás controlar tormentas..?-
-... Puedo lanzar rayos... No creo que pueda mover nubes...-
-Por intentarlo...-
Keyla interrumpió la conversación.-Bueno... Pues me quedo sin saber "eso", pero Yimei... Olvidas que aquí no se puede usar magia. La tormenta tendrá que desaparecer de forma natural y mientras a nosotras nos saldrán branquias para sobrevivir.-
-Es cierto... Mi memoria ya no es lo que era...-La expresión de Yimei cambió de preocupada a una sonrisa.-Ya que estás aquí, ¿Te gustaría desahogarte contándonos algo que te preocupe?-
Keyla puso los ojos en blanco observando el ambiente. Las goteras se habían multiplicado, la lluvia caía más fuerte, el agua ya le pasaba de los tobillos, Eiri volvía a flotar sin rumbo aparente y por la escalera bajaba una cascada con una potencia más fuerte.
-¡¿DE VERDAD!? ¿¡C-crees que es el momento para eso!?-
-Está bien, ¿Nos sentamos en la barra?- Contestó Tyler.
Keyla cayó sobre una mesa, abatida, viendo como los dos se iban tranquilamente a sentarse.-<<No tienen remedio...>> - Pensó.
Yimei se puso a limpiar un vaso como si nada.-Dime pues ¿En qué puedo ayudarte?-
-Verás... Yo inicié este viaje en parte para desubrir de dónde vienen mis poderes... ¿Sabrías contestarme tú esa duda? -
-Todas las respuestas llegan tarde o temprano.-Yimei comenzó los preparativos de una tila.
-¿Eh..? ¿Eso es que no sabes darme una respuesta?-
-Tranquilo, no son unos poderes malignos, eso debes recordarlo. Son poderes del bien, incluso salvan vidas, recuerda como salvaste a Lianndra.-
-Es cierto...-Dijo cabizbajo.-Esto... Prométeme que no contarás "eso" a nadie...-
-¡Por supuesto que no! No soy ninguna chismosa.-
-Cualquiera lo diría...-
-Te he escuchado, chico.-
-¿Qué has escuchado?-
-Déjalo... ¿Tienes algo más que contarme? Como por ejemplo... ¿De dónde sacaste el paraguas? y ¿cómo subiste hasta el segundo piso?-
-...-
-Vamos, vamos, si en realidad lo sé, pero quiero oírlo de tus labios.-
-El paraguas se lo robé a un señor... Y pude subir al segundo piso porque tengo práctica... Sabes mucho, así que sabrás que yo antes era todo un ladrón...-
-Sí, lo sabía... ¿Por qué vuelves a robar ahora que no te hace falta?-
-¡Para no perder la práctica! Nunca se sabe cuándo harán falta las habilidades de unas manos rápidas.-
-Si tú lo dices... Bueno, te he preparado esto, es una tila, invita la casa.-
-¿Estás segura de querer dar un regalo a un ladrón?-
-Sí, sé que antes solo lo hacías porque no te quedaba más remedio... Aunque podrías haber dejado, simplemente, que te metiesen en un orfanato.-
-¡JAMÁS! ¡No soy un simple huérfano! ¡No dejaré que me quiten mi libertad nunca! Además... Si alguien hubiese visto mi poder... Me habrían acusado de brujería y habría acabado realmente mal...- Al chico le entraron escalofríos.
-Lo siento... Tómate la tila, anda.-
Le hizo caso sin rechistar.-Uooh, es espectacular, como aquel zumo... Aquel que tuve que compartir de esa forma tan ridícula con Lianndra.-
Yimei soltó una carcajada al ver a Tyler sonrojado y a Keyla observando la escena con una sonrisa pícara.
-¡Nos vemos, chico! Y no se me olvida tu promesa de ayudarnos a limpiar.-Yimei le guiñó un ojo.
-¿Nos vemos..? ¿Acaso... m-me... vo..?- Tyler desapareció sin dejar rastro.
-¡Nos toca bucear! ¡El agua nos llega a las rodillas!-Dijo Keyla.
-Tranquila, todo pasará...-Yimei suspiró y volvió a rescatar a Eiri, este maulló feliz.
jueves, 3 de septiembre de 2015
·Capítulo 22: La verdad ·
-Será mejor que volvamos a mi casa...-Dijo Andrew, dolorido por la pelea y después de comprobar que Paz estuviese bien.
Todos asintieron, pero Dirian no parecía muy conforme.-Nosotros no vamos a quedarnos. Primero dejaremos a Victoria en tu casa, luego nos iremos.-
-¿QUÉ? ¿otra vez a dormir en el frío suelo? Por favor Dirian, quedémonos aquí...-
Dirian negó con la cabeza.-Lianndra, ¿Vienes con nosotros o te quedas con ellos?-
-Yo...-La chica estaba indecisa.
En ese momento, Paz reaccionó.-No vas a ir a ninguna parte, te vendrás a nuestra casa y luego nos acompañarás hasta Firyuk*.
Después de llegar allí puedes ir a donde te plazca.-
-¿Y quién eres tú para decirme qué hacer?-
-¡Ya basta, Dirian! Tiene razón, nos quedamos.-Se coló Kazen.
-Está bien... Pero solo si me explicas todo de una vez. Como por ejemplo eso que dijo la arpía de Silvei, sobre que soy un impostor...-
Kazen asintió.-Cuando lleguemos a la casa de este chico...-
Se pusieron en marcha. Dirian llevaba en brazos a una inconsciente Victoria, Andrew andaba trabajosamente, C y Paz andaban por la nieve, mientras que Kazen iba volando. Lianndra iba cojeando y con una expresión de angustia en la cara.
Tyler estaba inquieto.-Voy a parar un momento, tengo que hacer algo.-
-Ya casi hemos llegado... ¿Qué necesitas? Podemos esperarte.-Dijo Andrew.
-Me tomará un segundo, ahora os alcanzo...-
El chico de pelo azul asintió y siguieron andando.
Tyler soltó un silbido largo y fuerte.
Nada ocurrió.-Maldita sea...-
Cuando ya se daba la vuelta para volver con el grupo, escuchó un relinchar en la lejanía y al darse la vuelta vio lo que estaba buscando. Su yegua alta y gris, con el pelo corto, apareció seguida de otro caballo un poco más bajo, pero más corpulento, de color negro con una mancha blanca en la frente y la parte baja de las patas del mismo color.
Cuando llegaron hasta él se pararon, los recibió con una sonrisa.-Niebla, Eclipse, me alegro de veros.- Los acarició y se reunió con el grupo.
-¡Los caballos! Me había olvidado...-Dijo Dirian sorprendido.
Lianndra se burló.-Claro, ahora mismo solo puedes pensar en el estado de Victoria.-
El chico se sonrojó.-Cállate, Lianndra.-
La chica pelirroja empezó a reírse a carcajadas.
-Cállate o contaré "eso".-
Lianndra y Tyler dijeron a dúo:-¡NO!-
La chica se puso pálida de repente.-¡"ESO" NO!-
Y el chico también se puso nervioso.-Venga amigo, no lo digas... ¡Te lo pide tu mejor amigo!-
Dirian se rió.-No iba a decir nada, tranquilos, solo era una amenaza.-
A Lianndra le falló el tobillo, se veía que no había salido ilesa de la batalla.
Andrew los miró extrañado.-Buenoo... Ya hemos llegado, los caballos podéis dejarlos en el cobertizo de allí.
-N... Necesito ayuda...-
Tyler y Dirian la miraron como si la viesen por primera vez.
-¿¡La enana pidiendo ayuda!? ¿Qué mundo es este?-
-Increíble...-
-¡Dejad de burlaros y ayudadme..! El tobillo no me responde...-
Tyler se acercó y le indicó con la mano que se subiese a su espalda.
-Mejor no... ¡Ja..! Solo quería ahorrarme andar estos últimos pasos, pero no importa.- Lianndra intentó levantarse, pero volvió a caer.
-Venga, enana, sube o te subiré yo.-
La chica pelirroja se sonrojó y accedió a regañadientes.
Tyler silbó como lo había hecho antes para llamar a los caballos y que lo siguiesen sin tener que tirar de las riendas.-Te dejo en la cabaña esa y me voy, ¿Vale?-
-M-me da igual lo que hagas.-
Por fin llegaron a la casa de Andrew y el chico empezó a preparar cosas, encendió la chimenea y se metió en la cocina a preparar la cena.-Os aviso desde ya que no hay camas podéis sacar futones y mantas de ese armario de allí mientras yo preparo algo de comer...-
Dirian posó con cuidado a Victoria en la cama y se sentó a su lado, Lianndra también se sentó.
Los tres animales se subieron a la mesa.
-... ¿Me habéis oído..?-
-Me duele el tobillo.-
-¡Ah! ¿Me lo decías a mí?-
-Nosotros no tenemos manos.-Se excusó C.
Entonces entró Tyler.-Uuuuf, que frío hacía fuera... Aquí se está calentito.-Se rió con cara de tonto.
Todos lo miraron con una sonrisa maliciosa.
-Tyler, en ese armario hay futones y mantas, ¿Podrías sacarlos y colocarlos?-
-¿Eeeh? ¿Y-yo solo?-
Cada uno repitió su frase.
Después de un gran suspiro, Tyler aceptó.
A la hora de la cena, ya estaba todo listo y Victoria se había despertado.
C había tenido que explicarle que se había desmayado por usar su magia en exceso sin estar acostumbrada.
Después vio que su amiga Lianndra se quejaba por dolores y sin hacer caso a las advertencias de C, usó su magia de sanación.
-Ahora que hemos cenado... ¿Me podéis explicar a qué se refería Silvei..? Por favor.-Preguntó Dirian.
Victoria se arrodilló ante Dirian, llevaba haciéndolo desde que se había despertado.
-Es un honor tenerlo aquí, su majestad... ¡Muchas gracias por haberme salvado!-
-Para, por favor... No he hecho nada para que me des las gracias todo el tiempo. Además, ya te he dicho que puedes llamarme simplemente Dirian, no hacen falta formalidades.-
Kazen agitó las alas para llamar la atención.-¡No te arrodilles más! ¡No tienes motivos..! Sí, Dirian, vamos a darte una explicación...-
C comenzó.- Como bien dijo Silvei, tú no eres el verdadero príncipe de Glishes. Victoria es la verdadera y además de eso, ella es la Heredera del Poder*. Ya has visto su magia, la misma magia que la de la Diosa Gura.-
Dirian estaba muy sorprendido, fue recibiendo un duro golpe con cada palabra.
Paz continuó.-Tú solo eras un remplazo.-
A Dirian se le estaba cayendo el mundo
encima.-Esperad... ¿Me estáis diciendo que solo era un cebo para que no capturasen a la verdadera princesa? ¿Toda mi vida ha sido una mentira?-
-Dicho así...-Contestó Kazen.
-¡Kazen! ¿Por qué nunca me dijiste nada?-
La paloma solo agachó la cabeza.
-Esto es...-Dirian tenía el ceño fruncido.
Victoria intentó tocarle el hombro, como muestra de apoyo, pero él se levantó, la miró con ira, se puso su abrigo y salió de la cabaña dando un portazo. Pareció decir algo antes de irse.-Así que solo servía para eso...-
De nada sirvieron los intentos que hizo Tyler por detenerlo. Kazen quería seguirlo, no le dio tiempo a salir y chocó contra la puerta.
Tyler se levantó y se puso el abrigo, estaba decidido a seguir a su amigo.-Voy a buscarlo.-
-¡Yo también voy! Va a enfermar ahí fuera...-
-No. Victoria, tú no vas, no es problema tuyo.-C se lo impidió.
-¿Cómo puedes decir eso? Después de que nos haya ayudado a luchar... No es justo.-
-Yo voy contigo, Tyler.-Habló Lianndra mientras se ponía su abrigo.-Dirian es mi amigo desde hace mucho y a mí no me controla ninguna cerdita parlante.-
-Niña descarada... Si supieras no hablarías con esa chulería.-Contestó Paz, indignada.
-¡Parad! En esta casa no se discute ni se insulta,si ocurre...os mandaré al establo.-Andrew, nervioso, dijo lo que se le vino a la mente.
Lianndra sonrió y dijo.-Tu casa, tus reglas.-Soltó una risita.-De todas formas lo siento, no pretendía ofender a nadie.-
Kazen agitó las alas nervioso.-¿¡Vamos, o no vamos!?-
-Tranquilo, no llegará lejos.-Habló Tyler.
Y los tres salieron por la puerta.
# # #
La noche era fría y anunciaba una nevada, debían encontrar a Dirian pronto y volver a meterlo dentro.
Por suerte, Tyler tenía razón. No estaba muy lejos.
Lianndra lo vio tirado en la nieve, como si no le importase el frío y avisó a Tyler.
Se acercaron y él los miró.-Así que... Solo servía para eso... Solo me utilizabais, entonces no importa lo que me pase, ya han descubierto la verdad. Ahora paso a daros igual, a no importar en vuestras vidas. ¡Kazen, yo confiaba en ti!-
Kaze se sintió mal al verle así.-Comprendo lo que sientes ahora mismo, pero tienes que entenderlo no teníamos alternativa... Nos lo mandaron los superiores. ¿Qué íbamos a hacer, desobedecerlos? No podíamos hacer algo así, se nos castigaría... cruelmente...-
-Bueno, ya no se puede hacer nada, lo hecho hecho está...-
-La enana tiene razón, ahora lo que tienes que hacer es seguir adelante y no te preocupes por quedarte solo, pues yo nunca te abandonaré.-Dijo Tyler.
-Dices eso porque tú no quieres quedarte solo.-Dirian estaba deprimido totalmente.
-No insinúes que Tyler se quedará solo sin ti, porque yo... no lo dejaré solo. Nosotros somos tus amigos ¿No entiendes que lo único que queremos es que estés bien?-Añadió Lianndra, solo de pensar en lo que había dicho se sonrojó.
-¡Aquí no ayudáis, fuera! Quiero estar solo..-
Lianndra pasó a ponerse roja de furia. Cuando ella iba a reprocharle aquel comportamiento a Dirian, Tyler la paró para acto seguido darle un tortazo al chico de pelo gris. Todos menos Tyler se quedaron perplejos. -Haz lo que quieras, aquí hace frío y no tengo ganas de discutir con un niñato...-
-T-Tyler...-
-Vamos enana.-
De repente Dirian dijo algo
inesperado.-Esperad, empiezo a tener frío... lo siento de verdad. Vamos dentro todos.-
Tyler se giró sombrío pero cuando le dio la luz en el rostro Lianndra detectó que en realidad estaba sonriendo y a su vez les dedicó una sonrisa.
Todos asintieron, pero Dirian no parecía muy conforme.-Nosotros no vamos a quedarnos. Primero dejaremos a Victoria en tu casa, luego nos iremos.-
-¿QUÉ? ¿otra vez a dormir en el frío suelo? Por favor Dirian, quedémonos aquí...-
Dirian negó con la cabeza.-Lianndra, ¿Vienes con nosotros o te quedas con ellos?-
-Yo...-La chica estaba indecisa.
En ese momento, Paz reaccionó.-No vas a ir a ninguna parte, te vendrás a nuestra casa y luego nos acompañarás hasta Firyuk*.
Después de llegar allí puedes ir a donde te plazca.-
-¿Y quién eres tú para decirme qué hacer?-
-¡Ya basta, Dirian! Tiene razón, nos quedamos.-Se coló Kazen.
-Está bien... Pero solo si me explicas todo de una vez. Como por ejemplo eso que dijo la arpía de Silvei, sobre que soy un impostor...-
Kazen asintió.-Cuando lleguemos a la casa de este chico...-
Se pusieron en marcha. Dirian llevaba en brazos a una inconsciente Victoria, Andrew andaba trabajosamente, C y Paz andaban por la nieve, mientras que Kazen iba volando. Lianndra iba cojeando y con una expresión de angustia en la cara.
Tyler estaba inquieto.-Voy a parar un momento, tengo que hacer algo.-
-Ya casi hemos llegado... ¿Qué necesitas? Podemos esperarte.-Dijo Andrew.
-Me tomará un segundo, ahora os alcanzo...-
El chico de pelo azul asintió y siguieron andando.
Tyler soltó un silbido largo y fuerte.
Nada ocurrió.-Maldita sea...-
Cuando ya se daba la vuelta para volver con el grupo, escuchó un relinchar en la lejanía y al darse la vuelta vio lo que estaba buscando. Su yegua alta y gris, con el pelo corto, apareció seguida de otro caballo un poco más bajo, pero más corpulento, de color negro con una mancha blanca en la frente y la parte baja de las patas del mismo color.
Cuando llegaron hasta él se pararon, los recibió con una sonrisa.-Niebla, Eclipse, me alegro de veros.- Los acarició y se reunió con el grupo.
-¡Los caballos! Me había olvidado...-Dijo Dirian sorprendido.
Lianndra se burló.-Claro, ahora mismo solo puedes pensar en el estado de Victoria.-
El chico se sonrojó.-Cállate, Lianndra.-
La chica pelirroja empezó a reírse a carcajadas.
-Cállate o contaré "eso".-
Lianndra y Tyler dijeron a dúo:-¡NO!-
La chica se puso pálida de repente.-¡"ESO" NO!-
Y el chico también se puso nervioso.-Venga amigo, no lo digas... ¡Te lo pide tu mejor amigo!-
Dirian se rió.-No iba a decir nada, tranquilos, solo era una amenaza.-
A Lianndra le falló el tobillo, se veía que no había salido ilesa de la batalla.
Andrew los miró extrañado.-Buenoo... Ya hemos llegado, los caballos podéis dejarlos en el cobertizo de allí.
-N... Necesito ayuda...-
Tyler y Dirian la miraron como si la viesen por primera vez.
-¿¡La enana pidiendo ayuda!? ¿Qué mundo es este?-
-Increíble...-
-¡Dejad de burlaros y ayudadme..! El tobillo no me responde...-
Tyler se acercó y le indicó con la mano que se subiese a su espalda.
-Mejor no... ¡Ja..! Solo quería ahorrarme andar estos últimos pasos, pero no importa.- Lianndra intentó levantarse, pero volvió a caer.
-Venga, enana, sube o te subiré yo.-
La chica pelirroja se sonrojó y accedió a regañadientes.
Tyler silbó como lo había hecho antes para llamar a los caballos y que lo siguiesen sin tener que tirar de las riendas.-Te dejo en la cabaña esa y me voy, ¿Vale?-
-M-me da igual lo que hagas.-
Por fin llegaron a la casa de Andrew y el chico empezó a preparar cosas, encendió la chimenea y se metió en la cocina a preparar la cena.-Os aviso desde ya que no hay camas podéis sacar futones y mantas de ese armario de allí mientras yo preparo algo de comer...-
Dirian posó con cuidado a Victoria en la cama y se sentó a su lado, Lianndra también se sentó.
Los tres animales se subieron a la mesa.
-... ¿Me habéis oído..?-
-Me duele el tobillo.-
-¡Ah! ¿Me lo decías a mí?-
-Nosotros no tenemos manos.-Se excusó C.
Entonces entró Tyler.-Uuuuf, que frío hacía fuera... Aquí se está calentito.-Se rió con cara de tonto.
Todos lo miraron con una sonrisa maliciosa.
-Tyler, en ese armario hay futones y mantas, ¿Podrías sacarlos y colocarlos?-
-¿Eeeh? ¿Y-yo solo?-
Cada uno repitió su frase.
Después de un gran suspiro, Tyler aceptó.
A la hora de la cena, ya estaba todo listo y Victoria se había despertado.
C había tenido que explicarle que se había desmayado por usar su magia en exceso sin estar acostumbrada.
Después vio que su amiga Lianndra se quejaba por dolores y sin hacer caso a las advertencias de C, usó su magia de sanación.
-Ahora que hemos cenado... ¿Me podéis explicar a qué se refería Silvei..? Por favor.-Preguntó Dirian.
Victoria se arrodilló ante Dirian, llevaba haciéndolo desde que se había despertado.
-Es un honor tenerlo aquí, su majestad... ¡Muchas gracias por haberme salvado!-
-Para, por favor... No he hecho nada para que me des las gracias todo el tiempo. Además, ya te he dicho que puedes llamarme simplemente Dirian, no hacen falta formalidades.-
Kazen agitó las alas para llamar la atención.-¡No te arrodilles más! ¡No tienes motivos..! Sí, Dirian, vamos a darte una explicación...-
C comenzó.- Como bien dijo Silvei, tú no eres el verdadero príncipe de Glishes. Victoria es la verdadera y además de eso, ella es la Heredera del Poder*. Ya has visto su magia, la misma magia que la de la Diosa Gura.-
Dirian estaba muy sorprendido, fue recibiendo un duro golpe con cada palabra.
Paz continuó.-Tú solo eras un remplazo.-
A Dirian se le estaba cayendo el mundo
encima.-Esperad... ¿Me estáis diciendo que solo era un cebo para que no capturasen a la verdadera princesa? ¿Toda mi vida ha sido una mentira?-
-Dicho así...-Contestó Kazen.
-¡Kazen! ¿Por qué nunca me dijiste nada?-
La paloma solo agachó la cabeza.
-Esto es...-Dirian tenía el ceño fruncido.
Victoria intentó tocarle el hombro, como muestra de apoyo, pero él se levantó, la miró con ira, se puso su abrigo y salió de la cabaña dando un portazo. Pareció decir algo antes de irse.-Así que solo servía para eso...-
De nada sirvieron los intentos que hizo Tyler por detenerlo. Kazen quería seguirlo, no le dio tiempo a salir y chocó contra la puerta.
Tyler se levantó y se puso el abrigo, estaba decidido a seguir a su amigo.-Voy a buscarlo.-
-¡Yo también voy! Va a enfermar ahí fuera...-
-No. Victoria, tú no vas, no es problema tuyo.-C se lo impidió.
-¿Cómo puedes decir eso? Después de que nos haya ayudado a luchar... No es justo.-
-Yo voy contigo, Tyler.-Habló Lianndra mientras se ponía su abrigo.-Dirian es mi amigo desde hace mucho y a mí no me controla ninguna cerdita parlante.-
-Niña descarada... Si supieras no hablarías con esa chulería.-Contestó Paz, indignada.
-¡Parad! En esta casa no se discute ni se insulta,si ocurre...os mandaré al establo.-Andrew, nervioso, dijo lo que se le vino a la mente.
Lianndra sonrió y dijo.-Tu casa, tus reglas.-Soltó una risita.-De todas formas lo siento, no pretendía ofender a nadie.-
Kazen agitó las alas nervioso.-¿¡Vamos, o no vamos!?-
-Tranquilo, no llegará lejos.-Habló Tyler.
Y los tres salieron por la puerta.
# # #
La noche era fría y anunciaba una nevada, debían encontrar a Dirian pronto y volver a meterlo dentro.
Por suerte, Tyler tenía razón. No estaba muy lejos.
Lianndra lo vio tirado en la nieve, como si no le importase el frío y avisó a Tyler.
Se acercaron y él los miró.-Así que... Solo servía para eso... Solo me utilizabais, entonces no importa lo que me pase, ya han descubierto la verdad. Ahora paso a daros igual, a no importar en vuestras vidas. ¡Kazen, yo confiaba en ti!-
Kaze se sintió mal al verle así.-Comprendo lo que sientes ahora mismo, pero tienes que entenderlo no teníamos alternativa... Nos lo mandaron los superiores. ¿Qué íbamos a hacer, desobedecerlos? No podíamos hacer algo así, se nos castigaría... cruelmente...-
-Bueno, ya no se puede hacer nada, lo hecho hecho está...-
-La enana tiene razón, ahora lo que tienes que hacer es seguir adelante y no te preocupes por quedarte solo, pues yo nunca te abandonaré.-Dijo Tyler.
-Dices eso porque tú no quieres quedarte solo.-Dirian estaba deprimido totalmente.
-No insinúes que Tyler se quedará solo sin ti, porque yo... no lo dejaré solo. Nosotros somos tus amigos ¿No entiendes que lo único que queremos es que estés bien?-Añadió Lianndra, solo de pensar en lo que había dicho se sonrojó.
-¡Aquí no ayudáis, fuera! Quiero estar solo..-
Lianndra pasó a ponerse roja de furia. Cuando ella iba a reprocharle aquel comportamiento a Dirian, Tyler la paró para acto seguido darle un tortazo al chico de pelo gris. Todos menos Tyler se quedaron perplejos. -Haz lo que quieras, aquí hace frío y no tengo ganas de discutir con un niñato...-
-T-Tyler...-
-Vamos enana.-
De repente Dirian dijo algo
inesperado.-Esperad, empiezo a tener frío... lo siento de verdad. Vamos dentro todos.-
Tyler se giró sombrío pero cuando le dio la luz en el rostro Lianndra detectó que en realidad estaba sonriendo y a su vez les dedicó una sonrisa.
martes, 1 de septiembre de 2015
·Capítulo 21: Superando lo inesperado ·
-Silvei, maldita arpía...-Dirian dijo ese nombre como si lo escupiera y se incorporó.
-Anda,”príncipe” Dirian, yo también me alegro de verte.-Ella sonrió maliciosamente.-Siento haber tardado, me estaba encargando de una molesta mosca.-
Victoria no lo podía creer, de eso le sonaba el nombre... ¿Cómo no se había dado cuenta antes? Con la extraña familiaridad con la que los trataba Lianndra... Tenían que ser ellos.
Tener tantas preocupaciones no la dejaban pensar con normalidad, eso tenía que acabar.
Dirian miraba con cara de asco a Silvei.
-Mocoso hoy no vengo a por ti y menos después de descubrir que eres un impostor.-
-¿¡Cómo te atreves a acusarme de impostor!?-
-Oh, con que no lo sabes.-Se rió.-Bueno no tengo tiempo para explicártelo.-Intentó rodearlo para situarse al lado de Victoria, la que actualmente estaba detrás de Dirian.
Pero el chico se levantó empuñando
el hacha.-No vas a ir a ninguna parte.-
-Será mejor que te apartes de mi camino si no quieres problemas.-
Dirian no se movía de su posición.
-Vale, no me dejas otra opción...-La mujer serpiente se abalanzó sobre él a tanta velocidad que no le dio tiempo a reaccionar, haciendo que este se cayese, luego se enrolló entorno a su cuerpo y lo arrastró.
-¡Maldita seas una y mil veces!-
-Lanzarme maldiciones no te servirá de nada.-
Victoria se había quedado atónita, no le había dado tiempo a reaccionar.
Un grito a su espalda la hizo girarse, el rutu* contra el que luchaba Lianndra, la había atrapado. Con sus zarpas delanteras le aprisionaba las manos.
Lianndra a punto de morir, Dirian atrapado, los tres animales parlantes fuera de combate y Andrew y Tyler atrapados por sus propias armas.
Solo ella podía hacer algo, peroo... ¿El qué?
-Eh, tú, chica.-Le dijo.
Victoria levantó la cabeza y miró a Silvei a los ojos, pero no mostró ni miedo, ni desesperación, que era lo que sentía en esos momentos. Si no, rebeldía e ira.
Silvei siseó.-Interesante... Supongo que ya sabes lo que quiero... No creo que seas tan estúpida.-
-Me quieres a mí.-
-Exacto.-Hizo un sonido extraño algo parecido a una risa.-Entrégate y dejaré a tus amigos en paz.-
Dirian se retorcía molesto e intentaba escapar.-¡No la escuches! ¡Solo dice mentiras! ¡No..!-
La mujer serpiente lo apretó más.-¡Calla insecto..!-Siseó molesta.
Y Dirian solo pudo gruñir impotente.
-Bueno... Te doy unos minutos para que te decidas. Aunque... La vida no puede esperar unos minutos.-Volvió a hacer ese ruido parecido a una risa y miró a Lianndra.
Victoria también la miró y vio como a su amiga estaba a punto de caerle la baba de lava de su captor.
-¡Está bien, está bien! ¡PARA! ¡Cógeme a mí, pero antes suéltalos!-
-Seré yo la recompensada por capturar a la heredera del poder.-Se pasó con la risa malvada.
En ese momento, Tyler consiguió soltarse un brazo, lo estiró y lanzó un rayo contra el rutu* que amenazaba a Lianndra. No consiguió mucho, pero lo suficiente para que Lianndra escapase y crear un momento de confusión. La chica pelirroja lo aprovechó para acabar con el rutu* que la apresaba un instante antes.
-Vosotros lo habéis querido, moriréis aquí.-Hizo un gesto con la mano, el rutu* grande saltó por encima de Victoria y atacó a Lianndra hiriéndola.
Entonces se paró, dejó su cola quieta y abrió los pliegues de esta, dejando un ojo rojo a la vista.
Comenzó a aullar y a hacer movimientos raros, parecía que se había vuelto loco.
-¡Para, ya he dicho que me voy a entregar!-
-Pero tus amigos intentarían rescatarte y aunque estos insectos no puedan hacer nada, es mejor no arriesgarse.-
-¡No es justo! ¡Dijiste que los dejarías en paz!-
-Dije yo, no los rutus*.-
Ahora Victoria, sí estaba enfadada.
Se concentró en la bestia, sentía un extraño calor interior. El rutu* empezó a retorcerse de forma extraña, una luz blanca envolvió a Victoria, luego al rutu*. Se retorció y tembló de las cabezas hasta la cola y cuando llegó a ella, esta brilló y explotó.
Desapareció como lo habían hecho los otros.
Victoria sintió un gran cansancio, pero no podía mostrarlo en ese momento, aguantó como pudo.
Lianndra aprovechó para desatar a Tyler y Andrew.
-Enana... ¿Estás bien?- Preguntó Tyler, preocupado.
-¡Deja de llamarme así, si te sabes mi nombre!-
Tyler sonrió tristemente y dejó que la chica siguiese intentando desatarlos.
La expresión de Silvei cambió.-Puede que me hayáis dejado sin apoyo, pero aún tengo a este.-
Alzó a Dirian para que pudiesen verlo todos.-Así que... Si no queréis que sufra...-
-¡Eres una mentirosa, has roto una promesa y no te lo voy a perdonar!-
-Bah, tampoco es que me importe lo que opines de mí.-
-Victoria... ¡No te cambies por mí!-
Silvei lo apretó más todavía.-No te hagas el héroe ahora, solo eres un niño malcriado.-
Lianndra consiguió desatar a los chicos.
-...-Andrew miraba la escena con unos ojos gélidos.
-Uf... Al fin libre.. ¡Vieja, suelta ahora mismo a Dirian!-
Silvei siseó furiosa.-¡¿Vieja!? ¿¡Te atreves a llamarme vieja!?-
Lianndra le siguió el juego.-¿Solo vieja? ¡He visto fósiles como ella en los libros!-
La mujer serpiente mostraba una expresión de furia extrema, parecía que iba a explotar.
Justamente, los tres animales parlantes se despertaron.
En cambio, Victoria se sentía muy pesada, le fallaron las piernas y se cayó.
C no tardó en reaccionar, lanzó una bola de fuego a Silvei y esta se vio obligada a soltar a Dirian para esquivarla.
Mientras, Paz se reunió con Andrew.
Silvei se mostraba mucho más furiosa si es que eso era posible.-Que patéticos estáis así, a ver si volvéis a ser normales de una vez.-
-Eso no es algo que podamos decidir aquí, Silvei...
Y estoy deseando volver a ser yo para poder derrotarte de una vez.-
-Ni teniendo todos tus poderes conseguirías vencerme.-
-Fuera de aquí Silvei, somos más y no dudaremos en atacarte.-Habló C muy seria.
Siseó ya más tranquila y habló en tono burlón.-Que aburridos sois hoy en día. Espero que la próxima vez que nos veamos sepas hacer algo mejor... Victoria.-Contestó Silvei y, con un movimiento de mano, desapareció envuelta en humo blanco.
Dirian se levantó como pudo.-¡Maldita sea, ya se ha vuelto a escapar esa bruja!-
Victoria intentó levantarse también, pero se desplomó.
El chico de pelo gris fue corriendo a su encuentro.
-... ¿Qué le pasa..?-Preguntó preocupado.
-Es la...Luz que fluye por ella... Al usar su poder sin estar acostumbrada...-Al ver la expresión de Dirian,C procedió a tranquilizarlo.-Se le pasará,no te preocupes.-
Dirian le devolvió la mirada.-¿E-estás segura?-
-Sí.-
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-Actualizado el Glishcionario ;3
-Anda,”príncipe” Dirian, yo también me alegro de verte.-Ella sonrió maliciosamente.-Siento haber tardado, me estaba encargando de una molesta mosca.-
Victoria no lo podía creer, de eso le sonaba el nombre... ¿Cómo no se había dado cuenta antes? Con la extraña familiaridad con la que los trataba Lianndra... Tenían que ser ellos.
Tener tantas preocupaciones no la dejaban pensar con normalidad, eso tenía que acabar.
Dirian miraba con cara de asco a Silvei.
-Mocoso hoy no vengo a por ti y menos después de descubrir que eres un impostor.-
-¿¡Cómo te atreves a acusarme de impostor!?-
-Oh, con que no lo sabes.-Se rió.-Bueno no tengo tiempo para explicártelo.-Intentó rodearlo para situarse al lado de Victoria, la que actualmente estaba detrás de Dirian.
Pero el chico se levantó empuñando
el hacha.-No vas a ir a ninguna parte.-
-Será mejor que te apartes de mi camino si no quieres problemas.-
Dirian no se movía de su posición.
-Vale, no me dejas otra opción...-La mujer serpiente se abalanzó sobre él a tanta velocidad que no le dio tiempo a reaccionar, haciendo que este se cayese, luego se enrolló entorno a su cuerpo y lo arrastró.
-¡Maldita seas una y mil veces!-
-Lanzarme maldiciones no te servirá de nada.-
Victoria se había quedado atónita, no le había dado tiempo a reaccionar.
Un grito a su espalda la hizo girarse, el rutu* contra el que luchaba Lianndra, la había atrapado. Con sus zarpas delanteras le aprisionaba las manos.
Lianndra a punto de morir, Dirian atrapado, los tres animales parlantes fuera de combate y Andrew y Tyler atrapados por sus propias armas.
Solo ella podía hacer algo, peroo... ¿El qué?
-Eh, tú, chica.-Le dijo.
Victoria levantó la cabeza y miró a Silvei a los ojos, pero no mostró ni miedo, ni desesperación, que era lo que sentía en esos momentos. Si no, rebeldía e ira.
Silvei siseó.-Interesante... Supongo que ya sabes lo que quiero... No creo que seas tan estúpida.-
-Me quieres a mí.-
-Exacto.-Hizo un sonido extraño algo parecido a una risa.-Entrégate y dejaré a tus amigos en paz.-
Dirian se retorcía molesto e intentaba escapar.-¡No la escuches! ¡Solo dice mentiras! ¡No..!-
La mujer serpiente lo apretó más.-¡Calla insecto..!-Siseó molesta.
Y Dirian solo pudo gruñir impotente.
-Bueno... Te doy unos minutos para que te decidas. Aunque... La vida no puede esperar unos minutos.-Volvió a hacer ese ruido parecido a una risa y miró a Lianndra.
Victoria también la miró y vio como a su amiga estaba a punto de caerle la baba de lava de su captor.
-¡Está bien, está bien! ¡PARA! ¡Cógeme a mí, pero antes suéltalos!-
-Seré yo la recompensada por capturar a la heredera del poder.-Se pasó con la risa malvada.
En ese momento, Tyler consiguió soltarse un brazo, lo estiró y lanzó un rayo contra el rutu* que amenazaba a Lianndra. No consiguió mucho, pero lo suficiente para que Lianndra escapase y crear un momento de confusión. La chica pelirroja lo aprovechó para acabar con el rutu* que la apresaba un instante antes.
-Vosotros lo habéis querido, moriréis aquí.-Hizo un gesto con la mano, el rutu* grande saltó por encima de Victoria y atacó a Lianndra hiriéndola.
Entonces se paró, dejó su cola quieta y abrió los pliegues de esta, dejando un ojo rojo a la vista.
Comenzó a aullar y a hacer movimientos raros, parecía que se había vuelto loco.
-¡Para, ya he dicho que me voy a entregar!-
-Pero tus amigos intentarían rescatarte y aunque estos insectos no puedan hacer nada, es mejor no arriesgarse.-
-¡No es justo! ¡Dijiste que los dejarías en paz!-
-Dije yo, no los rutus*.-
Ahora Victoria, sí estaba enfadada.
Se concentró en la bestia, sentía un extraño calor interior. El rutu* empezó a retorcerse de forma extraña, una luz blanca envolvió a Victoria, luego al rutu*. Se retorció y tembló de las cabezas hasta la cola y cuando llegó a ella, esta brilló y explotó.
Desapareció como lo habían hecho los otros.
Victoria sintió un gran cansancio, pero no podía mostrarlo en ese momento, aguantó como pudo.
Lianndra aprovechó para desatar a Tyler y Andrew.
-Enana... ¿Estás bien?- Preguntó Tyler, preocupado.
-¡Deja de llamarme así, si te sabes mi nombre!-
Tyler sonrió tristemente y dejó que la chica siguiese intentando desatarlos.
La expresión de Silvei cambió.-Puede que me hayáis dejado sin apoyo, pero aún tengo a este.-
Alzó a Dirian para que pudiesen verlo todos.-Así que... Si no queréis que sufra...-
-¡Eres una mentirosa, has roto una promesa y no te lo voy a perdonar!-
-Bah, tampoco es que me importe lo que opines de mí.-
-Victoria... ¡No te cambies por mí!-
Silvei lo apretó más todavía.-No te hagas el héroe ahora, solo eres un niño malcriado.-
Lianndra consiguió desatar a los chicos.
-...-Andrew miraba la escena con unos ojos gélidos.
-Uf... Al fin libre.. ¡Vieja, suelta ahora mismo a Dirian!-
Silvei siseó furiosa.-¡¿Vieja!? ¿¡Te atreves a llamarme vieja!?-
Lianndra le siguió el juego.-¿Solo vieja? ¡He visto fósiles como ella en los libros!-
La mujer serpiente mostraba una expresión de furia extrema, parecía que iba a explotar.
Justamente, los tres animales parlantes se despertaron.
En cambio, Victoria se sentía muy pesada, le fallaron las piernas y se cayó.
C no tardó en reaccionar, lanzó una bola de fuego a Silvei y esta se vio obligada a soltar a Dirian para esquivarla.
Mientras, Paz se reunió con Andrew.
Silvei se mostraba mucho más furiosa si es que eso era posible.-Que patéticos estáis así, a ver si volvéis a ser normales de una vez.-
-Eso no es algo que podamos decidir aquí, Silvei...
Y estoy deseando volver a ser yo para poder derrotarte de una vez.-
-Ni teniendo todos tus poderes conseguirías vencerme.-
-Fuera de aquí Silvei, somos más y no dudaremos en atacarte.-Habló C muy seria.
Siseó ya más tranquila y habló en tono burlón.-Que aburridos sois hoy en día. Espero que la próxima vez que nos veamos sepas hacer algo mejor... Victoria.-Contestó Silvei y, con un movimiento de mano, desapareció envuelta en humo blanco.
Dirian se levantó como pudo.-¡Maldita sea, ya se ha vuelto a escapar esa bruja!-
Victoria intentó levantarse también, pero se desplomó.
El chico de pelo gris fue corriendo a su encuentro.
-... ¿Qué le pasa..?-Preguntó preocupado.
-Es la...Luz que fluye por ella... Al usar su poder sin estar acostumbrada...-Al ver la expresión de Dirian,C procedió a tranquilizarlo.-Se le pasará,no te preocupes.-
Dirian le devolvió la mirada.-¿E-estás segura?-
-Sí.-
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